6. Nuevo destino

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Yoon: se que es repentino, pero, quisiera.... Ir un tiempo a las tierras del Imperio Kai- sugirió con cierto recelo a los que le acompañaban, como si temiera a que rechazaran su idea.

Yona: pero, es terreno enemigo- se notaba algo dudosa.

Kija: no es propio de ti el sugerir estas cosas, ¿no sería muy peligroso para la princesa?- pregunto con duda también, más por el bienestar de las dos chicas que viajan con ellos que por otra cosa.

Yoon: lo se, pero es que tengo curiosidad de algo- al decir esto los demás voltearon a verle- el imperio Kai se encuentra al norte del terreno de la tribu de fuego, por lo que es mucho más frío que nuestro terreno. Quisiera saber como los ciudadanos sobreviven al clima; si hay alguna planta que pudiéramos utilizar aquí también.

Hak: de por si llamamos mucho la atención.

Yona: no importa, si con esto ayudaremos a los habitantes de Kouka. Yo me sumo a esta aventura con ustedes- sentencio con felicidad contagiando al grupo.

Levantaron la tienda comenzando el viaje, en todo el camino las sonrisas, algo preocupadas de algunos, no se apartaron de ellos. Amaya, por su parte, sentía que una visión esta a punto de poseerla para mostrarle algo del futuro, por lo que estaba caminando más lento de lo normal preocupando a los dragones azul y amarillo quienes seguían su paso lentamente.

Llegaron a un puente muy angosto (y algo viejo), el cual separaba los dos imperios, el de Kai y el de Kouka. Empezaron a cruzar, delante de todos estaban Kija y Jae-ha, seguidos de Hak y Yona (el primero impidiendo que la colorada mirara abajo para que no se mareara) seguidos por Zeno, Amaya y Shin-ah, serrando la fila Yoon pendiente de todo lo que pasaba delante suyo.

Amaya se sostenía de las sogas mohosas mientras que daba pasos lentamente para no tropezar como había escuchado que le pasó a Yona y la casi caída de Kija. Sentía que la visión estaba a punto de llegar, solo rogaba con todo su ser que no sea en esas circunstancias, donde todos sus sentidos se "apagarían" dando inicio a imágenes que no terminaría de entender hasta que no terminaran totalmente.

Dicho y hecho, llego al final del puente y sintió como un gran sueño la invadía. El que alcanzo a sostenerla antes de caer fue Shin-ah quien decía su nombre algo extrañado y asustado, los demás estaban de la misma manera. La duda fue resuelta cuando Zeno les dijo que la poseyó el Muryuu para mostrarle una visión, que no era nada malo y que se podía seguir proponiendo que Shin-ah la cargara en su espalda hasta que se despertara.

Las horas pasaron, Amaya seguía sin despertar. Ya a la hora de dormir se fueron a dormir tranquilamente, Yoon esta vez fue a dormir con las bestias mientras que Hak iría a hacerlo con Yona y Amaya. Por si sucedía algo en la noche en ambas tiendas puedan proteger a los integrantes de ella. Yona no durmió muy bien esa noche, Amaya aun no podía despertar.

A la mañana siguiente siguieron avanzando, esta vez Amaya estaba en la espalda de Zeno mientras que Shin-ah los seguía de atrás. Llegaron a la aldea que estaba junto al la frontera, donde encontraron a una chica desmallada cargando con dos cubetas de agua.

Hak fue el primero en llegar a ella haciendo que la chica despertara después de barios intentos del ex general de la tribu del cielo. Esta los invito a ir a su tribu, ya que los confundió con artistas callejeros, cosa que los chicos aprovecharon para poder colarse al lugar sin mucho problema o escandalo.

Esa noche era la fiesta del fuego, donde las mujeres bailaban y se vestía todo de fiesta y alegría. Mientras esperaban a que llegara la noche las mujeres que quedaban en la aldea, ya que los hombres fueron llamados para estar en el ejercito del imperio, no pudieron echarles un ojo a los dragones y a Hak, siendo este ultimo el que se llevaba toda la atención de las mujeres jóvenes, como mayores.

Yoon, por su parte, se dedico a observar todo lo más disimuladamente posible para sacar toda la información que podía, ellos estaban mejor que los habitantes de la tribu del fuego, pero, tenían en agua como algo preciado. Consiguió información de una planta que sobrevive al frío y al calor, la Iza, y la única manera de que consiga (comer) un poco de ella era que participara en el baile de la fiesta que se realizaría esa noche.

Yona decidió hacerlo, gracias a que Hak se burlo de ella diciéndole que no sabía hacerlo bien. La tarde siguió su ciclo, los aldeanos ayudaban en los preparativos, las mujeres empezaban a vestirse con los atuendos típicos mientras que, algunas, bailaban en las calles entreteniendo a los niños que, aun, no podían participar de la fiesta.

Al anochecer, cuando todos ya estaban en sus puestos y las mujeres estaban iniciando sus bailes fue cuando Amaya despertó. El que estaba a su lado era Zeno, ella lo podía sentir, mientras que a lo lejos escuchaba música y gritos de algunos hombres alentando a mujeres. Una fiesta, supo deducir.

Zeno: esta vez fue bastante larga la visión- comenzó a hablar, la chica asintió sentándose junto a él, su piel se veía algo pálida y parecía estar mareada- ¿parará algo malo?

Amaya: no diría que es malo, pero, tampoco es bueno- el de pelo amarillo y ojos azules, se rio entre dientes recordando tiempos pasados- nuestro secreto se sabrá en esta aventura y estaremos rodeados de peleas y otras cosas que se irán sabiendo con el tiempo.

Zeno: oh- fue lo único que dijo, Amaya pudo imaginarse que la sonrisa que siempre portaba tembló un momento para volver a ponerla cuando el momento de duda llego. Cambio de tema- estamos en la fiesta de fuego, la señorita esta bailando un baile con una espada, las personas están sorprendidos y maravillados con ella.

Amaya: oh, interesante- sonrió hacia donde podía escuchar que estaba la multitud- ... es como años atrás cuando, entre peleas y guerras, nosotros nos divertíamos con estas pequeñas cosas- dijo con nostalgia.

Sus opacos ojos brillando con las lagrimas que amenazaban con mojar la venda y delatarla. La aparto para secar sus ojos y hacer como si nada, su compañero hizo lo mismo abrazándola por los hombros con un cálido abrazo, como quien abraza a su hermana menor.

Sin darse cuenta de la mirada fija de un chico de pelo azul y que usa mascara.

Inservible (Abi y Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora