Inservible (Abi y Lectora)

39. Entregándose

En el castillo de Tae-Jun ya estaban todos reunidos en la habitación de Jaae-Ha, quien estaba ya en pie sin ninguna dificultad, conversaban entre todos tranquilamente y se preguntaban la ubicación de su hermana menor-mayor, sin saber muy bien en donde estaba. Shin-Ha incluso se preguntaba en dónde estaba Ao quien no veía desde la mañana. Conversaban tan tranquilos que, cuando sintieron un vacío de repente, fue como la paz antes de la tormenta. Enseguida los cuatro dragones levantaron sus cabezas a la misma dirección como si fuera robots, cosa que alertó a los presentes.

Zeno: no siento la presencia de Amaya- sentencio el de melena amarilla contestando la pregunta no dicha por Yona.

Tae-Jun: ¡Hak!- entró violentamente el hermano del general de la tribu de fuego llamando la atención de todos- una sirvienta me dijo que Yona se fue...- no termino la frase al ver que la pelirroja estaba delante suyo mirándolo con extrañes- ¿Qué es lo que está pasando? Una sirvienta me dijo que la princesa Yona se fue con un tipo extraño, eso fue hace como una hora.

Kija: debe ser cosa de Amaya- su preocupación era palpable, los otros tres dragones estaban igual que el.

Tae-Jun: la chica también me dijo que la llamaba un tal Ogi- Hak les contó a los demás que el funcionaba como un informante a los habitantes de Kuto, siempre y cuando pagaran el precio.

Yona: en marcha, chicos, llévanos hasta su última ubicación, a lo mejor la podemos rastrear desde alli- la chica se coloco la capucha y salió de la habitación siendo seguida por los demás.

Los que encabezaban la marcha eran Zeno y Shin-Ha, siendo seguidos muy de cerca por los demás. Al llegar a donde sintieron que desaparecía el poder de su hermana dragón solo pudieron ver a un herido Ogi junto a otra persona tratando de detener su sangrado.

Yona: ¿Qué le pasó a Ogi?- el chico al verse alterado prefirió callar- somos sus amigos, ¿Qué es lo que paso?- sin esperar más tiempo Yoon empezó a atender su herida que no dejaba de brotar sangre.

Hombre: fue culpa de ese grupo horrible, todos de negro, con capuchas, se llevaron a la chica que venia con el, no se a donde, pero, se notaba que era algo peligroso- el miedo era notorio en el rostro de hombre, los dragones se mostraron alterados al no sentir nada de parte de la dragón del grupo.

Hak: ... princesa Yona- llamo a la de melena roja, esta volteo a verlo aun preocupada por el destino de su amiga- tendremos que ir con ellos, solo asi tendremos alguna oportunidad- sentenció Hak, Yona, con gran pesar en su rostro asintió. No tendrían de otra.

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Mano derecha: no puedo permitir que ustedes vayan solos a buscar a su amiga- sentenció el hombre con seguridad, entendía que se trataba de una de las dragones, una que en ninguna de las leyendas aparece, pero era demasiado peligroso.

Kija: pero que cosas dices, tenemos que ir a por nuestra hermana, además, ustedes no nos pueden dar ordenes, solo la señorita Yona tiene ese poder- sentenció el alvino, siendo secundado por los otros tres dragones y Yona.

Mano derecha: ¿y ustedes piensan que solos podrán hacerles frente?- su tono burlón le hizo aparecer un tic al grupo liderado por Yona.

Zeno: entonces, señor, ¿Qué propones?- dijo el inmortal, los demás prestaban atención de lo que decía el contrario.

Mano derecha: salvarla es lo obvio, solo que, hasta a nosotros, sería una tarea muy difícil, para ustedes también lo será. No opinan lo mismo, "princesa" Yona y Bestia del trueno- sus últimas palabras eran burlescas.