🐍Sweet Pea y Tu🐍 | Obsesión

✨Cap. 3✨

Habías regresado a la mesa luego de pedir unas fresas y un batido, Jughead aun lucia molesto y debías arreglarlo ya, o su relación o lo que fuera que tuvieran nunca se iba a arreglar.

—No estas feliz de verme —Bebiste de tu batido, Jughead no respondió, solo estiró su cabeza hacia atrás cansado de la situación —¿No vas a hablarme?

—¿No tienes algo mejor que hacer? —Preguntó mirando hacia atrás —¿no encontraste a Sweet Pea allá afuera?

—El problema es que vine a verte a ti, trato de ser tu amiga.

—¿Por que ahora? —Indago.

—¿Recuerdas la promesa que te hice? —Dijiste, tratando de recordarle la ultima vez que se habían visto cuando eran unos adolescentes —vine a Riverdale solo por ti, así que quita esa cara. Olvida el pasado y empecemos de nuevo.

Jughead se quedo pensativo unos minutos, pero estaba molesto contigo por no haberlo elegido, habías demostrado que nunca te había importado y eso le había dolido más que saber que en algún tiempo ibas a tener un bebé con Sweet Pea.

—Ultima oportunidad, Jones —Dijiste al detenerlo al ver que se estaba a punto de ir, solo le sonreiste esperando una respuesta. La debilidad del ojiverde era verte sonreír, quería ver si podrían volver a tener al menos una amistad. No perdía nada con internarlo.

—Esta bien —Acepto.

—Buena elección —Dijiste quitándole una pelusa de su remera.

—Si no estas ocupada, tal vez... —Pensó en alguna propuesta para esta noche —podríamos ir a beber algo.

—Si —Asentiste —yo pagare los tragos de esta noche.

Tomaste el brazo del hombre para halarlo hacia la parte baja del lugar, donde estaba el bar de las serpientes, poco a poco iba oscureciendo y la noche era joven como para ir a dormir; tomaron asiento en la barra, Jughead pidió los tragos para ambos.

—¿Por que no me dijiste que venias, antes? —Pregunto bebiendo de su cerveza.

—Por que tu te hubieras largado, ¿no es así? —Dijiste, el ojiverde se quedo callado dándote la razón —esta vez no te deshacer de mi tan fácil.

—Haré lo que me pidas —Sonrió a lo bajo —¿tienes donde quedarte?

—Aun no —Dijiste bebiendo de la cerveza.

—Si quieres puedes quedarte conmigo, me estoy quedando con Archie pero eres bienvenida.

—Gracias, Jughead —Te levantaste del asiento —voy al baño, enseguida regreso.

El ojiverde te vio marchase para luego posar su mirada al frente. Por tu lado entraste a los baños para hacer lo que tenias que hacer, al salir lavaste tus manos para segundos después ver tu reflejo en el espejo.

—Estas repitiendo la misma historia —Te susurraste para ti misma, cerraste tus ojos unos segundos para tratar de mantener la calma, para luego salir del baño.

[......]

—No puedo alejarme sin que generen problemas —Dijiste viendo a Fangs y Toni a los lados se Jughead —¿ahora cual es el problema?

—Tu amigo no es bienvenido —Dijo Fangs tomando asiento a su lado —creí que Sweet Pea te lo había dejado claro, Jones.

—Sweet Pea no tiene derecho sobre mi Fangs —Le recordaste y Sweet Pea se acerco hacia ti al verte cerca de Jughead.

—T/n tiene razón, si es por eso...

—Es por eso y más, Jones —Dijo Toni no dejándolo terminar —no te queremos aquí.

—La relación que tuve con T/n, fue cuando éramos adolescentes —Se defendió Jughead de sus antiguos amigos.

—Este no es el único bar en este pueblo —Tomaste la mano de Jughead para tratar de irse del lugar —iremos a otro, Jugh.

—Nadie los admitirá —Agrego Fangs.

—¿Están de broma? —Cuestiono el ojiverde —solo queríamos beber algo.

—¿Con la mujer de alguien más? —Siguió Fangs tratándole de hacerle saber cual era su lugar —Ah eso se le llama traición, ¿no es así?

—Estas muy equivocado, Fangs.

—Eres mi mujer mientras sigas teniendo ese anillo en tu dedo —Te recordó Sweet viendo que en tu mano aun era adornada por el anillo de compromiso y el de casamiento.

—Jones, nos vemos otro día —Dijsite acercándote hacia el hombre para darle un beso en la mejilla —yo te llamaré cuando no tenga a nadie a mi alrededor controlando mi vida.

Jughead asintió, mientras que le dabas un leve empujón a Sweet Pea para apartarlo de tu camino, estabas molesta por que sabias que Sweet Pea había tenido razón, ¿por que rayos aun tenias esos anillos? Era la pregunta que te hacías cada mañana al despertar, era la única cosa que te recordaba la promesa que le habías hecho a tu bebé, sobre no dejar a Sweet Pea solo.

—¿Vas a andar tu sola a estas horas? —Dijo Sweet Pea yendo detrás de ti.

—¿Tienes algo mejor? —Cuestionaste con molestia, el hombre se paro frente a ti para mostrarte unas llaves.

—Tengo una entrega que hacer, pero si quieres puedes ir a casa —Trato de darte las llaves.

—Iré contigo a la entrega —Propusiste, el solo sonrió y te señalo el camino —¿camionero?

—Así es —Afirmo, te abrió la puerta y tu solo subiste. Esperaste unos segundos cuando el también lo hizo —¿por que no quieres ir a casa?

—Odio estar sola —Acomodaste un poco sus cosas al ver que dentro era un desastre —espero no encontrarme con un labial o ropa interior.

—Entonces no muevas nada —Te dijo encendiendo el camión para ponerlo en marcha.

—¿Subes a zorras contigo? —Dijiste un poco celosa, el se quedo en silencio —sabes que... No me digas nada, no quiero saberlo.

—Aun no te he dicho nada, ¿celosa amor? —Pregunto, tu solo le diste un golpe en su brazo.

—Si encuentro algo mientras estoy aquí, eres hombre muerto.

—Eres la primera mujer que sube —Acaricio una de tus piernas soltando el volante —a las otras las llevo a un motel.

—¡Eres un... —Comenzaste a repartir golpes.

—Harás que choquemos, era una broma —Dijo deteniendo tus golpes con una de tus manos.

—Dame tu celular —Dijiste deteniéndote, el te señalo la parte delantera donde estaba su celular —si encuentro el numero de alguna mujer, te regreso el anillo.

—Tu eres la única mujer en mi vida —Te aseguro, seguías revisando su celular, fotos, mensajes, audios, ultimas llamadas. Todo parecía normal, solo había nombres de hombres y tu numero, y el de Toni.

—¿No tendrás otro celular, verdad?

—No —Respondió —ahora es mi turno, dame tu celular.

—...