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Katsuki estaba yendo a la sala de profesores a guardar unos documentos y notas en las carpetas de la coordinación. No espero que Mirko se encontrara ahí, también, anotando unos temas para su examen.

El rubio caminó en silencio, sin prestarle mucha atención a la más alta. Hasta que su voz le detuvo.

- Tienes que estar más pendiente de tus alumnos, señor Bakugo.

- ¿Con cuál derecho lo dices tú?.- su voz salió fuerte y firme.

- Pues, verás.. por detrás de la escuela dos de tus alumnos se estaban comiendo la boca.. no sería muy bien visto por parte de tu clase, ¿o sí?

- Quiero malditas pruebas.

- No tienes que desconfiar de mí palabra, soy una mujer de honra.

- ¿Quiénes?

- Uhm, ellos dos siempre están juntos. Uhg, pensé que lo notarias.

- Escupe de una vez, no seas tan indirecta.

- El chico pelirrojo alto, junto a.. uh.. verás .. ¿recuerdas al chico que sacó la nota más alta en tu clase?, pues, ese mismo!.- su voz emocionada cambió a una seria. A Mirko realmente le preocupaba el asunto.- Debes hacer algo al respecto, Bakugo-san. Esto no está bien.

- Lo sé, jodidamente bien.

La sonrisa de Katsuki se volvió una mueca, estaba enojado. Si Deku quería jugar con fuego, pues, lamentablemente se iba a tener que quemar.









Ochaco había estado dentro de la sala por más de 30 minutos hablando con la enfermera. La mujer le había dicho al bicolor que tenían que hacerle unos exámenes de sangre. El susodicho aceptó sin reproches, sólo quería a su novia sana y salva.

Pasaron unos minutos más. La castaña había salido más pálida de ese cuarto.

- Moc-, Ochaco, ¿estás bien?

Ella sólo estaba en silencio con la mirada perdida. La mujer fue quien habló.

- Ella está algo anémica, más tarde pueden venir a buscar sus resultados.

El bicolor asintió, y se marchó a su casa junto a su novia.

...

Ya era hora de salida en la uni, todos se preparaban para salir. Kirishima invitó cortésmente a su amigo, Midoriya, a comer en la noche. Kaminari y Tenya también se habían unido. Estaban a punto de irse, cuando un cenizo malhumorado tomó sutilmente al peliverde por el hombro. Le dejó un papel, y se fue sin más. Los chicos no le dieron tanta importancia, porque suponían que Izuku siendo uno de los mejores de la clase tenía ciertos privilegios y confianza.

...

Izuku y los demás chicos habían ido a comer a un restaurante cercano en la ciudad. Disfrutaron y bebieron más de lo debido. Kirishima estaba muy ebrio, Kaninari decidió llevarlo a su casa, mientras Tenya ya se había ido hace más de media hora. El peliverde dijo que él podía irse sólo a casa, y que pagaría un uber. El rubio junto a su otro amigo por el estado de ebriedad en el que estaban no le dieron tanta importancia y no le insistieron más. Eran las 2 a.m., no quería llamar a su profesor pero sabía que era lo mejor.

- Kacchan~, necesito que me ayudes a llevarme a casa.

- ¿Uhhh?, ¿Pero qué demonios?. No iré a buscar tu jodido culo, nadie te obligó a ir.

- P-Por favor...- el chico rogó con una voz sumamente baja y quebradiza.

- No te muevas de ahí, imbecil.

...

Katsuki iba en su auto enojado. Muy enojado. El imbecil de Deku se estuvo besando con el otro idiota de Kirishima, y lo peor de todo es que aceptó muy gustoso una salida con él. Quería tomar a Deku y joderlo toda la maldita noche hasta el cansancio.

Lo vio, sentado escribiendo algo en un papel. El papel que él le dio temprano. Llegó hasta donde estaba el susodicho y lo tomó de un brazo para levantarlo.

- Vámonos, tengo sueño.

- Es-Espera Kacchan.. me lastimas.- Izuku hablaba ido.

- Pues, entonces mueve tu jodido culo rápido.

Entró al auto a pasos lentos y cayó como peso muerto en el asiento del copiloto. El rubio encendió el motor y se fue de ahí sin esperas.

...

Llegaron al departamento del mayor casi a las 2:30 de la madrugada. Bakugo estaba aún irritado y con ganas de explotar algo. Vio como el menor intentaba sujetarse de algo para no caer al suelo. Subió por las escaleras casi arrastrándose y se metió a la habitación del rubio con suma confianza.

Katsuki estaba enojado. Abrió la puerta de punta a extremo y vio como el chico inútilmente intentaba quitarse la ropa. Tomaba su camisa por las mangas jalando hacia afuera pero su fuerza era casi nula y solo parecía un pez intentando nadar en la tierra.

El rubio decidió ayudarlo, quitó su ropa y lo llevó a ducharse, pero ante eso, el menor se rehusó. Decidió tomar por la polera al mayor y estampar sus labios con los contrarios.

- Mmhg, Kacchan~, bésame.

Bakugo estaba extasiado pero aún enojado. Así que tomó al menor y lo cargó como si fuese un koala, lo besó desesperado mientras mordía levemente sus labios. El pecoso suspiraba entre beso, lloriqueó cuando sintió un dedo tocar descaradamente sus tetillas. El rubio besaba y lamía su cuello, jalaba fuertemente su cabello para levantar la cabeza contraria.

El pecoso gritó cuando Katsuki había mordido y chupado sus clavículas. Estaba siendo muy brusco pero a él le encantaba y sabía que al otro día estaría muy marcado. Sintió como fue lanzado a la cama para ser salvajemente besado por una animal en celo. Sentia como sus muslos eran lamidos y mordidos, como su entrada se llenaba de saliva debido a la escurridiza lengua de su amante.

- Kacchan, ah~.. uh~ .. AAAAH.. se siente tan... ri.. co.. oh ~.- a Izuku se le dificultaba hablar mientras que el mayor ocupaba su lengua succionando su entrada, ya necesitada.

- Vas a sentir el mejor maldito orgasmo de tu vida, te vas a correr tan jodidamente delicioso que no me volverás a ser infiel en toda tu existencia, Izuku.

El corazón del menor retumbaba con fuerza ante la confesión del mayor, le había acusado de infiel y también le había dicho que sólo tendría sexo con él por el resto de su vida. Realmente estaba emocionado y conmovido.

Bakugo había decidido follar a su jodido Deku toda la madrugada, aunque eso le costara un día menos de universidad.
















































En otra historia prometí foto, la subo aquí de una vez 👺👺👺

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[MI AMOR PLATÓNICO ES UN PROFESOR. | BAKUDEKU ⚘]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora