23

363 29 10
                                    

Peter tragó saliva, duro. Si tuviera un espejo en frente suyo, vería su piel increíblemente pálida y la expresión de horror en su rostro. Loraine rió, las chispas de su mano desaparecieron y bajó su manga para luego poner ambas manos dentro de los bolsillos de su pantalón.

—Relájate Pete. Te ves como la muerte.

Peter volvió a tragar saliva. Intentó relajarse, pero no podía sacar de su mente lo que acababa de presenciar. Recordó el día en el que Loraine estaba patinando en medio de la calle y casi es atropellada, y Pietro la empujó para salvarla, causando que cayera boca abajo y su nariz se rompiera. Había visto su nariz sanarse rápidamente, pero Pietro y Loraine habían fingido que nada había pasado. Recordó haber leído algo parecido en un cómic, un súper-héroe que podía regenerarse con gran rapidez. ¿Loraine tenía el mismo poder? ¿Regeneración rápida? Sin mencionar las electricidad que había hecho con sus propias manos...

Mientras que él estaba sumergido en sus pensamientos, ella rodeó sus hombros con un brazo e inconscientemente junto con ella empezó a volver a caminar de vuelta hacia la pizzería.

—Vamos. Será mejor que volvamos antes de que nuestras madres se den cuenta de que no estamos.





•••





—¡Peter! ¡¿Dónde estabas?!—Natasha lo vio enojada y de brazos cruzados.—¡Estaba buscándote!

—Yo... uh... yo...

—Peter me dijo que no se sentía bien, así que lo acompañé afuera a tomar un poco de aire fresco.—Loraine explicó, sonriéndole a Natasha. Una mentira, pero Peter no sabía cómo explicar lo que en realidad había pasado afuera.—Perdón por haberla preocupado, señora R, pero Peter me pidió que no le dijera porque no quería molestarla.—Natasha se mostró preocupada, y se agachó a la altura de Peter.

—Oh, cielos. ¿Te siente bien ahora?—Se acercó y susurró:—¿Crees que ibas a tener un ataque de pánico?

—Estoy bien, mamá. No te preocupes.—Le sonrió nervioso.

Natasha suspiró y se levantó.

—La próxima vez dime, ¿de acuerdo?—Peter asintió.—Loraine, tu madre también estaba buscándote. Es hora de soplar los pasteles.

Loraine sonrió emocionada y tomó la mano de Peter, los dos corrieron hacia la mesa en donde estaban los pasteles de cada uno de los cumpleañeros. Loraine se sentó entre Wanda y Lorna y entre Magda, Natasha, Peter y los empleados del restaurante empezaron a cantar la canción del cumpleaños. Otras familias que estaban presentes se acercaron, aparentemente sorprendidos de que cuatro niños estaban cumpliendo años el mismo día y cada uno recibía su propio pastel. Después de que cada Maximoff soplara las velas, los cuatro gritaron:

—¡UNO, DOS, TRES, CUATRO!

Peter notó que Magda jadeaba horrorizada mientras que Loraine, Pietro, Wanda y Lorna, cada uno, enterraba sus manos en sus pasteles, destruyéndolos por completo, y empezaban a lanzarle trozos de pastel al otro. Peter observó en shock junto con si madre y no pudo evitar reír un poco.

—¡NIÑOS, NO!—Magda gritó, corriendo hacia sus hijos.—¡HABLAMOS DE ESTO EL AÑO PASADO!

Al final fueron echados del restaurante ya que lo que los Maximoffs habían hecho terminó causando un tipo de reacción en cadena, con niños más pequeños enloqueciendo y causando una pelea de comida. Había pizza volando por los aires y pastel por todo el piso. Eso era sin mencionar que cuando la mascota de Chuck E. Cheese salió a felicitar a los cumpleañeros, el empleado adentro terminó con todo el traje de ratón cubierto de pizza, pastel y helado.

Son of the Widow [#1] (Remake)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora