Sebastian POV
Esa misma tarde llegamos donde Alois, pero nos encotramos con la repentina sorpresa de que aún se encontraba en América, al parecer su viaje se habia alargado más de lo que se suponía.
- Tranquilo Sebastian la vamos a encontrar. Dijo Bocchan dandome ánimos.
- Lo sé Bocchan. Contesté algo preocupado.
Me dediqué a buscar a Mey, durante dos días seguidos. Pero no había rastro de ella. Ni siquiera podia percibir su aroma. Estaba cayendo en desesperación, si mis cálculos no fallaban probablemente ya hasta habría dado a luz. Ella estaba vulnerable ahora que no tenia la sangre de demonio que nuestro bebé le brindaba. Y nuestro hijo aun era muy pequeño para poder usar sus poderes.
Jamas en toda mi existencia de demonio habia sentido tanta preocupación. Ella era una humana cualquier cosa podría dañarla. Ambos corrían peligro sin mi para protegerlos. Tenía que encontrarlos de alguna manera.
Mey-Rin POV
Habían pasado dos días desde que nació mi hijo, aún no sabía que nombre ponerle, un día sin pensarlo lo llame Bastian era un nombre que me recordaba a alguien, sonaba muy familiar. Los días eran muy tranquilos en esta pacífica casa, pero algo me inquietaba. Mi pequeño hijo crecía demasiado rápido, eso me preocupaba mucho.
Bastian parecía ya de tres años en solo dos días, a penas completaba algunas palabras, como papá, mamá, mansión, Phantom, repetía mucho esas palabras.
- Quizás se refiere a la Mansión Phantomhive. Dijo la anciana pensativa.
- ¿Mansión Phantomhive?. Pregunté perturbada.
- Si hay una mansión cerca de aquí como a unos 10 kilómetros, es la Mansión que le pertenece a una familia muy cercana a la familia real. Explico la anciana muy concentrada.
- Pero ¿Por qué dira todo eso? No recuerdo ninguna mansión. Dije desconcertada.
- Papá, Mansión Phantom...hive. Dijo Sebastian balbuceando.
- ¿Qué dices pequeño? ¿Tu sabes algo que yo no?. Pregunté cargandolo y haciéndole mimos.
Yo quería recordar aunque fuese algo, y aunque no tenía ideas claras sabía que lo que Sebastian decia era importante. Asi que tenía que ir a esa Mansión quizás obtendría respuestas alli.
- ¿Estas segura de querer ir?. Preguntó la anciana preocupada.
- Tengo que, siento que alli encontrare respuestas. Dije confiada.
- Esta bien, honestamente les tome mucho cariño a ambos, siempre desee tener una hija, pero solo tengo hijos. Dijo dulcemente acariciando mi cabeza.
- Muchas gracias por todo, un día le pagaré lo que hicieron por mi. Contesté agradecida.
- Mi nieto te llevará lo mas cerca posible. Comentó aquella tierna señora.
- Se lo agradezco mucho de verdad. Dije inclinando la cabeza.
Aaron estuvo muy callado todo el camino. Por su lado Bastian no dejaba de admirar la naturaleza. Era un niño muy inteligente.
- ¡¿Quién eres?!. Grito Aaron de repente.
- Mi nombre es Claude Faustus y estoy aquí por la señorita Mey-Rin. Contestó un joven vestido de mayordomo.
- ¿Y que quieres con ella?. Pregunto desconfiado Aaron.
- Vengo de parte de mi amo a llevarla a la Mansión Phantomhive. Contestó cortésmente.
- Yo iba a llevarla hasta allá, pero parece ser confiable, la dejo en sus manos. Contestó Aaron sonriendo.
- Por favor señorita por aquí. Dijo aquel mayordomo amablemente.
Un sentimiento familiar inundó mi corazón y entre imágenes borrosas veía a un mayordomo sonriendome calidamente. Empecé a caminar detrás de él mientras cargaba a Bastian, quien se habia puesto muy inquieto después de ver a aquel mayordomo.
- Por aquí esta el carruaje para ir a la Mansión no esta muy lejos. Dijo muy cortés.
- Muchas gracias Claude-san-. Contesté inclinando la cabeza.
- Solo dime Claude por favor. Dijo sonriendo.
Me parecía un sujeto muy agradable y gentil, así que no desconfíe. En el transcurso del camino Bastian miraba fijamente a Claude con mucho desagrado, le pedí que no fuera maleducado con el y solo me miro para luego dormirse. Claude solo sonreía como entendiendo su inmadurez por ser un niño. Cuando llegamos a la Mansión nos recibió una dama muy hermosa Hannah era su nombre, al entrar habia otros tres chicos eran trillizos, pero no hablaban mucho.
Pero quien mas llamo mi atención fue un niño rubio muy extravagante, el nos recibió con mucha emoción, en especial tenia mucho interés por conocer a mi bebé. Pero Bastian era muy indiferente con el.
Claude me llevo a una gran habitación y me dijo que la usara cómodamente, ya que en esa Mansión yo era muy importante. Eso me desconcerto aun más. Yo no parecía de la realeza. Cuando observe detenidamente la habitación fragmentos de cosas desagradables vinieron a mi mente, pero nada era claro. Bastian, estaba muy raro algo no le gustaba. Pero no parecían malas personas.
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Estoy Enamorada De Ti (Mey-Rin x Sebastian)
FanfictionElla la sirviente de los Phantomhive algo torpe pero una asesina intrépida cuando el amo peligra, y el un mayordomo oscuro perfecto en todos los aspectos, ¿Sera que un amor entre ellos pueda ser posible siendo tan opuestos?