¿Recuerdas de tu canción favorita? ¿La que cantamos esa noche...?
Si te veo de nuevo,
Te miraré a los ojos y
diré que te extrañé.
En un recuerdo extasiado
está lloviendo cuando baile sólo
Pero cuando esta niebla se despeje
estaré corriendo con mis...
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—¿Por qué estás aquí? —preguntó la mujer con bata blanca. Heejin se quedó pensando segundos antes de responder a la pregunta.
Pensó en cada cosa que le pasaba por la cabeza desde el ultimo día que vio a Namjoon salir de su casa. Había empezado a evitar a llegar a casa en los horarios en los que su hijo estaba en casa, había empezado a perderse y todo por... ¿un simple amor? Se sentía tan vacía, tan decepcionada, tan fuera de ella desde esa vez, y no quería continuar así, entonces suspiró y habló:
—He empezado a notar tantos cambios en mi desde lo que sucedió, tengo un hijo y un exnovio involucrados. —dejó salir una sonrisa amarga, y nuevamente suspiró, sintiendo la pesadez en sus ojos al recordar cada una de las palabras de Namjoon.
Recuerda que ese día, permaneció "neutra" y sin casi demostrar lo desgarrador que fue para ella, entonces se había envuelto en ahogarse las penas y no dejarlas salir para demostrar que podía, pero fue muy erróneo, aquello la estaba matando.
—¿Por qué razón estas aquí? —preguntó nuevamente la psicóloga. —
—Porque quiero sanar o digerir lo que siento ahora, porque no quiero terminar odiando a quien más amo... quiero perdonar a mi hijo, quiero seguir viéndolo de la misma forma de antes... —lagrimas ligeras salían de sus lagrimas, casi resbalándose sobre sus mejillas. — Hace, creo que tres años desde que conocí a mi expareja... alguien que tiene la mitad de la edad que tengo yo... fue el primer hombre al que amé, después de la muerte de mi esposo, pasé quince años dedicándome a mi hijo, sin sentir un nuevo amor romantico, no me quejo porque en esos años, recibí el amor más grande que pudo haberme dejado mi difunto esposo, críe a mi hijo, mi única familia... jamás le pedí a la vida por un nuevo amor, porque me sentía plena con mi hijo, el ser solamente nosotros dos... pero hace tres años, conocí a Namjoon.
... —Recuerdo que solo fui por un café a esa cafetería, me encantó, fui un par de veces más, y él trabajaba ahí, nos empezamos a conocer... un hombre increíble y me enamoré... me hizo sentir como una adolescente enamorada a mis cuatro décadas; ridículo para una vieja como yo... —rió con nostalgia. —Pasé los días más maravillosos junto a él... entonces pensé que podría empezar un nuevo matrimonio con él en el futuro, entonces se lo presente a mi hijo... tienen casi la misma edad... —
La psiquiatra oía la historia, le tendió una cajita de pañuelos para que limpiara las lagrimas que habían empezado a derramar el maquillaje que ella traía puesto.
—No sé como, cuando y porqué sucedió aquello, es verdad que los sentimientos no los controla alguno, y mucho menos los hace desaparecer de un día al otro... pero, empecé a sentir cambios en ellos, a veces se sentía tensiones, a veces los notaba muy juntos... pero no quería pensar mal de ellos porque se trataba de mi hijo y mi pareja, hasta que un día... cuando venía del trabajo, los vi en el parque... de noche, los vi juntos, caminaban juntos, pero lo que más me llamó la atención fueron sus manos entrelazadas...
