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No puedo creer que ella haya dicho "Cuervo", pero a estas alturas no espero nada de ninguna persona que me rodea, creo capaz a cualquiera de traicionarme, espero que tenga una buena explicación a cerca de esto.

Por suerte hoy no estoy vestida con ninguna prenda que en el momento se hubiese roto revelando partes de mi cuerpo.

—Pssss. —Levanto la vista junto con la pistola ante aquel sonido, veo entre unos autos estacionados uno negro que no resalta entre los otros a lo lejos, ahí está Ryland y Dyer sosteniendo su hombro con los ojos cerrados.

¡Demonios!

—¿Que haces ahí? ¡Te dije que lo lleves al hospital! —Gruño caminando a paso apresurado en dirección a ellos, al llegar me subo en la parte trasera junto con Dyer.

—¡No quería irse! —Ryland enciende el auto. —¡Y el muy hijo de...! —Gruñe desesperado. —¡Me amenazó! ¿¡De acuerdo!? Él no quería dejarte ahí. ¿Qué querías que haga?

Dejo la pistola a un lado de nosotros y me acerco a Dyer. —Hey, tenías que irte, maldición.

Mantiene su cabeza hacia atrás y su brazo no herido sosteniendo con fuerza por donde sangra.

—Solo fue un roce... —Murmura logrando abrir los ojos. —¿Estás bien?

—Yo estoy bien, ¿Viste...? —Es mi naturaleza ahora, no importa si me ve asesinando a otra persona, aunque no lo hice, yo no le disparé a la cabeza para matarla.

Él me observa unos segundos.

—No, tranquila. —Mientes... No puedes mentirme, no te conozco del todo, pero me doy cuenta.

Mis manos están de sangre de esa mujer, no puedo tocarlo así, si lo hago podrían encontrar y no dudaría acerca de quien mandó a que le disparen quieran inculparlo.

—¡Ryland acelera! —Dyer vuelve a cerrar los ojos, veamos, no fue un roce simplemente, estoy segura que no.

Limpio la sangre de mis manos en mi ropa como puedo, el abrigo con capucha que me puse para que las cámaras no me detecten queda todo arruinado pero poco me importa,

Las palabras de Darrik llegan a mi mente como por suerte, recuerdo lo que se hace en estos casos, su voz me guiaba en todos los entrenamientos.

Aplica presión en el punto sangrante con un paño, gasa, toalla, o una prenda de ropa si es necesario.

Si la prenda se empapa de sangre, simplemente pon otra encima y sigue aplicando presión, pero nunca la retires.

Si la hemorragia es en un brazo o pierna y con presión no se puede controlar, se puede realizar un torniquete con un cinturón o una banda de tela que no se rompa.

El torniquete se debe poner lo más cercano a la herida, pero siempre por encima de la rodilla o el codo. Hay que recordar que el torniquete sirve para detener la hemorragia, pero puede provocar daño tisular por la falta de riego sanguíneo, por lo que hay que apuntar la hora a la que se realizó, y revisar cada 10 minutos si ha parado la hemorragia, aflojándolo un poco.

En el momento en que la hemorragia pare, retirar el torniquete si lo hubiese, y se puede poner un apósito encima, o vendar la herida con algo de presión.

Dyer ya hace presión en la herida pero eso solo le provoca más dolor y sangrado, entonces tengo que hacer el torniquete en su brazo.

Por suerte, Ryland trae uno.

—Dame tú cinturón, Ryland. ¡Rápido! Tengo que detener el sangrado. —Me inclino en medio de los dos asientos delanteros, él con una mano sostiene el volante con algo de dificultad mientras su otra mano logra quitar lentamente el cinturón.

DARRIK. [AKDR #3]. ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora