Inservible (Abi y Lectora)

9. Tribu del agua

Al llegar a una de las ciudades portuarias de la tribu del agua se había desatado una tormenta que hacia imposible que se pudiera dormir afuera. Consiguieron una habitación de bajo costo donde dormirían los ocho chicos.

Todos entraron a la habitación y empezaron a secarse como podían con las toallas que se encontraban en la habitación. Yona, la única que miraba por la ventana, se lamentaba que no podía ver como de hermoso era el paisaje de la ciudad, siendo que es considerada como una de las más hermosas vistas de todo Kouka.

Yona: el día es demasiado gris como para apreciar los verdaderos colores de la naturaleza- se quejo en voz baja sin apartar la mirada de la ventana, Hak a su lado asintió.

Amaya: Zeno- le llamo la atención, este junto a Shin-Ah se estaban cambiando- ¿el "gris" es como el color del humo cuando se quema algo?

Zeno le contesto que si y que la chica era muy lista acariciando su cabeza con cariño despeinando su cabello. La reacción de los que la escucharon fue diferente, algunos se mostraron extrañados por la comparación tan rara y otros sintieron lastima porque ella tenía que buscar comparaciones para saber cual es el color de algo.

Aclarada esa duda fue el turno de las chicas de cambiarse a ropas secas dejando que los chicos salieran de la habitación. Jae-Ha intento quedarse para ayudarlas siendo detenido por Hak y una mirada fiera por parte de Kija.

Este mismo decidió irse a dar una vuelta para revisar la zona, intento llevarse a Hak pero este decidió no hacerle caso, en parte por la mirada de Yona cuando termino de arreglarse, y también porque no quería volver a mojarse.

Jae-Ha: entonces iré a dar una vuelta- ya estaba a punto de salir de la habitación cuando las dos chicas lo detuvieron.

Yona: ten cuidado Jae-Ha.

Amaya: cuida tus espaldas- sentencio la chica de pelo violeta, este asintió a ambas para después salir por la puerta.

Los pedidos de las chicas fueron en vano, el dragón verde decidió entrar a una de las casas de mujeres y le dieron un bebida con drogas tan fuertes que le hicieron debilitarse al escaso tiempo de beberla, alcanzo a salir de la posada y caminar bajo la lluvia siendo encontrado por los chicos poco después de sentir que sus piernas no daban más.

Lo próximo que supo fue al día siguiente, después de pasar una noche de "abstinencia" gracias a las drogas que le dieron, cuando se encontró atado en su cama y junto a él Shin-Ah y Amaya sin apartar sus "miradas" de él. Le explicaron lo que sucedió en la noche anterior y donde estaban los chicos actualmente. Enseguida se desato utilizando unas cuchillas que guardaba entre sus ropas y partió para encontrarse a los chicos, estando Shin-Ah y Amaya sosteniendo su cuerpo en un intento de detenerlo, cosa que no consiguieron.

Amaya: Amaya pide disculpas Yona- se lamento soltándose del dragón verde y quedando junto al dragón azul, quien también pidió perdón.

No tardaron en convencer a Jae-Han, quien estaba reacio de que Yona se relacionara con cosas como lo que pasaba en ese pueblo, por lo que la misión seguía su curso y no se detendrían hasta que, por lo menos un poco, de los malhechores sean detenidos.

Amaya: ... tendremos ayuda dentro de poco- dijo en bajo siendo escuchada solo por Yona, quien asintió a su vez, las dos mirando a la dirección de donde una mirada penetrante no dejaba de seguirlos desde hace tiempo.

--- ---

Al día siguiente fueron a seguir con la investigación de los negocios de drogas en esa pueblo, en el transcurso Yoon se separo para hacer negocios e intercambio mientras que los demás se quedaron a conversar y trazar una ruta a seguir. Una mirada los estaba siguiendo desde hace un tiempo, todos se habían dado cuenta, pero, al tratarse de tres chicas, una rubia y dos morenas, lo dejaron estar.

Cuando Yoon volvió de conseguir lo que pudo de información y de otras cosas necesarias los ocho siguieron su rumbo. Esa noche irían para conseguir información a un club nocturno, Yona sería el cebo, , bailando con alegría en la pista, Jae-Ha tocaría la flauta y rescataría a Yona si llegaba a ser necesario mientras que los demás conseguían información de los que estaban allí.

Una chica, de la edad de Yona entro en el lugar luciendo intimidada y sin saber en donde se había metido, ellos al verla y a un tipo demasiado cerca a ella se notaron muy tensos y atentos a detener al señor si era necesario. Cosa que se vio realidad cuando el tipo le dio un puñetazo en la nariz asiendo que la chica de cabellera negra callera al suelo y sangre saliera por su nariz.

Antes de que pudieran hacer algo los dragones, las dos mujeres del grupo detuvieron al tipo antes de que volviera a golpear a la herida adolescente, Yona le propino una patada mientras que Amaya apartaba un poco a la herida haciendo un poco de presión en su nariz para que el sangrado se detuviera.

La chica se mostro sorprendía ante las dos chicas delante suyo, antes las consideraba sospechosas, ahora las consideraba sus heroínas y salvadoras. Aunque su ensoñación no duró mucho, unos tipos se acercaron a donde estaba Yona y empezaron a tocarla obligando que volviera a la pista de baile o hiciera algo, más que bailar con ellos.

Eso desencadeno una reacción en cadena. Muchos hombres empezaron a violentarse golpeando entre si mientras que otros empezaron a herir gravemente a otros. Los que pertenecían al mismo grupo donde estaba las dos chicas empezaron a actuar hiriendo a los hombres violentos o simplemente dejándolos inconscientes en el suelo.

La que estaba junto a ella, aun haciendo presión en su nariz, la corrió a un costado para no ser un estorbo a los demás que peleaban, la chica de melena negra que los observaba en la tarde estaba en completo shock, no hablaba ni se movía por su propia voluntad. Parecía una piedra.

Yona: ya todo termino, ¿estas bien?- la chica estaba tan conmovida que no supo que más hacer que llorar entre los brazos de Amaya mientras que Yona acariciaba su cabeza para que se tranquilizara, entre las dos la chica de, melena negra sintió un calos agradable.

Curaron sus heridas mientras que hablaban un poco para que los nervios de ella se terminaran de ir, antes de saber como se llamaba la desconocida llegaron otras dos personas llamándola por su nombre y presentándose como sus guardias personales, se llamaba Lili y fue nombrada por esas dos como "señorita" por lo que supieron que era alguien importante.

Cuando las tres se fueron los ocho restantes se dirigieron a su habitación en la posada donde planearon el plan a seguir para el día siguiente, donde las chicas se quedarían en la casa cuidando lo que tenían mientras que los chicos irían a otro lugar nocturno para conseguir más información, siendo que esa noche no consiguieron nada.