Atrapada Con Mi Enemigo ✔️

Capítulo 25

Comienzo a voltearme lentamente, mientras contengo la respiración y mi corazón no disminuye su ritmo acelerado. Con miedo, giro mi cabeza hacia la persona que está detrás de mí, y cuando mis ojos se encuentran con los suyos, expulso todo el aire que retenían mis pulmones con notorio alivio. Unas ganas de matar a Mark nacen desde el fondo de mi ser por asustarme tanto con su cara de mierda.

—Luke. —Susurro y le sonrío. Él solo me observa inexpresivo, luego nos recorre con la mirada y frunce el ceño con confusión, supongo que por vernos así vestidos.

—No tenemos todo el día, vamos. —Habla Mark con desdén. Yo volteo a verlo y entorno los ojos, a lo que él aparta la mirada.

Por un lado tiene razón, no estamos en el mejor lugar para distracciones, aún debemos conocer esta nueva zona. Tomo las manos de Luke y le hablo con cariño.

—Hey Luke, estamos aquí para rescatarte, debemos salir de aquí, por eso debes ayudarnos ¿entiendes? —Él asiente un poco inseguro.

Me alivia haberlo encontrado en el camino, ya estamos todos y podremos escapar de este infierno. Sin soltar una de sus manos seguimos nuestro camino, y escucho un gruñido bajo proveniente de Mark. Río por lo bajo al saber que está celoso de mí.

Ya no estamos en pasillos como en el piso de abajo, sino que es un gran círculo con decenas de puertas alrededor. Si alguien simplemente sale de alguna de ellas, nos descubren, y si entramos en una que contenga personas dentro, también estamos jodidos. Esto es mucho más complicado de lo que pensé. Por otro lado, las paredes no son blancas sino grises; un gris oscuro y tenebroso.

Mark va de primero, luego Adam y, seguido de ellos, Luke y yo. A pesar de estar en peligro, me siento bastante segura al estar rodeada por los chicos, y saber que a la mínima señal de peligro, me protegerán.

Con cuidado de no hacer ruido, Mark abre una de las puertas, ninguna tiene letreros que pueda darnos una pista de lo que encontraremos. La incertidumbre pesa en el silencioso ambiente, hasta que al abrir completamente la puerta, vemos un pasillo vacío... o eso creemos hasta que nos adentramos en él.

Ahogo un grito al ver a nuestro alrededor. Las paredes del pasillo son completamente de cristal, permitiendo la vista al interior de las habitaciones que contiene. Por instinto agarro el brazo de Mark y lo aprieto un poco. Él me mira y baja mi mano hasta entrelazarla con la suya y continuar caminando.

En otro momento hubiera sido una situación extraña, estar de la mano con mi ex novio y con el chico que me gusta a la misma vez, pero lo que observamos no me permite pensar en algo más.

A nuestra derecha se encuentra uno de los hombres de ojos rojos, encadenado al techo de la habitación, con el torso desnudo y los pies descalzos. Su pecho y abdomen están llenos de sangre, con marcas de, tal vez latigazos o algo parecido. Su cabeza permanece gacha y supongo que debe estar inconsciente. Una punzada de dolor recorre mi pecho, que luego es sustituida por la rabia, cuando levanta la cabeza y al vernos se descontrola; mueve su cuerpo de forma brusca en un intento por safarse de las cadenas que lo mantienen atado, y su expresión furiosa y perdida solo dice una cosa: quiere hacernos daño.

Esos malditos lo hicieron así, acabaron con su vida, con la persona qué había detrás de tanto salvajismo.

Lágrimas de impotencia recorren mis mejillas a medida que avanzamos y vemos escenarios similares; personas encadenadas, otras juntas que pelean entre sí con tanta fuerza, que terminan en el suelo moribundos.

¿Los enfrentan para probar su fuerza?

Al final del pasillo encontramos otra puerta. Esta vez es Adam quién va de primero, lo noto muy afectado al ver lo que probablemente le hicieran a él si sobrevivía a las "Fases Experimentales". Veo sus manos y puedo percibir como tiemblan al agarrar la manilla de la puerta. Llego a su lado y coloco mi mano sobre la suya en señal de apoyo; él me mira y me dedica una pequeña sonrisa agradecida.