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- antesdecomenzarquierodecirque
DIOOOODDDDD, como amo el Kirideku aaaaaaaa 🛐💗

¿Les gusta el Kirideku? 😔👎🏻














Shoto había llegado al estacionamiento de la universidad. Entró al lugar en busca de la clase "1 A", hasta que la encontró.

Katsuki estaba dando clases. Ochaco estaba sentada en su asiento escribiendo. Izuku le miraba aún preocupado, de hecho, no disimulaba.

- Buenas tardes. Permiso. - Toda la clase dirigió su mirada al dueño de la voz, y el profesor se tensó.

- Buenas tardes. ¿Qué se le ofrece?.- la mirada rojiza se clavó en la contraria como daga. Shoto no le importó y seguía mirándole fijamente. Parecían dos Alfas marcando territorio.

- Vine a buscar a una de tus alumnas.- sonrío minúsculo ante la cara enojada del rubio.

- Está en clases, no está permitido la salida.- antes que el profesor continuara hablando, una alumna se levantó de su pupitre.

Momo.

- Hola, Todoroki-kun.- le había guiñado un ojo y caminó moviendo sus caderas mientras iba a "desechar" basura de lapiz en la papelera.

Katsuki lo notó. Shoto lo notó. Izuku lo notó. Toda la clase, junto a Ochaco también. La castaña no aguantó y salió corriendo directo al baño a vomitar.

Katsuki iba a detenerla pero ya era demasiado tarde, todo el ambiente estaba demasiado tenso. Tenía que sacar ese tipo de ahí.

- Bien, bastardo. ¿Quién es la alumna?

- La niña bonita que acaba de salir corriendo al baño.- su mirada se suavizó cuando habló de la joven.- así que por favor, Bakugo. Dejame llevarla a un hospital, está muy mal.

- Todoroki, espero que no hayas metido tus malditas garras en ella porque..

- Perdóname.

- Eres un maldito.

- Lo he sabido siempre.- sonrío triste ante las palabras de su antiguo compañero de clases.

El rubio cenizo se masajeó la sien, trató de calmarse y antes de eso, miró fijamente a Izuku, quien tembló ante la mirada granate, mirando con miedo y duda. Katsuki cerró sus ojos y resopló divertido, él nunca se equivocaba.







Ochaco estaba en el baño, estaba mirándose en el espejo y notó su rostro pálido y demacrado. Estaba más delgada y con bolsas bajo sus ojos almendrados. Estaba temblando mucho, esa chica, Momo, conocía a su novio. La forma en que se vieron, y le saludó. La castaña sentía su pecho encogerse de dolor. No quería ser desechada otra vez, no quería vivir lejos de Shoto.

Respiró pausadamente, lavó su rostro y salió del baño más calmada. El bicolor aún le esperaba afuera del salón. Sabía que no se iría, y menos ante la extraña escena que tuvo con su profesor.

Pasó directo, no se detuvo a saludar a su novio y menos con la escena que tuvo que apreciar gracias a su compañera. Cuando entró al salón nuevamente notó que una mirada verdosa se posaba fijamente en ella, se puso realmente nerviosa. Tomó sus cosas, se despidió en silencio con un movimiento de mano y se fue.

Toda la clase quedó en un silencio incómodo, hasta que terminó la hora.

...


Shoto manejaba en silencio, iba rumbo a un hospital. La castaña sólo se limitaba a mirar por la ventana, estaba triste y pensativa. El bicolor no soportaba tanta incomodidad, así que habló.

- ¿Qué tal tu día?

- Pésimo.

- Quiero que estés bien, Mochi.

- ¿Qué es Momo para ti?

- ¿Momo..?

La castaña asintió en silencio. El adulto notó que estaba temblando.

- Una vieja amiga...- bostezó.

- Uh, entonces si la conoces..- no fue pregunta, solo era una afirmación mental dicha en voz alta por la menor.

- Sí, una muy vieja amiga.

...

Habían llegado al hospital, le llevaron a sala de chequeos. Y pues, Shoto se quedó afuera esperando que la castaña dijera todos sus síntomas.

Mientras tanto..

Izuku salió a beber agua, Kirishima se le pegó atrás. Preguntó amistosamente si podían ir juntos, y el mayor de ellos aceptó.

Iban a paso lentos, hasta que de un momento a otro, el pelirrojo tomó por los hombros al peliverde y lo estampó contra la pared de la parte trasera de la escuela. El pecoso no tuvo tiempo de reaccionar cuando fue besado salvajemente por el contrario. Izuku se había quedado petrificado ante eso. No entendía a su amigo.

- E-Espera, K-Kirishima-kun.. esto.. n-no es correcto!.- sus ojos estaban completamente cerrados y sus mejillas sonrojadas.

- Midoriya.. tú.. tú me gustas.. por favor, sal conmigo!.- el menor estaba decaído y con la mirada fija en los orbes verdes del contrario.

- Esto no está bien .. tú y yo somos a-amigos... eso es imposible.- intentó reírse para ver si era una mala broma pero Eijiro seguía firme en su palabra.

El menor suspiró pesadamente.

- Siento haberte besado, me dejé llevar rascó su nuca nervioso y miraba el suelo fijamente.

El pecoso se enterneció un poco. Conmovido, abrazó a su compañero.

- Está todo bien, Eiji-Kun. Volvamos a la sala.

Ambos volvieron, sí, pero bajo la atenta mirada de alguien. O mejor dicho, profesora.










Hoy me he bañado 7 veces, nopuedeser

[MI AMOR PLATÓNICO ES UN PROFESOR. | BAKUDEKU ⚘]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora