XV

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No podía negar que su madre y Namjoon se veían completamente lindos, como una pareja muy muy enamorada, la sonrisa de oreja a oreja de mamá, el agarre de ambas manos y aún más, la bonita sonrisa que la presencia de su madre habría logrado sacar en...

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No podía negar que su madre y Namjoon se veían completamente lindos, como una pareja muy muy enamorada, la sonrisa de oreja a oreja de mamá, el agarre de ambas manos y aún más, la bonita sonrisa que la presencia de su madre habría logrado sacar en un par de minutos en el joven de cabellos castaños. Qué envidia. Desvío su mirada de aquella pareja enamorada para enfocarse en el pequeño pelinegro que repetía su nombre.

—¿Qué pasó Woosung? —cuestionó el rubio en un tono preocupado. —

—Quiero ir al baño, ¿me acompañas? No quiero ir solito, no conozco y si me pierdo mi mamá se pondrá muy triste. —respondió, finalizaba la oración con un pequeño puchero en sus labios.

—Claro, vamos antes de que tu tío regrese. —ambos muchachos se levantaron de aquel banco junto al pequeño Blue quién movía su colita de un lado al otro, como un completo perro aniñado. Caminaron hasta el baño, Woosung ingresó al primer lugar desocupado y Jimin esperó desde afuera con Blue a su lado. El rubio para matar tiempo, se colocó de cuclillas y extendió su mano derecha al can, él entendió enseguida y le entregó su patita para saludar al humano. El chico sonrió, sus ojitos habían formado delgadas líneas y acarició el pelaje marrón de la mascota.

—¡Tan lindo! —murmuró. —Tu dueño te educó tan bien, ¿crees que algún día mi mamá me dejará tener un perrito tan lindo como tú? — el cachorro ladró. — ¿No? ¡ah! Quiero uno tan bonito educado como tú. —fingió llorar. —

—¡Jimin, ya estoy afuera! —avisó el niño de seis años, Jimin se colocó de pies rápidamente, jalando la correa del cachorro para llamar su atención y empezar a caminar hacía la misma banca en que los dejó el mayor. Al estar cerca, notó a su madre sentada en esa misma banca, sin el castaño.

—¡Mamá! —se acercó con rapidez y le besó las mejillas a la mujer, se sentó a su lado junto al pequeño Woo. — No sabía que saldrías temprano. —la mujer acarició el cabello rubio de su hijo y miró al chiquillo.

—Hola, mi amor. Hoy no tuve algún paciente para atender en estas horas así que llamé a Namjoon para salir y me dijeron que estaban aquí con el dulce Woosung. —

—¡Hola tía! —saludó el nene. —

—No te había visto del verano pasado, ¿Cómo has estado?

—Muy bien, recién llegamos ayer para pasar estos meses que tengo de vacaciones de la escuela.

—¿Ya lo conocías mamá? —La mujer asintió con un ligero movimiento en su cabeza.

—En la primera reunión que tuve con los papás de Namjoon... —respondió la adulta. — justo ese día Woosung estaba cumpliendo 5 años. ¿Verdad cariño? —el niño solo asintió. — ¿cómo estás tú, mi niño? —volvió su mirada a su único hijo. —¿Cómo está Wheein? —

—Mamá... —susurró Jimin. Desvió su mirada hacía los arboles que se encontraban en el lado opuesto al que estaban ubicados ellos. —... no quiero hablar de eso, tal vez otro día... cuando las cosas estén mucho más que ahora... por favor. —Heejin llevó su mano hacía la mejilla de su hijo acarició esta con completa dulzura. —

NAMMIN || EL NOVIO DE MAMÁ 💋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora