Segunda Temporada.
-Obsesion-
El inició de una vida mejor, era lo que todo el mundo esperaba de esta realidad.
En algún punto de nuestra existencia, ¿Alguien puede amar sin llegar a la obsesión?
La mente es tan poderosa que te hace dudar demasiado...
Al día siguiente te habías despertado y Kurtz no había regresado, está vez si estaba molesto. Lo llamaste unas cuantas veces pero no respondió, lo único que hizo fue mandar un mensaje diciendo "Solo manda un mensaje si es una emergencia" estabas seriamente pensando en ir a buscarlo, lo que hiciste fue darte una ducha para quitar el olor a alcohol de tu cuerpo para luego colocarte el nuevo atuendo; bajaste hacía la planta baja, Liam estaba haciendo el desayuno y Cheryl se encontraba sentada leyendo el periódico.
—¿Donde vas tan arreglada, mí querida T/n?
—Estaba por ir a hacerme una ecografía, pero Kurtz me pidió algo —Dijiste dando una excusa, para que no supieran que hasta ahora estaban peleados.
—Deberias cancelar tus planes —Me dijo Cheryl —, irás con Sweet Pea.
—No voy a ir a ningún lado con el —Te negaste rotundamente.
—Ira y punto final.
—No pienso ir con el Cheryl, si Kurtz se entera...
—Si no quiere verlo, no la obligues —Dijo Liam metiéndose en la conversación.
—Entonces habla con Sweet Pea y decidan que harán —Recalco la peliroja asiendote molestar, lo menos que querías era verlo pero al parecer los planes de Cheryl eran diferentes.
—Si tanto le urge que venga el —Dijiste molesta, les diste la espalda para subir de nuevo a la habitación. Mientras que Cheryl llamo a Sweet Pea para que viniera y hablarán.
—Sabes que solo estás tirando más leña al fuego, ¿No es asi? —Le cuestionó el pelirojo a su prima.
—Si tuvieras un bebé, no creo que te gustaría que tu pareja te prohíba verlo.
—Tal vez no, pero entiende que ella no quiere verlo y no puedes obligarla —Le aclaro, Cheryl solo se quedó callada —, si surge otro problema, será tu culpa prima.
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Estabas mirándote al espejo mientras planchas tu cabello y Sweet Pea infeccionaba la habitación detenidamente y de paso algunas pastillas que tenías a mano, había estado leyendo sobre vitaminas que eran buenas para el bebé y para ti.
—Si tienes algo para decir, que sea ahora —Le dijiste —, tengo algo más importante que hacer.
—¿Son las vitaminas para el bebé? —Dijo mientras te mostraba la caja que había encontrado en la mesa.
—¿No lo dice en la caja?
—T/n... —Te dijo para que voltearas a verlo, pero tu seguías mirándote al espejo mientras arreglabas tu cabello —, podrías dejar eso por un segundo —Diste un suspiro largo para dejar la plancha a un lado para prestarle atención como quería —¿Necesitas más vitaminas? —Pregunto —, aún quedan, pero te traeré unas mejores estás muy delgada.
