El As de Espadas.

Capitulo Cuarenta y cinco: Adivina quién soy.

●・○・●・○・○・●・○・●

Vɪᴇʀɴᴇs 0450 ʜᴏʀᴀs ᴅɪ́ᴀ ᴛʀᴇs.

Mɪsɪᴏ́ɴ MI05/19HR/H

Mᴇɴғɪ, Sɪᴄɪʟɪᴀ, Iᴛᴀʟɪᴀ.

Salimos rumbo a Menfi que está a una hora de camino de nuestra ubicación, el blanco es una bodega donde tienen mercancía y de ahí es distribuida a los dealers quienes la venden por todo Sicilia.

Estamos ubicados al rededor ya que aquí si hay mucha vigilancia y movimiento.

Es viernes y las ventas suben por ser el inicio del fin de semana.

Hay cincuenta dealers, en seguridad hay casi sesenta hombres y todos están fuertemente armados.

Tenemos que preceder con mucha cautela, aunque no estén los hermanos Riina, el motivo es capturar a los dealers y decomisar la mercancía.

El apoyo de la DEA y de la Dirección Distrital Antimafia (DDA) italiana es de gran ayuda ya que sólo somos trece, Heiden no va a arriesgar a los médicos y a los ojos.

La operación denominada "limpia" está dirigida por Heiden ya que es el de mayor rango en las tres entidades que están involucradas.

Nos dividimos en cuatro grupos comandados por Heiden, Moore, Markelov y Zajarova cada uno con 20 integrantes.

La indicación es rodearlos mientras Vucic, Decir, Harris y yo vigilamos con los Tac-50.

La bodega tiene ventanas todo al rededor así que es probable que muchos se intenten dar a la fuga.

La voz de Heiden da la orden.

—Equipos en posición y avanzando —. Se da inicio, los equipos avanzan. Heiden por el frente, Zajarova flanco derecho, Markelov flanco izquierdo y Moore posterior.

—Atención detonación de Granada aturdidora en 3,2,1 —.

Explotan las ocho granadas, dos por zona y empezamos a dar de baja a la seguridad, que cae al piso desorientada debido a la explosión.

Los tiros se dan a la cabeza ya que no nos podemos arriesgar a que solo queden heridos.

La seguridad se trata de cubrir, pero las ventanas nos dan gran ventaja ya que por instinto se esconden del equipo en tierra quedando en nuestro blanco de manera fácil.

Unos cuantos se esconden bien, pero los sensores de calor nos indican a donde disparar.

Unos empiezan a correr, pero son detenidos por los equipos en tierra y los que se escapan se les dispara a las piernas.

Nos toma siete minutos tomar el control de la situación.

Heiden nos indica que bajemos a dar apoyo.

Estamos a cinco metros de la bodega cuando Wen alerta que hay vehículos sospechosos entrando al perímetro.

La DEA comienza a subir a los detenidos en varias camionetas, mientras nosotros tratamos de tomar posición para el contraataque.

Heiden toma la decisión de quemar la mercancía ya que se sabe que vienen por ella.

Es cerca de una tonelada de heroína y aproximadamente 500kg de cocaína.

Nos ponemos las máscaras ya que los vapores que emiten las drogas al ser quemadas son casi iguales que al ser consumidas.

Llegan cerca de seis camionetas y comienza el intercambio de proyectiles.