💜ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 𝔼𝕤𝕡𝕖𝕔𝕚𝕒𝕝 💜

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Estaba sentado sobre la banca del parque en el que había comido su helado la primera vez que salieron juntos. Fue citado por su persona favorita en el planeta tierra y había llegado a la hora justa, cosa que le diferenciaba de Rich.

Pasaron ya 56 minutos desde que llegó, y él aún no aparecía.

Killer miró su teléfono, tenía un mensaje a las 4:05, 4:10, 4:20 y 4:42, todos en chat que tenía con la persona que esperaba. Cada uno de ellos lamentando la tardanza, y diciendo que tardaría únicamente 5 minutos más. ¿Estaba enojado?, No, para nada, de hecho estaba totalmente preocupado.

Iba a pedirle que le diera su ubicación para que Rubén pudiera llegar hasta él, pero justo en ese momento su auto apareció. Ricardo salió de este, sin su habitual abrigo.

¿Por qué había llegado tan tarde?, Bueno, primero no encontraba las llaves del auto, después no sabía dónde estaba la caja de terciopelo, tampoco su saco. En cuanto lo encontró todo, lo subió dentro del auto, y arrancó.

Pero, el tráfico era tanto que demoró otro poco; al parecer dos autos habían chocado y atrasó a una larga fila de impacientes conductores.

Además, el automóvil se quedó sin gasolina a medio camino y tuvo que parar por ella, pero la fila fue igual de larga que en el accidente.

En fin, ¿Qué más le podría pasar, si ya le tocó de todo?.

Se acercó a Killer corriendo, este se levantó de la banca, para hacerlo menos incómodo y miró a Ricardo, quién al llegar con él lo abrazó. Correspondió, obviamente, para después dejar que el híbrido wither tomase aire. También explicó lo anteriormente mencionado.

— ¿Encerio te pasó todo eso en una hora? — Comenzaron a caminar hacia la heladería una vez Rubén acabó de hacer esa pregunta.

— Si, tío... El mundo hoy está en mi contra — se cubrió la cara con las manos, agobiado — La verdad es que nada podría ir peor. —

— No hables tan rápido... — ambos miraron hacia la heladería; estaba cerrada y había cinta de policía cubriendo la entrada. — Creo que tú mala suerte no se ha ido — rió, es que era absurdo.

— ¿Qué habrá pasado ahí, jolines? — se acercó un poco más, fijándose a través de las ventanas como un par de policías revisaban la escena del crimen. Decidieron no preguntar y pasar directamente por la siguiente actividad: ir al cine.

Caminaron hablando sobre el trabajo, la cada vez más cerca boda de Shadoune y Rubik, además de Violeta. Era un trayecto algo largo, sobretodo cuando vieron la larga fila en la taquilla por el estreno de una nueva película

Filas y más filas.

El tiempo les sobró para hablar de esos tres temas, ¿Y cómo no, si cuando llegaron a la caja ni siquiera boletos habían?

— ¿Cómo es que un cine tan grande como este está completamente lleno? — preguntó Killer ya bastante molesto a la pobre que trabajaba detrás de la boletera.

— Hoy es el estreno de 2B2T, la tercera parte. Hay mucha gente que lo vino a ver y se nos vendieron todos los boletos. Tenemos ocupadas hasta las funciones de mañana temprano... — Ricardo miró con enojó a su alrededor, había mucha gente con su boleto esperando a la siguiente función. Se le ocurrió comprarle a alguien un par de ellos por el doble o el triple de su precio original, pero antes de hacerlo, Killer le tomó de la mano y lo jaló para que se fueran de ahí.

Se habían quedado sin helado ni cine. ¿Qué otra cosa les quitaría ese día?

Fueron al Arcade.

Estaba en la misma cuadra, así que no tardaron mucho en llegar. Por suerte, ese si que estaba abierto. Pidieron un par de hot-dogs y refrescos pues ninguno de los dos había comido nada desde el desayuno, también, se hicieron de una máquina de dos jugadores y ahí se quedaron por treinta minutos, peleando en partidas cortas que se llevaban todas las monedas del albino.

𝕍𝕚𝕠𝕝𝕖𝕥𝕒  [ᴋɪʟʟᴇʀʀɪᴄʜ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora