Onceavo capítulo

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Todos estos días se dedico a el mismo necesitaba concentrarse en si para poder sanar, por muy pequeño que haya sido el daño, nos deja traumas.

El alejarse de todo y todos ha servido de algo,Yeonjun ha recibido bien a Hueningkai  han convivido y la han pasado tan bien.

Está semana ha sido tranquila para él, el haberse alejado de sus problemas aúnque no es resolverlo pero podía decirse que conseguía un poco de paz.

El timbre de la puerta lo alarmó poniéndose de pie caminando a paso lento hacía la puerta—Voy voy...

Hueningkai había pedido pizza hace mucho que la pidió y aún no llegaba, realmente estaba hambriento así que suponía que era el repartidor.

Antes de llegar agarró de su pequeño ahorro que hizo hace dos días, había empezado a trabajar y por estar de prueba le dieron un adelantado al menos el terminar la preparatoria le ayudó a conseguir un trabajo, y que mejor que aprovechar la oportunidad.

Cuando abrió la puerta por querer proteger su alcancía está cayó al suelo rompiéndose y todo su dinero perdiéndose en el suelo.

—Ahg~ que tonto soy —Ni siquiera miró si era el repartidor pero estaba recogiendo el dinero mientras hablaba — Tardaron mucho estaba muriendo de hambre que bueno que llegó.

—tienes que regresar.

Esa voz, escuchar esa voz nuevamente heló al menor y lo asustó, que reconoció al instante, sintió un escalofrío no quería ni mirarlo.

—N-no—se negó sin todavía mirarle a los ojos.

Soobin rió por la ternura que el menor le ocasionaba negándose sin siquiera mirarle, le creería si lo mirará—Al menos mírame sería creíble sin tuvieras el valor al menos.

Pero que rayos se creía, si podría amarlo tanto y haberle soportado tanto su desprecio y rechazo, no merecía el amor de hueningkai.

Yeonjun había estacionado su auto, esa figura la conocía bastante rápidamente se quitó el cinturón de seguridad cerrando de golpe la puerta del vehículo, sus piernas largas lo ayudaron a llegar más rápido—¡Vaya vaya!, Choi Soobin  el hombre con el corazón más frío de este mundo —Escupió a las espaldas del más alto con tanto odio.

Aquel pelinegro volteó a ver de quién se trataba y sin más, tardó en reconocer al tipo, pues su físico había cambiado mucho—Yeonjun.

—Así, el mismísimo miss universo de Corea, claro que me recuerdas.

Una trágica historia que acabó con su carrera que tanto amaba  y todo por culpa de negocios, por la madre de Soobin y por culpa del mismo imbécil—Pero no se suponía que estab...

Yeonjun hizo a un lado al más alto poniéndose enfrente del menor, así protegiéndolo.

—Pero eso es pasado Soobin , ahora lárgate, Kai no quiere regresar.

—Y quién lo dice¿?, tú? es mi esposo y es nuestro problema.

—Yo estuve casi igual en esa situación contigo y no me gustaría que alguien más pasará lo mismo.

—Es diferente no compares las cosas, lo nuestro se acabó hace mucho desde lo que ocurrió y sabes a lo que me refiero.

Yeonjun le hervía la sangre , nunca pensó odiar tanto a alguien, sus ojos se llenaron de lágrimas de sólo recordar— y por eso otra víctima de los caprichos de tu madre?, Por qué no se refunden en el mismo infierno que tienen ahí.

Kai no entendía absolutamente nada, sólo podía ver qué ambos mayores se miraban con odio  no quería acabar como Yeonjun con el alma llena de resentimiento.

—Tú decides si irte Kai, es tu vida después de todo no puedo ayudar mucho aquí, pero si me necesitas aquí estaré.

Kai asintió y se fué con el mayor, aún que presentía que todo podría fluir bien.

O eso pensaba.

09/09/21
19/05/22

★ Matrimonio forzado ★ FINALIZADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora