•CAPITULO 12•

1.1K 134 27
                                    

—Que molestia...

Murmuró Kanae mientras movía con precaución la venda que rodeaba su antebrazo con unos ligeros tonos algo rojizos llegando a la capa exterior provocando que su ceño se frunciera sin percatarse, no estaba feliz con su totalmente evitable descuido. La herida no era de gravedad, Pero si había sido difícil que dejara de sangrar mientras realizaban su trabajo.

Estaba sentada en el piso de su amplia sala esperando a su escolta de cabellos lilas quien fue enviada en busca del botiquín mientras Dabi había ido a desinfectar sus manos, una vez terminó se sentó frente a la chica de cabellos grises cruzando sus piernas en el piso también para evitar que ésta se moviera de más.

—Es bueno que no sangrara aún más dentro de la mazmorra. —Comentó el chico con una suave y seria voz mientras tomaba el brazo de la cazadora elevándolo con delicadeza para tomar las vendas.

—Tuve cuidado de no usar ese brazo.

—Buena decisión.

Tras unos segundos de observarlo antenta decidió volver a hablar.

—Dabi...

—¿Mh? —Respondió el de cabellos negros mientras quitaba la tela que cubría la herida.

—¿Aún estas molesto?

La mirada de Dabi se elevó a hacia sus ojos unos segundos, estaba serio, más de lo normal. La chica con su basto conocimiento sobre su compañero a lo largo de sus años compartidos estaba segura de que algo andaba mal provocando un sentimiento de desazón en su pecho.

—No lo estoy. —contradijo volviendo su mirada azul hacia ella.

—¿Entonces? —Volvió a insistir sin despegarle la mirada de encima.

—Estoy preocupado, Kanae. —Admitió dejando notar el ligero cambio en su fría voz— Sólo me descuidé unos minutos y acabaste herida y metiéndote en situaciones fuera de nuestra jurisdicción.

—Pero Keigo dijo que lo solucionaría y, bueno, la herida no es tan grave. —Rebatió en un torpe intento de aligerar la culpa que pasaba por aquellos ojos azules.

La presión se hizo sentir sobre su muñeca cuando Dabi la apretó por la molestia que le causaban sus despreocupadas palabras, sin embargo, a pesar del sentimiento procuraba que la fuerza ejercida no la lastimara de ningún modo.

La mirada azul acompañada por un notorio ceño fruncido provocó a la chica de cabellos grises morder su labio inferior al ser consciente del efecto de las palabras salidas de sus labios, sin importar los años que pasaran o lo fuerte que se volviese con los años el chico que se mantenía cuidando su espalda jamás pensaría que una herida en su cuerpo fuese algo que tomar a la ligera ya fuese por el valor que la cazadora tenía para él o por los inminentes problemas que podían causarle las lesiones en la primogénita del presidente de la asociación de cazadores.

—Lo siento, tendré más cuidado, Dabi. —Se disculpó.

No recibió respuesta más que la mirada azul desviándose de sus ojos, por lo que se inclinó hacía el chico sentado frente a ella posando su frente en el hombro del contrario, buscando disminuir su molestia pues no podía soportar que Dabi estuviese enojado con ella, era algo que no podía cambiar ni siquiera con el correr de los años.

—No te molestes conmigo...No lo volveré a hacer.

Nuevamente, No había respuesta.

—Por favor...—Insistió con suavidad acercándose un poco más para esconder su rostro en el cuello del contrario.

Cazadora • BNHA x OC•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora