21. Hola Nueva York.

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CAPITULO 21
Hola Nueva York.

ROSIE:

—Dime que es solo una broma Rosie... —Casi podía jurar que veía en los ojos de Drew lágrimas deseando caer.

—Hey, Drew, tengo que hacerlo, no pienso continuar desperdiciando mi vida aquí en Las Vegas.

—¿Estar con nosotros ha sido desperdiciar el tiempo? —Su semblante cambió de tristeza a enojo, y me pasó algunas cosas de mi closet para meterlas en mi maleta.

Había corrido al bar en cuanto le di el sí a Anette, debía de contarles a Betty y a Drew mis planes de viaje... Y pedir algo de dinero prestado para el boleto de avión. Drew se había ofrecido a ayudarme a arreglar mis cosas y llevarme al aereo puerto mañana a primera hora.

—Claro que no, eso no lo digas ni de broma. —Tomé las cosas que me pasó y las introduje en mi maleta tratando de que ocuparan el menor espacio posible—. Estos años aquí han sido lo mejor de mi vida... Pero todo llega a un final, ya sabes, ese momento en el que se debe de seguir adelante, ese momento en el que tienes que volver al origen para entender muchas cosas.

—Te voy a extrañar demasiado Rosie, te llevaras un pedazo de mi contigo.

—Y un pedazo mío se quedará aquí a tu lado, aquí con Betty, con Martha, todos forman parte de mi y seguir adelante sola, va a ser un reto demasiado grande.

—Mi hermosa Rosie, no sabes cuanto te quiero.

—Claro que lo sé Drew... —Lo abracé fuerte respirando su olor y sumergiéndome en su pecho, Drew es mucho más alto que Robert y tiene los músculos mucho más marcados, ¿Será que pensaré en Robert cada vez que abrace a otro hombre?

—¿Estás bien?

—Sí. —Me separé unos centímetros de él—. Drew, ¿Me contestarías algo antes de irme?

—Lo que sea cariño —Me guiñó un ojo y continuó ayudándome con la maleta.

—¿Es cierto que tú y Betty... tuvieron algo?

—¿Ah? —se tensó y soltó casi en cámara lenta las cosas que tenia en la mano dejándolas caer sobre mi cama al lado de la maleta.

—¿Le rompiste el corazón no es así? Ella te quiso.

—Rosie yo...

—¡Traje pizza! —Betty irrumpió en la habitación con una sonrisa en su cara y una caja de pizza en las manos—. ¿Llego en mal momento? —Nos inspeccionó con la mirada al notar lo tenso que se encontraba el ambiente.

—¡Viva la pizza! —Exclamó Drew y caminó hasta donde estaba Betty quitándole la pizza de la mano para llevarla a la cocina.

—Eso fue raro ¿No? ¿Seguro que no interrumpí nada... incomodo?

—¿Algo incomodo? —Me reí sin ganas—. Claro que no, solo estábamos arreglando mis cosas ¿La pizza es de pepperoni?

La observé dudar un momento antes de seguirme hasta la sala para cenar juntos los tres. Era miércoles en la noche por lo que el bar estaba poco congestionado y era día libre de Drew y Betty así que podíamos quedarnos juntos toda la noche, cenando y charlando sobre cualquier tema, como siempre, solo que esta vez sería la ultima hasta dentro de mucho tiempo.

—Me parece un poco loco el hecho de que Anette haya conseguido un trabajo para ti en tan poco tiempo —habló Betty y tomó un pedazo de pizza.

—No confío mucho en su palabra, pero de todos modos me iré, no me caería mal un cambio.

¡HABLE AHORA! O Calle para siempre.(Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora