Inservible (Abi y Lectora)

27. Nueva misión

La preocupación no dejaba la cabeza de Yona desde el suceso de esa misma mañana, el encontrarse con la primera princesa de Xing, Kou Ren, no fue lo que ella tenía imaginado. La guerra estaba más cerca de iniciar de lo que ella misma había imaginado. No quería que eso sucediera, no porque no confiara de Soo-Woon y sus soldados, ella veía innecesaria una guerra que se llevara vidas inocentes del imperio del que estaba ahora mismo.

Ya contaba con la ayuda de Hak, ya era notorio, la ayuda de los dragones. Sin embargo, la duda estaba en sus ojos y en su manera de actuar, no sabía que hacer para evitar el enfrentamiento de ambos países sin que haya bajas, por lo menos no tantas. Cuando le contaron la noticia a la princesa Tao, una notable tensión invadió a los sirvientes de la princesa y a ella misma.

Yona, en su afán de dar alguna solución trató de ofrecer su ayuda, pero, no alcanzó a hablar, un nudo grande invadió su garganta haciéndole imposible el hablar. Hak consiguió que se calmara de su evidente ataque de nervios, y Amaya, quien estaba junto a la pareja desde que ambos llegaron, apoyo su mano en el hombro de la colorada llamando su atención.

Amaya: mantén la calma, no nos podemos meter así como así en esta guerra sin saber que pasa en todos los frentes. Primero hay que reunir información y, después, veremos que hacemos- sugirió la chica de pelo violeta, Hak a su lado asintió dándole la razón- yo puedo ver lo que sucederá, pero, nunca esta de más saber el pasado- lo ultimo lo dijo susurrando para no ser escuchada por los habitantes de Xing que están junto a ella. Hak volvió a asentir, al igual que Yona.

Yona: yo lo que no entiendo, princesa Tao- llamó la atención de la susodicha- la princesa Kou Ren mostraba un gran amor por su pueblo, ¿Por qué esta tan empecinada a iniciar una guerra que puede morir muchos de sus súbditos?

Tao: ... mi hermana tiene un gran odio al padre del rey Soo-Woon. El general Yu-Hon- menciono con gran pesar, parecía que ella misma se veía afectada por lo que sucedió con el fallecido general.

Les explico de los años de batalla entre ambos imperios, lo sangrienta que fueron los enfrentamientos y como, al ser Xing los perdedores, fue lugar a la más grande matanza siendo encabezados por ese mismo general, matando soldados y sibiles a diestra y siniestra. Prometieron a mi padre devolver a todos los soldados prisioneros, pero, solo llegaron sus cabezas cortadas, entre ellas al enamorado de la primera princesa asiendo que el rencor de Kkou Ren creciera día a día.

Tao: ... el rey Il se encargo de disculparse por lo que hizo su hermano haciendo tratados de paz y dándonos tierras. Pero, desde que subió Soo-Woon, solo escuchamos que ataca a otros países. Eso hizo que el pánico reinara en las calles por una segunda guerra que se llevara más vidas.

Amaya: y si no detenemos eso, si que habrá una guerra, y los resultados no serán buenos para ningun frente- sentenció la chica, los que conocían su poder no pudieron evitar el pensar en lo peor, mientras que los habitantes de Xing no compartieron el mismo pesar, para ellos, su reino era el que tenía las de perder.

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La tención se fue evaporando al paso de las horas, ya en la noche, los dragones habían decidido salir a patrullar las calles para saber como estaban las cosas, al momento de irse se despidieron de Yona, Amaya, Hak, Yoon y los sirvientes de la princesa Tao y a ella misma.

Tao: cuídense- les pidió a los cuatro que estaban a punto de irse.

Hak: ¿seguro que van a estar bien?- su tono parecía perezoso, pero, se notaba algo preocupado.

Kija: seguro, tu preocúpate de cuidar a nuestra hermana y a Yona- respondió de lo más seguro el albino, siendo secundado por los otros tres dragones. Shin-Ha dejo a Ao junto a Amaya, quien sonrió ante el chico y acaricio la cabeza de la pequeña ardilla.

Amaya: Amaya les recomendaría no ir- fue la sincera opinión de la chica, eso preocupo un poco a los que sabían de su poder- pero se que nada de lo que Amaya les diga ara que desistan de ir a recorrer el pueblo- su sonrisa parecía triste- cuídense y eviten hablar con nadie, más vale no hacer algo que les enoje a lo que les puede pasar.

Jae-Ha: descuida Amaya-san, nos cuidaremos los unos a los otros- su sonrisa parecía tranquilizar a los presentes, pero, no a la susodicha.

Shin-Ha: ... volveremos- fue su simple comentario apoyando su mano en la cabeza de Amaya sintiendo como ella asentía.

Amaya: ... Amaya sabe que lo aran- susurro tan bajo que fue escuchado solo por el de pelo azul y Yona, quien estaba junto a ella. Los cuatro se fueron dejándolos solos y con un mal sabor de boca a todos- ... pero no hoy- ahora Yona era la que tenía una expresión muy seria y preocupada en su rostro.

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Y como Amaya había visto en la visión sucedió. Los súbditos de Kou Ren capturaron a los cuatro dragones y a Yoon, quien fue a buscarlos al ver que tardaban mucho, por lo que todos fueron a donde estaba la sede de Kou Ren para negociar la libertad de los cuatro dragones y de Yoon para que no les hicieran nada. Llegaron a un acuerdo, después de que Yona revelara su identidad y jurar que estaba en contra de Soo-Woon, por obvias razones.

Yona: iré a donde esta Soo-Woon y negociaré para que impida la guerra, solo si prometes que dejaras ir a mis amigos.

Kou Ren: ¿y piensas que vas a ser tratada como igual, por el mismo hombre que mató a tu padre?

Amaya: ... no perdemos nada por intentarlo- fue el primer comentario de la chica, esas mismas palabras alentaron a los chicos por lo positivas que eran.

Sin más la princesa les dio permiso para irse prometiendo que no les pasaría nada a sus amigos. Amaya miro por ultima vez a donde estaban las presencias de sus amigos, haciendo una reverencia a esa dirección para empezar a seguir a Yona y a Hak para interceder contra Soo-Woon.