HAZLO CONMIGO

CAPÍTULO 20

Aquiles

La verdad, no me esperaba para nada lo que acababa de decirme Daphne.

La puedo llegar a entender y aunque preferiría poder protegerla yo, sabía que muchas veces va a ser imposible. No siempre estaré detrás de ella y en esos momentos en los que no pueda estar con ella prefiero que sepa defenderse por sí sola y que no tenga miedo.

Estos últimos días Daphne lo había pasado fatal y yo tampoco haba sido de mucha ayuda. La cagué al acostarme con otra, pero me dolió tanto haberme enterado de que otro chico la había tenido para él de la única manera en la que solamente la tenía yo. Me dolió, me molestó.

Fue como un golpe en el estómago y más por la forma en que lo dijo como si de verdad le importara poco lo que fuera que tuviéramos.

Pero eso no es excusa para haber actuado yo de esa manera. Yo sabía muy bien que ella iba a llegar a mi apartamento ese día y sobre esa hora. Lo hice apropósito para hacerle daño como ella hizo conmigo.

Fui un cabrón con ella y no me la merezco.

No os podéis imaginar la mierda de semana que pasé sin ella. Apenas salí del apartamento. No fui ni a la editorial ni a la OFSP. Me sentía fatal. Sentí que la había perdido y en verdad, lo entendía.

No vi a nadie, no salí de casa excepto para lo necesario, que básicamente fue observar a Daphne como salía de la editorial y se iba a su casa. Sí, la seguí en secreto. No quería que me viera, pero después de todo lo que le estaba pasando, lo último que quería era que se sintiera desprotegida o que le pasara algo. Lo hice por ella, pero sobre todo por mí.

No sé que me ha hecho Daphne, pero siento la necesidad de protegerla, de tenerla conmigo, de tocarla, de hablarle, de mirarla. Daphne se ha convertido en mi adicción. La necesito a ella.

Cuando la veo con Derek o con cualquier otro chico me hierve la sangre, no sé por qué, pero no me gusta que un chico este tan cerca de mi Daphne. Me enfurece, pero después, verla sonreír cuando está con sus amigos, o como va tan despreocupada e inocente por la vida, me vuelve jodidamente loco.

Daphne Fox me ha vuelto un jodido loco, un jodido loco que necesita estar con ella veinticuatro siete.

Ninguna mujer me había creado esta adicción, estas ganas de tenerla conmigo siempre, en cualquier momento. Nunca he dependido de una mujer, pero mi felicidad y estabilidad depende de esta chica que tengo delante dispuesta a hacer un entrenamiento de la OFSP.

La admiro tanto que no sé cómo expresarlo.

Esta chica es la mujer más fuerte que he conocido. Después de que sus padres murieran en un incendio en su propia casa, donde prácticamente ella los vio morir. Después tuvo que ver como la última persona de su familia, su hermano, también la abandonaba.

Aun así, aun ese momento en el que se dio por vencida y quiso también irse ella, consiguió seguir para adelante gracias al enfermero que evito que lo hiciera, al cual estoy completamente agradecido de que apareciese en ese momento justo.

Aun después estar en depresión grave, internada en un psiquiátrico durante tiempo, consiguió salir adelante, ella sola, y meterse en la universidad. Poco después consiguió un trabajo en la editorial y consiguió el aprecio de mi abuelo y como consecuencia ese puesto de directora/responsable que tanto se merece y ha luchado por ello.

Por si no fuera poco, su pareja la pegó y ella continuo adelante, después empezaron estas malditas amenazas que al principio solo parecían un juego para asustarla, pero con lo que pasó ayer nos dejaron claro que nada de esto es un juego. Por no decir que su preciado coche acabó destrozado, y todos sabíamos lo importante que era ese coche para mi chica.