Segunda Temporada.
-Obsesion-
El inició de una vida mejor, era lo que todo el mundo esperaba de esta realidad.
En algún punto de nuestra existencia, ¿Alguien puede amar sin llegar a la obsesión?
La mente es tan poderosa que te hace dudar demasiado...
Mientras que Jughead ayudaba con la remodelación del cuarto de Jane, Johnny estaba pensando en un plan. Al parecer no había sido suficiente todo lo que había hecho, necesitaba arruinar más las cosas. Llamo a Marcus, quien era su hijo menor para completar las cosas, este no se negó a nada de lo que su padre quisiera, solo quería que las cosas volvieran a ser como antes.
—Mama está de regreso —Menciono dandole nueva información al hombre.
—¿Donde la viste?
—Con la mujer que mantuviste encerrada.
—Llama a tu madre y dile que quiero hablar con ella —Pidio el hombre —, que le tendré una sorpresa.
—¿Y pase lo de la última vez? —Cuestiono, la última vez que su padre discutió con su madre Mónica paso casi un mes completo en terapia y hospitalizada por los golpes que le causo — no dejaré que le vuelvas a poner una mano encima.
—No lo haré, está vez será diferente.
—No sé si confiar en ti, pero la llamaré, no te preocupes, papá.
—Te dije que no me llamaras así —Se quejo al escucharlo.
—Esta bien... Señor —Acepto no llamarlo de esa forma aunque le doliera que su padre no lo aceptara — solo quiero preguntarle algo... ¿Por qué odia tanto a esa mujer, no es su hija?
—Aveces destruimos lo que más amamos, no pienses en eso, solo actúa —Respondio — lo que le pase a esa mujer, no será tu problema.
—Lo es si ella es mí hermana.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—No creas siempre en lo que te dice tu madre, Marcus. Ahora ve y haz tu trabajo niño —Finalizo el hombre. Marcus no quería lastimar a nadie más, no quería que alguien más muriera por su culpa.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Aun estaban arreglando algunas cajas llenas de juguetes que se encontraban adornando la sala de estar de Jughead, eran demasiadas cosas para una pequeña. Jane estaba feliz mostrándole sus juguetes al ojiverde quien estaba atento a cada palabra de la pequeña.
—Podrias regalarme a su gemela para mí cumpleaños tío —Le dijo Jane mostrándole una Barbie.
—¿Segura que quieres una muñeca y no otra cosa? —La pequeña solo asintió feliz, amaba las muñecas y aún más los osos.
