Inservible (Abi y Lectora)

50. La historia de Yon-hi y Yu-hon

La historia de la madre de Soo-Woon era triste, a la vez tierna y romántica, el a verse enamorado del hermano del rey Il y como este trataba de cuidarla lo mas que podía para que su vida no fuera más difícil de lo que ya era al ser una descendiente del rey Hiryuu y su enfermedad carmesí que ya se había llevado la vida de todos sus antepasados.

La relación que tenían tanto Yu-hon, hermano mayor del anterior rey Il, y Yon-hi, madre de Soo-Woon era muy linda ante los ojos de todos los que conocían a la pareja, los dos se comportaban muy enamorados el uno con el otro y se confiaban la vida en todo sentido.

Trataron de mantener el secreto de que Yon-hi era la descendiente de sangre con el rey Hiryuu, pero, la verdad salió a la luz cuando la chica fue al templo acompañada por Il, los sacerdotes se dieron cuenta de su ascendencia por lo que empezaron a tratarla de manera distinta molestando a Yu-hon empezando a pelear con Il mas a menudo de lo que ya lo hacían, el primero porque no quería saber nada con los sacerdotes y el templo y el segundo por el "hipócrita".

Al día siguiente de que el secreto fue revelado a los sacerdotes, la gran mayoría fueron ejecutados siendo los únicos que se salvaron los dos mas jóvenes, Ik-Soo (el que después apadrino a Yoon) y K (que después se volvió la esposa de Il y la madre de Yona). Yon-Hi se mostro deprimida por ese suceso y a eso se le sumo la muerte de su madre que no soporto el que mas personas supieran de su ascendencia de sangre quitándose la vida apenas el sacerdote se retiro de su casa.

Yon-Hi conoció el lado cruel del futuro de Kouka Yu-Hon, pero, eso no impidió que los sentimientos hacia el disminuyeran, después de todo el hombre hizo lo mejor que pudo para cumplir la promesa que le hizo a la madre de su prometida, con gran pesar por parte de ella acepto la realidad y siguió adelante.

--- --- 9 años después --- ---

Los años han pasado, se casaron y tuvieron a su único hijo Soo-Woon, los tres eran felices y el nombre de Yu-Hon se hizo popular entre los habitantes de Kouka por todas sus victorias que ha dado al reino. Soo-Woon ha demostrado ser un niño brillante y con una gran curiosidad, ya a su corta edad hablaba y se movía mejor que muchos niños de su edad. También se enteraron de que el rey se caso hace poco, eso extrañaba al matrimonio porque nunca el príncipe a mostrado interés en alguna chica.

Dicha muchacha no era nadie mas que la sacerdotisa que conoció aquella vez hace años, tal parecía que era una de, los pocos, sobrevivientes, de el incendio que provoco Yu-Hon hace tantos años atrás. Kashi, la sacerdotisa, mostraba una quemadura muy grande en su rostro, Yon-Hi pensaba que era una marca del intento de asesinato que vivió.

Igualmente no pudieron conversar mucho ya que llego Il y se llevo a Kashi sin dejar que las dos intercambiaran muchas palabras, la mirada que el príncipe le envió a la descendiente del Hiryuu era totalmente fría y notoriamente molesta hacia la presencia de Yon-Hi delante de él. Eso no auguraba nada bueno para el futuro.

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Paso el tiempo Kashi quedó embarazada y dio a luz una niña de pelo rojo, cosa que llamo la atención de todos ya que ambos padres son de pelo negro. Il seguía mostrándose desagradable ante su hermano mayor y su familia haciendo que hasta Soo-Woon notara que no era aceptado para que estuviera con sus tíos y prima.

El tiempo siempre seguía, el trato entre los hermanos era cada vez mas hostil entre ellos, cada vez que se observaban peleaban y sus hijos se veían a escondidas cuando ambas madres se quedaban a solas en los patios del palacio. La salud de Yon-Hi tampoco mejoraba siendo un punto de pelea entre el matrimonio, los dolores de cabeza y del cuerpo iban y venían y parecía que todo empeoro cuando el rey enfermo de gravedad, parecía que no iba a sobrevivir mucho mas.

Y, al poco tiempo el rey murió dejando como sucesor al menor de los hermanos como el sucesor al trono. Il, quien no era tan apoyado como su hermano mayor tomo el trono con todos en contra, siendo su único aliado Murdok y su hermano mayor. A su vez, gracias a los nervios que se Vivian en todas partes Yon-Hi empeoro decidiendo que la familia se alejara del palacio para estar en un ambiente mas relajado.

Lo que no contaban es que dos años después de que Il asumiera el trono Kashi fuera asesinada y que Yu-Hon muriera pocos meses después de ese suceso, dejando a un esposo y su hija sin madre y a una mujer y a su hijo sin padre, y próximamente sin madre.

La tristeza que mostraba Yon-Hi era enorme, ya había dejado de comer y solo sonreía, un poco, cuando estaba cerca de su hijo. Soo-Woon hacia lo que podía para contentar a su madre, trataba de que comiera, que saliera de su habitación, donde se quedaba acostada día y noche, si a eso se le sumaba el saber que en realidad el que mató a su esposo fue el rey Il, quien le mato porque Yu-Hon mato a Kashi ya era demasiado para la pobre Yon-Hi.

Soo-Woon, a su vez, demostró que el mismo se haría cargo de destronar a su tío una vez que tenga la edad suficiente para hacerlo, eso a su madre la había alterado, no podía saciar esa sed de sangre que había crecido en su pequeño hijo de nueve años, solo podía ver con dolor como este decidía que iba a reinar en el futuro y no dependería de esos dragones con los que Il estaba más que obsesionado.

Aunque, eso no era algo que Yon-Hi pudiera ver con sus propios ojos, ni la muerte de Il, ni si quiera el como los dos primos eran separados por las malas decisiones de sus padres y del propio destino, solo podía pedir que las cosas no fueran tan difíciles en el futuro. Esos fueron los pensamientos de Yon-Hi antes de morir a causa de la enfermedad carmesí, enfermedad que nadie quiere que salga a la luz