Cazadora • BNHA x OC•

•CAPITULO 53•

Kanae recibió la sudadera de un color verdoso oscuro que era acercada a ella por el cazador y de inmediato se la puso antes de volver a tomar su taza de café y soplar un poco para darle un sorbo.

Tras probarlo sonrió de gran manera satisfecha con el sabor y la cálida sensación.

—Ha....que delicia.

Keigo sonrió al escucharla, la observó un momento y habló cuando fue atrapado por la mirada celeste.

—¿Estas mejor?

—Claro, luego de esa siesta y esta rica comida me siento renovada.

—No hablo de eso.

Kanae observó los dorados ojos sobre ella, podía notar una pizca de preocupación en ellos a pesar de la sonrisa amable que le dirigía.

Cuando Dabi abrió el amplio ventanal frente a ellos para permitirles salir hacia el balcón la chica acomodó sus codos en la ancha baranda aun sosteniendo entre sus manos la taza de café.

La ciudad era iluminada sólo por las luces del alumbrado público, las gruesas nubes no permitían observar ninguna estrella y los copos de nieve aún caían sobre sus cabezas con suavidad.

El humo blanquecino salía de entre los rosados labios de la cazadora mientras sus celestes ojos se posaban en el cielo apreciando la nieve caer.

Un corto suspiro salió de entre sus labios al sentir la mirada de ambos chicos sobre ella, estos se habían acomodado uno a cada lado de su cuerpo, bastante cerca buscando que la chica no se enfriara más de la cuenta con su capricho por salir al balcón.

Comprendía su preocupación y por mucho que quisiera evitar hablar sobre el accidente no podía solo ignorarlos.

—Estoy bien...Enserio lo estoy.

Trató de sonar segura mientras acariciaba la taza entre sus dedos.

—¿Qué hacías antes de dormir? —La voz de Dabi, carente de emoción como de costumbre se escuchó por lo bajo.

—Mm.

—No debes forzarte si no quieres, Kanae-san.

Keigo se inclinó ligeramente para observarla.

—Agh, son demasiado considerados para su propio bien. —Murmuro más para sí misma sin despegar su mirada de en frente— Estaba en una llamada con Queen.

—¿Tu amiga?

La chica asintió.

—¿De que hablaban?

Dabi quitó su mirada de la chica y la dirigió hacia la ciudad adivinando su respuesta.

—Estábamos decidiendo algunas cosas sobre su boda...

La chica habló suavemente, estaba casi segura, desde el momento en que se cruzó con la mirada dorada tras despertar, el héroe estaba al tanto de su situación actual.

Aunque no le había preguntado directamente a Dabi, podía adivinar que éste le había contado lo ocurrido en su pasado tras encontrarla en ese estado.

Por supuesto que no le molestaba que el héroe estuviera enterado de lo ocurrido, pero sí se sentía algo más vulnerable al responder cuando sabía lo que ambos estarían pensando tras escucharla.

Al igual que ella, sabían que su descontrol se debió a sus recuerdos sobre el día en que se enteró, de la peor manera, que podría haberse casado con quien por tantos años soñó hacerlo.