𝔛𝔏𝔙ℑℑℑ-. 𝔓𝔯𝔦𝔰𝔦𝔬𝔫𝔢𝔯𝔬 𝔡𝔢𝔩 ℑ𝔫𝔣𝔦𝔢𝔯𝔫𝔬.
El deseo de mantener el control sobre las cosas es aún mayor cuando sabe que hay detrás de todo.
Louis nunca ha creído que los ángeles sean buenos. Desde el momento en el que nadie más que Taylor lo defendió cuando Harry lo expulso del cielo, supo que los ángeles no tenían el objetivo de proteger a los suyos, ni a los humanos, ni a nadie; solo querían estar más y más cerca del puesto más alto, lo suficiente para ser importantes en la historia, no como creadores, sino como grandes ángeles que estuvieron a la derecha de Dios.
Basura.
Su mayor problema actual era la rebeldía angelical que se desarrolla en las celdas infernales. A los ángeles les ha dado por comenzar una revolución. Inútil, además, porque no han logrado más que ser adormecidos por los demonios que los custodian; aunque la intención es lo que cuenta, así que cada vez que despiertan continúan con su estupidez. La ventaja de ser el rey del infierno, es que podía decir con orgullo que sus creaciones, a pesar de algo psicópatas internamente, eran demasiado inteligentes y, para que negarlo, disfrutaban de burlarse de los ridículos ángeles que apenas podían recordar que fueron inducidos al sueño.
Ninguno del círculo infernal es idiota, por lo que encerraron a los cuatro arcángeles restantes en un lugar diferente. Louis está seguro de que tienen algo que ver, sin embargo.
Ariana, Shawn, Niall y su mayor sospecha, Michael.
Michael.
A Louis siempre le pareció alguien inteligente y sereno, lo suficientemente rudo para decir que estabas haciendo algo malo, pero tan amable que lo tomabas como una enseñanza y no como un regaño. Le agrada, es silencioso y el único de los arcángeles que no lo ha tratado mal a pesar de ser otro de los prisioneros del infierno. Pero, siendo alguien tan amable e inteligente, debe quedarse con la parte inteligente; el infierno, el apocalipsis y el diablo son tres cosas con las que no se debería jugar, hay solo una persona que puede hacerlo sin tener consecuencias reales, y Louis no piensa permitir que existan más. El diablo ya no tiene el lujo de confiar, no tiene más la capacidad de retroceder en sus planes, buscar nuevos caminos y soluciones pacíficas, perdió demasiado tiempo y ahora solo conoce cuatro personas de las que jamás dudaría.
Tal vez debería hacerlo.
Camina solo por el extenso pasillo hasta encontrar una puerta de metal; la única, de hecho. Zayn, Liam y Taylor han ido con los otros tres arcángeles, todos por separado.
Louis levanto su mano al llegar a la puerta, abriéndola al instante.
El arcángel estaba de pie, con una expresión tranquila, incongruente a la situación en la que se encontraba. Siempre era pacifico, tal vez demasiado para sobrevivir un apocalipsis.
—Michael.
El saludo de Louis fue absolutamente tranquilo, sin la necesidad de pelear presente en aquella celda. No había necesidad de riñas, porque sabía que Michael seria cooperativo.
No tenía ni idea de la forma en que ayudaría.
—¿No te has preguntado alguna vez por que han sucedido tantas cosas?
Louis alzo una ceja. El arcángel no lo estaba mirando, parecía jugar con sus manos, pero Louis no era capaz de adivinar con que se distraía el hombre frente a el. Su piel y cabello oscuros son iluminados por la tenue luz de una llamarada en la pared, y lleva la misma ropa que cuando fue aprisionado y llevado a aquella celda.
—No veo por que me importaría. —fingió desinterés.
Pero si le importaba.
Louis siempre dudó sobre las cosas, sobre lo que sucedía, pero no era capaz de encontrar una guía para lograr saber que había mas allá. Siempre se preguntó por que Harry hizo muchas cosas, y por supuesto que había dudado sobre si mismo. Nunca llegaron a mas que dudas, por supuesto, no tenia necesidad de buscar mas problemas.
—¿Quién eres tu, Louis?—Michael por fin dejó de lucir distraído, levantando la mirada y dejando su atención en Louis.
El diablo se burló un poco.
—Déjate de juegos, no vine aquí para preguntas existenciales. —le gruñó, frunciendo el rostro. Si bien esperaba ser un poco mas amable, lo que menos deseaba en ese momento era escuchar algo que no fueran respuestas—. ¿Has intentado comunicarte con ángeles para que inicien una rebelión?
Michael lo miró extrañado.
—No. —la respuesta fue segura, sin titubeos.
Louis no apartó su mirada de el.
El arcángel sabia que algo era diferente: No el hecho del encierro, ni la extraña personalidad ruda de Louis, cuando siempre fue alguien al menos un poco dulce; quiso suponer que era a causa de las situaciones que había tenido que pasar, y aun mas en la que estaba en ese instante. Pero no podía evitar dudar sobre la razón en los ojos de Louis: Rojos y crueles, como si no tuvieran vida o dulzura en ellos.
Le recordaba al incio de todo, cuando vio la misma mirada insana en los ojos de Harry.
—¿Quién eres, Louis?
Se acercó a el diablo, prestando atencion a sus ojos. Imponentes, rojos, anunciaban destruccion y daño. El diablo no aparto la mirada, aceptando el reto sin dudar un solo instante.
—Cuestiona todo lo que veas, lo que escuches, cuestiona que eres, Louis. —intentó decir, siendo solo una suave forma de de mejorar las cosas para el castaño.
Louis se mostró un poco menos a la defensiva, casi relajado. Michael tuvo esperanza de que hubiera algo mas, algo que no fueran simples deseos de destruccion y daños. Habia algo, lo sabía, estaba seguro, pero no tenía forma alguna de ayudar. Louis no lo escucharía, y no habia manera de recurrir a Harry para resolver toda la situación que les estaba rodeando; el mundo estaba siendo destruido junto con ellos.
No sabia cuando llegaria el final, pero necesitaba evitarlo.
El diablo parpadeó un par de veces, dejando ver destellos de luz azul en sus ojos. Basta, por favor, que todo esto acabe. Sentía una extraña y confusa paz, necesidad de volver a...
Entonces reaccionó, al sentir una caricia en su pierna.
Nyne anunciaba que el resto ya habia terminado y probablemente Louis había pasado mas tiempo del que creyó en aquella celda. Necesitaba irse, porque Louis no podía permitirse dudar de si mismo. Sacudió la cabeza con fuerza, alejando a Michael con una oleada de viento.
Se dirigió a la puerta de la celda, decidido a irse.
—Harry tambien estuvo en tu lugar. —gritó, esperando ser escuchado antes de que Louis saliera.
El diablo se detuvo un instante, Michael recibió una mirada electrica por los brillantes ojos morados del gato.
Ese dia, fue su primera sospecha.
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Lovers in the Light of Hell ▪ ︎L. S. [En Edición]
Ciencia Ficción[En edición.] Cuando la tierra estuvo completa y Harry tuvo un momento de descanso, entendió que necesitaba compañía en el cielo, pues ni siquiera un Dios es merecedor de soledad. Entonces, creó a Louis, su primer arcángel; alguien con quien podrí...