SANGRE RUDA

Trece

- ¿Qué te pasó? -. Trato de contener mi voz molesta.

Aaron tiene un moretón en el ojo del tamaño de una naranja. Wilson le toca la piel púrpura verdosa y Aaron chilla cual ratón atrapado.

-Me duele -. Se queja apartando la mano de Wilson con rapidez.

-No lo dudo-dice Wilson-. Eso se ve bastante mal. Deberías estar en casa evitando que esa lesión se inflame.

El pobre chico tiene medio rostro hinchado, estoy segura que a causa de una de las cientos de palizas que le propinan en la escuela.

- ¿Cómo sucedió? -. Le interroga Wilson con preocupación.

-No corrí con suerte esta vez. Traté de defenderme, pero no pude y solo conseguí que me dejaran esta cosa en la cara y esto-. Se levanta la playera deportiva, deja ver varios moretones en el estómago.

-Esto es lo último que esos muchachos te hacen-bramo-. No voy a permitir que te sigan golpeando. Olvida lo que te dije antes, tienes que defenderte.

Dejamos en paz los guantes y me concentro en enseñarle a neutralizar los golpes del enemigo. Wilson le ayuda a utilizar toda la fuerza de su cuerpo y concentrarla en los brazos y las piernas. Yo le muestro algunas llaves para inmovilizar que he aprendido.

- ¿Qué rayos están haciendo?

Shane salta las cuerdas del cuadrilátero cuando se da cuenta de que Wilson está sobre mí.

-Me están enseñando unas llaves-. Musita Aaron sin dejar de poner atención.

Enrosco mis pies en el cuello de Wilson y tiro de él con fuerza. Wilson cae de espalda y se queja cuando sus huesos crujen. Tomo impulso y en segundos los roles cambian, yo estoy sobre él.

- ¡Oye, yo te enseñé eso! -. Shane me señala acusatoriamente.

Le hago una careta y le doy un golpe a Wilson en el pecho.

-Cuando tengas al oponente en esta posición tendrás mayor control sobre él. Su rostro y su pecho están expuestos-. Le digo a Aaron.

-Debiste haberme pedido ayuda a mí -. Refunfuña Shane.

-No creo que quieras ser su muñeco de práctica -. Masculla Wilson protegiéndose la cara de mis golpes.

Shane suelta una risa.

-No tienes idea sobre lo que es ser el muñeco de prácticas real de Madd ¿Cierto, linda? -dice recordando viejos tiempos-. Yo te mostraré llaves de verdad, Aaron- Shane me levanta de encima de Wilson y lo toma por la playera.

-Shane - digo-. No sé si...

-Shh-me calla-. Yo sé lo que hago. Mira, Aaron. Si el atacante se acerca por atrás y te toma del cuello tienes que usar tu espalda como palanca.

Shane le hace una seña con la mirada a Wilson, este suspira resignado haciendo exactamente lo que dijo Shane. Se coloca tras él, le pasa el brazo por el cuello y hace un poco de presión. Shane le sujeta el brazo y se inclina hacia adelante con rapidez, pasa a Wilson por su espalda y cae al piso haciendo crujir sus huesos nuevamente.

- ¡Esto es un maldito complot! -asegura-. Ustedes dos quieren matarme-. Se levanta sobándose la espalda como si tuviera sesenta años.

Veo una sonrisa asomarse en los labios de Shane que se mantiene de pie. Yo solo espero que esto no termine mal.

-Bien, Aaron. Ahora es mi turno de mostrarte un truco-. Wilson da pequeños saltos y levanta los brazos tomando posición de guardia como en el box.

-Vamos, Shane. Lánzame un buen golpe.