Jin había tenido que pasar por tres semanas de terapia para comenzar con las hormonas. Esto era algo común, pues tenían que asegurarse de que era algo que ella quería y que realmente presentaba síntomas de disforia de género.
Una vez aprobado el doctor le había dado tres medicamentos diferentes: estrógenos, bloqueadores de testosterona y progesterona.
Así comenzaron los cambios de Jin mientras al mismo tiempo hacía el papeleo necesario para cambiar sus papeles.
— ¿Al final cambiaste de nombre? – preguntaron los chicos.
— Eso sigue siendo sorpresa hasta que termine los trámites – declaró ella sonriendo y nadie preguntó más.
No dijeron nada más porque los cambios de Jin a veces no eran tan buenos, le habían explicado todo lo que le iba a pasar con forme pasara el tiempo y que cada caso era diferente.
Para su mala suerte los cambios de humor estaban siendo muy fuertes y ahora que habían pasado unas semanas podía notar el pequeño crecimiento de su pecho y dolía demasiado.
Se recostaba en el sillón mientras comía un poco de pan y se quejaba al respecto.
— Ni siquiera aguanto la blusa más holgada que tengo – se quejó amargamente.
— Calma, te dijeron que ese dolor iba a pasar en un par de meses – dijo Yoongi, quién estaba en el otro sillón.
— ¿Estoy comiendo demasiado...? – preguntó después mientras daba otro mordisco a un pie de queso.
— No creo que demasiado, pero si un poco más que antes – contestó Yoongi.
— Me siento gorda... Y siento que mi cuerpo es muy raro ahorita.. – siguió quejándose Jin.
— Bueno... Es como una segunda pubertad, todos somos raros durante la pubertad –
Jin sabía que aquello no había sido con una mala intención pero no pudo evitar sentirse algo ofendida... Le había dicho rara...
— Gracias... Creo – contestó parándose para dirigirse a su cuarto y azotar la puerta cuando la cerró.
— ¿Qué le dijiste? – preguntó Namjoon asomándose a la sala tras escuchar la puerta cerrarse.
— Nada malo... Supongo que pude haberlo dicho mejor... Solo dije que estaba en una segunda pubertad y todos somos raros en la pubertad – explicó Yoongi sintiéndose algo mal.
— No te preocupes, solo está algo sensible. Hablaré con ella... Si me deja – dijo el líder suspirando antes de ir y tocar la puerta de Jin.
Una vez que escuchó que podía pasar encontró a Jin sentada en la cama con un gran puchero.
— ¿Estás bien, amor? – preguntó acercándose a ella.
— Si lo estoy... Solo que no sé... Me siento rara... Y siento que va a pasar mucho tiempo para que me ajuste a todo esto – dijo comenzando a llorar — Y ni siquiera sé porque estoy llorando ahorita... Y quiero algo de chocolate... – dijo entre riendo y llorando.
Namjoon la abrazó fuertemente y le dio un beso en la frente.
— No te desesperes, Jinnie. Cuando menos te des cuenta todo se va a arreglar, ahorita son las hormonas hablando – le dijo.
— Supongo que tienes razón... Maldición, hice sentir mal a Yoongi ¿cierto? – dijo Jin después
— Un poco... – admitió Namjoon.
Jin asintió y salió del cuarto para dirigirse a la sala.
— Hazme un lugar... – le pidió aún con un poco de lágrimas en los ojos, Yoongi se paró algo extrañado.
Fue después que Jin lo abrazó fuertemente.
— Perdón... No quería ser mala... O grosera... Solo... Odio las hormonas en este momento – dijo volviendo a llorar ahora entre los brazos de Yoongi.
El segundo mayor nunca sabía que hacer en casos así, no era bueno para calmar a las personas o hacerlas sentir mejor... Pero le regresó el abrazo.
— Está bien, Jinnie... No te pongas así tampoco, sé que es parte de todo – dijo en un intento de hacerla sentir mejor.
— Yoongi... Ammm.. si cambié mi nombre ¿quieres saberlo? – confesó ella.
— Oh, ¿me harás el honor de saberlo primero? – dijo él sorprendido.
Jin asintió emocionado y se acercó a él para decirle su nombre.
— Me gusta como suena – aseguró Yoongi, extrañamente se había contagiado de la emoción de la mayor.
— Pero pienso dejarme Jinnie artísticamente, así no es tan feo el cambio – dijo sonriendo.
— Creo que será bueno, pero ¿de dónde sacaste el nombre? – dijo con más curiosidad.
— Hmmm digamos que también me lo puso mi abuelo – dijo riendo un poco — Él sabía sobre mí antes de que incluso yo supiera, cuando era niña me sentó en su regazo y me dijo "¿Sabes? Si hubieras sido mujer te hubiera puesto así" – le contó.
Yoongi rió un poco con ella.
— Así que... Kim Mi-Suk – dijo Yoongi.
Jin sonrió aún más al escuchar como sonaba su nombre. Pronto todos lo sabrían.
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Un pequeño cuento de hadas 👑 | Finalizada |
FanficJin tiene dos grandes secretos; a pesar de tantos años juntos y ser como hermanos los miembros de BTS desconocen estos secretos, pero aquello está a punto de cambiar por una sola cosa : No hay leche de fresa.