♡ Cap. No 56 ♡

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La luz entraba por la ventana. De la habitación. Seng se movió, estaba muy cómodo y calentito.

Hasta que sintió algo sobre su cintura y algo duro rozando sus nalgas. Abrió los ojos y miró su cuerpo.

En su cintura tenía un brazo. Miró a quien estaba detrás suyo. Era Billy estaba despeinado, sus ojos estaban cerrados, dejando ver lo hermoso que era Seng apreciaba cada detalle de su rostro sus pestañas, sus cejas. Debe tener un buen sueño, parecía estar descansando bien.

Seng volvió a recostar su cabeza en la almohada, ¿debía despertarlo? Parecía cómodo.

Billy apretó el brazo encima de Seng, atrayéndolo más a sí mismo.

—No soy tu peluche para que me abraces así.—Murmuró Seng, sin la intención de que Billy lo escuchara.

La cercanía hizo notar más la dureza en sus nalgas.

—Oh, genial.

Seng ya suponía que podía ser. Maldición, ¿cómo habían llegado a esta posición?

Pero a decir verdad, había dormido comodo, no había tenido pesadillas, había podido descansar. Sus ojos se querían cerrar nuevamente, tenía sueño. Era la primera vez que quería dormir, sin tener miedo por lo que podía ocurrir en las pesadillas o en su vida.

Posiblemente era raro que aceptara dormir con Billy abrazándolo, pero si así se sentía cómodo para cerrar los ojos, lo haría.

Un golpe en lo que parecía ser la puerta de la sala y murmullos, hicieron que Billy se moviera, provocando que quitara el brazo en la cintura de Seng.

Seng no le pareció buena idea.

Billy se frotó los ojos y miró a su acompañante. Seng estaba de lado, dormido seguramente.

Suspiró. Miró la hora: Eran las 8:30 Había dormido como nunca, quería volver a hacerlo. Seng parecía estar sumido en el sueño, no le molestaría, ¿verdad? Que lo abrazara.

El ojinegro volvió a colocar su brazo encima de la cintura del chico y lo abrazó.

Seng se encontró sonriendo, aún sin ninguna explicación y se acercó más. Sintió la respiración de Billy en su cuello, eso le dio tranquilidad para dormir un poco más.

Seng se sentía protegido, sabía que nada le iba a pasar.

.....

Luke se levantó y bajó con Joss a la sala, no esperaba ver a los demás despiertos. Eran las 11:30, después de todo la mayoría eran adolescentes, que madrugaran era raro.

—Buenos días.—Saludó Joss.

Los chicos saludaron.

—Vamos cariño, despierta de una vez.—Murmuró Joss, empujando a Luke para que camine.—Hay que decírselos ya.—Díselo tú.—Luke se apoyó en su esposo, con los ojos cerrados.

Luke se acomodó en el sofá y se acosto.

—Oh, vamos, estabas emocionado por contarlo.—Joss lo movió.

Luke soltó un quejido, quería volver a la cama.

Zee sonrió, posiblemente el embarazo junto al té que le dio anoche, hicieron que Luke estuviera más dormilón y perezoso.

—¿Qué tal mañana?—Se acurrucó más.

Joss rodó los ojos,—No lo atrases más.

—Bueno, yo se los digo.—Joss le dio una mala mirada a Luke.

Saint cruzo miradas con Billy. Ninguno sabía que le ocurría a su padre. Saint observó a Zee, este se encogió de hombros.

Luke abrió los ojos con esfuerzo y se incorporó. Podría aguantar unos minutos para dar la noticia. Era algo importante para la familia.

Joss sonrió y lo abrazó.

—¿Qué?—Billy se cruzó de brazos, cansado del misterio.

—No sabemos cómo lo tomaran, pero esperamos que bien.—Dijo Luke.—Y sino, pues se jodieron.—Se encogió de hombros.

Zee y Seng rieron.

—No vamos a alargar más esto.—Comentó Joss.—dejaran de ser los bebés de la casa.

Joss se sentía feliz, emocionado y ansioso. De por sí ya estaba alegre al saber que iba a tener otro hijo, pero le intrigaba saber cómo reaccionarían los gemelos.

—¿Mmm?—Saint frunció el ceño.

Seng se sorprendió. ¿Era lo que parecía que era?

Miró sonriente a Billy fruncía el ceño como su hermano. ¿No había captado el mensaje?

Zee le sonrió a su mejor amigo y miro a los gemelos.

Luke y Joss se miraron y soltaron a la vez: —¡Van a ser hermanos mayores!

Zee se levantó y fue a abrazar a su mejor amigo.

—¡Aún no me lo creo!—rio.

—¡Ve haciéndolo!—Respondió Joss.

Seng movió a Billy.

—¡Felicidades!

Billy tenía la boca abierta, queriendo decir algo pero sin nada que saliera.

Se levantó y fue hasta Luke.

—¿Estás...?

Luke asintió.

—¡Oh, por dios!—Abrazó a su padre.—¡Es increíble!

Saint se levantó y caminó hasta sus padres.

—¡Solo espero que no sea otro chico!—Abrazó a Billy y a Luke.

Seng observó la escena familiar y hogareña mientras sonreía nostálgicamente.-Ojalá él pudiera tener algo así.

Zee se dejó caer al lado del chico.

—Nosotros no pintamos nada aquí.—Señaló Seng observó como Joss se unía al abrazo.—Más que todo yo.—Solo soy amigo de Saint.

—Zee sonrió. Si estás aquí es porque confían en ti, te tienen cariño y eres parte de la familia...

También te tienen interés.-murmuró.

Seng miró a Zee .

—¿Te refieres a...-?

El pelinegro lo interrumpió.

—¡Yo no me refiero a nadie!—Dijo antes de levantarse y acercarse a la familia.

Seng sabía perfectamente que se refería a Billy, después de todo, él mismo se lo había dicho
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SOLO UN POCO MAYORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora