Bendito Lunes.

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Lunes!!!
Encuentro con las personas que mas quiero ver.

Odio los Lunes, pero siento que este lunes será el peor de mi vida universitaria, no solo porque estaré con mi periodo menstrual, si no porque también tendre que ver a Bea esta mañana, me levanto de la cama y apago el despertador, no estoy de ánimos como para arreglarme mucho, así que pongo un jean apretado a mis piernas y una camiseta holgada blanca que dice que amo el chocolate, hago una colita en mi cabello, me maquilló un poco pero igual sigo linda, luego salgo de mi casa para recoger a Marliece.

Cuando llegamos a la universidad, para variar tarde porque había trafico en las calles, no encontré parqueo para mi auto, tuve que dejarlo lejos de mi facultad y caminar mucho, definitivamente es un buen comienzo de semana (nótese mi sarcasmo.) aunque no todo fue tan malo, Marliece me hizo reír hasta entrar al aula de clases, aquí es donde comenzaba mi pesadilla, Alejandra no compartía esta clase con nosotras así que pienso que sera un poco incomodo, pedimos permiso para pasar y nos seguimos riendo, alzó mi mirada y observo a Bea, ella me mira con un expresión de aterrada, como si la fuera a matar o algo así, aquí es cuando me debo controlar, Andrea por favor, actúa normal.

Camino a través de las mesas para poder sentarme atrás mientras un grupo de chicas me saludan, Bea me observa y yo la saludo con una sonrisa y moviendo mi mano, pero aquí es donde todo cambia mas, ella esta llevando sus manos a su rostro, frunce el ceño, tapa su rostro y no me saluda, Marliece y yo seguimos de largo como si nada paso pero notamos el ambiente un poco tenso.

Ha pasado una hora aburrida de clases y tenemos que esperar por otra más, en medio de la clase, Bea se levanta de la mesa en la que esta, recoge sus cosas y se va, a nadie le importa pero Marliece y yo si lo notamos...

En la hora de almuerzo saco mi celular de mi bolso y me doy cuenta que tengo varias llamadas perdidas de Bea, esta vez no tengo ni idea de para que me llamaba pero espero que no la haga otra vez.

Marliece trae para mi un sanduche de pollo con un brownie, se ve delicioso.

- Andrea, James esta a tu izquierda, no gires rápido, actúa normal.

Hice lo que Marliece dijo, el me miro fijamente a los ojos y luego de unos segundo desvío su mirada, ignorandome completamente durante todo el almuerzo, esto me hizo sentir peor, ya tenia una disculpa de Bea, aunque no la quería pero la tenía, James tenía que decirme algo.

Marliece y yo conversamos en el almuerzo pero no tenia ganas de hablar, yo solo asentía aparentando escucharla mientras mis pensamientos estaban en James, en quince minutos tendremos la única clase juntos, y para mi buena suerte Bea también estará ahí...

James y Bea se sentaron juntos en clases, soy un poco masoquista así que me sente con Marliece en unos asientos mas atrás donde podía verlos con claridad, ella se le insinuaba mucho, estaba tocando su cabello y James le devolvía una sonrisa, conversaron en toda la clase, maldita arpía, ahora Bea estaba tocando su brazo, ella esta haciendo una mirada extraña, creó que ha de pensar que es sexy, pero en realidad no lo es, si yo fuera el saldría corriendo.

- Y si prestas atención al profesor Andrea?
- Estoy prestando atención, no estoy viendo nada mas.
- Así... Entonces dime que fue lo último que dijo?

Marliece me había atrapado, no sabia nada, mi atención estaba dirigida a James y Bea.

- Bien, ya sabes lo que estaba viendo.
- No los mires, se los ve patéticos Andrea, además que le paso en el cabello a Bea hoy? Parece electrificado, y viste sus granitos? Están enormes, que mi mamá me salve de eso!!!

Marliece me hizo reír y atender la aburrida clase, cuando salimos del aula fuimos al baño, y nos encontramos a Bea mirándose lavando sus manos.

- Hola Andrea, que tal el día hoy?
Hipócrita, me pide disculpa y luego se le insinúa mas.
- Bien, todo ha estado normal, verdad Marliece?
Soné tan tranquila y normal que me sorprendo de mi tono de voz.
-Si, solo estamos llenas de deberes nada mas, donde esta Alejandra? Hoy no la hemos visto.
- Hoy salia temprano de clases, tenia que ir a cuidar a sus hermanitos chicas, también me tengo que ir las veo luego.
- Claro, chao Bea, cuidate mucho.

Bea se fue sonriendo, como si ya nada hubiese pasado, yo lo sentí incómodo pero ella parece que no.

- Es una perra Marliece!!!
- Tranquila Andrea, no le digas así, suficiente tiene con sus granitos.
- Ahhhhhhhhh, que fastidio, vámonos de aquí por favor, necesito ir a casa y dormir.

Mientras Marliece se peinaba en el espejo, se podía ver hacia una parte de lo que había fuera del baño, estaban los dos conversando con tanta naturalidad, ahora se abrazaban y continuaron caminando hacia la salida, ya no podía observar mas.

- Marliece apurate!!!

Tomé mi bolso y salí de la puerta del baño, necesitaba ver mas, creer que en serio estaba pasando, se dirigían al auto de James, el estaba abriendo la puerta para ella, Bea le sonreía y le dio un beso en la mejilla, James cerro la puerta fruncio el ceño y camino hacia su puerta, se subió al auto y en menos de cinco minutos salieron de la facultad.

- Me siento ahogada Marliece, extraño a James conmigo, no me gusta verlos juntos, y tampoco me agrada la manera en como James se ha olvidado de mí, porque eso es lo que ha pasado.
- Mmm, chuta Andrea, tranquila.
- Ese no es un buen consejo, por que nunca me dices nada mas que eso?
Marliece era pésima dando consejos y su respuesta siempre era la misma.
- Mmm, solo dale tiempo al tiempo, las cosas quizás mejoren.
- Mejor vámonos de aquí, quieres comida chatarra? porque yo si.
- Vamos al lugar de las mesas diferentes?
- Si por favor Marliece, vamos.

Llegue a mi casa y no me importo nada, comí algo porque mi mamá me obligo aunque ya estaba llena, me bañe, apague la luz de mi habitación y me acosté en mi cama a llorar.

Un Amor Sin Limites. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora