𝐒𝐢𝐞𝐦𝐩𝐫𝐞 𝐚 𝐦𝐢 (Concluida)

capitulo 10

Las tres mujeres llegaron a la hacienda y fueron recibidas por Emiliano

—ama ¿Dónde andaba?

—Fui al pueblo mi amor- dandole un beso en la mejilla- a comprar unas cosas que necesitaba

—Pero pos no trae nada - respondió no muy convencido con la respuesta de su madre

—Es que no encontré lo que quería... Bueno, los dejo porque tengo muchas cosas que hacer eh

—Esperame nana, te quiero decir algo, ahorita vengo Emi -guiñandole un ojo a su novio

Dentro de la casa las tres fueron hasta la recámara de Inés, ahí podrían hablar bien con su nana

—Ni se te ocurra querer ir a la cocina eh nana- dijo Diana en cuanto cerro la puerta

—Diana, es mi trabajo y tengo que cumplir con el

—Didi tiene razón nani, te dijeron clarito que no hicieras esfuerzos...

—Bueno, yo me voy, tengo algunas cosas que hacer... Pero ya te lo advertí nana- dándole un abrazo- nos vemos después

—Ay- viendola salir- está muy enamorada de ese muchacho Alejandro ¿Verdad?

—Como yo de Emi- sonriendole- nana... tu bebé es de mi papá ¿Verdad?

Ines solo sonrió, eso mismo se preguntaba ella

—ay debes estar muy feliz, yo aún no me la creo

—Estoy asustada Connie- sentándose al borde de la cama- tener un bebé a mi edad es algo muy complicado, en verdad me da miedo yo... Yo nunca imaginé pasar por esto de nuevo

—nana- hincandose frente a ella- te prometo que los voy a cuidar muchísimo a los dos, este pequeñito o pequeñita aún no nace y ya me robó el alma- poniendo su mano sobre el vientre de Inés- lo vamos a amar tanto y estoy segura que cuando Emi se entere se pondrá feliz y mi papá no se diga

Tres toquidos se dejaron oir de la puerta y connie se paró de inmediato a abrirla

—Connie quiero hablar con Ines, mejor dicho, necesito hablar con ella

—Yo los dejo solos para que hablen- volteando a ver a su nana- te adoro nana, no lo olvides

Constanza salió de la habitación dejando solos a Inés y Víctoriano

—Ines, lo que viste hoy en la mañana tiene una explicación, yo no quería pero...

—Victoriano, no me mientas por favor, mira yo entiendo que ella es tu mujer, entiendo también que no me veas de la misma manera desde que... Desde que pasó aquello

—No Ines, no pienses ni siquiera eso porque no es así, sabes que te amo y que solo pertenezco a ti

—Victoriano, yo no puedo competir contra la mujer que ahora mismo está esperando un hijo tuyo, no puedo borrar los recuerdos que tienes con ella y entiendo que los quieras revivir

—Ines ¿Y acaso haz pensado en como me siento yo? Yo tampoco puedo borrar los recuerdos que tienes con Loreto y aún así lucho día con día para que no pienses ni un poco en el pasado, confío en ti y más de mil veces te he repetido que te amo en cambio tú me estás demostrando que no confías ni un poco en mi, Ines yo solo estoy tratando de apoyar a Deborah porque me va a dar un hijo y es mi obligación estar al lado de ella aunque tú no lo quieras...

Víctoriano, al ver algunas lágrimas correr por la mejilla de Inés se arrepintió de lo que acaba de decir

—Lo entiendo, ella es tu mujer, te va a dar un hijo ¿No? Y ante eso no hay nada que yo pueda hacer