Capítulo 15

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Todos estaban pendientes en el trabajo, impacientes para acabar con sus deberes. Era el último día laboral, Todos saldrían de vacaciones, por ese motivó la emoción se podía sentir en la empresa. Los profesionales hablando sobre los planes que tenían para estas semanas de descanso.

La profesional fue detenida en la entrada por la secretaría del jefe, está un tanto nerviosa por estar al frente de Cheryl. La psicóloga sabía que algo iba mal, era la primera vez que la mano derecha del jefe se le acercaba.

- ¿Qué sucede? - Pregunto la pelirroja a la tímida mujer.

- El jefe se encuentra un su oficina señorita Blossom. - Informó con apocamiento.

- ¿Qué?

- Él dijo que quería hablar urgente con usted. Con permiso. - Se retiró a su escritorio.

Se sintió inútil al dar dos toques a la puerta para anunciar su llegada, era su oficina, su espacio de trabajo, ella solo debía entrar y decirle a Gregorio porque se encuentra ahí, Aunque las ganas no le faltaban. Debía expresar educación delante de la cabeza de la empresa, si no lo único que ganaría sería ser despedida por el egocéntrico hombre.

- Adelanté. - Anunció. Ahí estaba, sentado cómodamente en la silla de la psicóloga, examina a la colorina que entra temerosa a la sala.

- Permiso. - Dijo cerrando suave la puerta. El hombre se puso de pie al momento que Blossom entró, se acercó rápido a la profesional, la mujer asustada por lo que podría decirle.

- ¿Cómo está señorita? ¿Qué tal su día?

- Buenos días, jefe, estoy bien, gracias por preguntar, y la misma rutina de siempre. - Respondió con una forzada sonrisa.

- Me parece bien. Iré al punto. - Dijo con desdén. - El señor Topaz me llamó en la madrugada. Preguntó por usted, quiere hablar con la psicóloga Blossom. Añadió que a las nueve la vería en su casa, y que esta es la dirección, por si se le ha olvidado.

- ¿A las nueve? Pero la sesión de George es hoy…

- Cancelé la junta. - Interrumpió. - y al terminar de hablar con el señor Topaz podrá retirarse a su hogar, último día nadie se enoja. - Mencionó con hipocresía.

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Sintió cada parte de su cuerpo ser consumida por la curiosidad y temor, el living se veía más grande, la última vez que estuvo sentada en el costoso sillón, el señor Topaz le dio la noticia de cenar junto a su hija, sí que estaba feliz esa tarde.

Era todo diferente ahora. El semblante del hombre estaba desganado, sus ojos cansados, estaba claro que el padre de su ex paciente no ha descansado lo suficiente para encontrarse en esa fachada con la profesional.

- Siento haber llamado a Gregorio, él no tiene nada que ver con esto, pero no tengo tu número telefónico, a sí que por eso me comuniqué con tu jefe.

Su voz sonaba fatigada, su mirada ida por el cuarto. La psicóloga estaba preocupada por el hombre, pensaba que en cualquier momento esté podía desmayar por el estado que se encontraba.

- No se preocupe por ello señor Topaz, entiendo que puede ser por una causa importante.

- A si es. Mi hija. Señorita Blossom, usted conoció a mi pequeña en el transcurso de su sesión, debe saber, tiene que saber algo de Antoinette. ¿Usted tiene idea de dónde puede estar mi niña? - Pregunto esperanzado.

Cheryl es una persona empática, muchos la conocen por esa virtud que posee, eso es uno de los motivos por los cuales decidió estudiar psicología. Podía sentir las emociones del hombre, la preocupación que expresaba a través de sus ojos color chocolate, esos ojos que les recordaba tanto a la morena. Una parte de ella quería relatar lo que había ocurrido con la castaña, todo lo vívido con la hija del desesperado caballero, pero el otro lado de su menté le decía que guardara los acontecimientos, que diera un falso relato al creador de la joven.

- Yo… Lo lamentó señor Topaz, no sé dónde se puede encontrar Antoinette, ella no ha asistido a las sesiones.

No mintió, ella no podía mentir, le dijo lo justo y necesario, lo que había ocurrido con su hija en el lado laboral.

- ¿Está segura? - Insistió.

- Sí. - Respondió mirando las pupilas del cabizbajo, el poco brillo de esperanza se fue, haciendo que Cheryl sintiera lástima por él.

- Entiendo. Gracias por asistir. Si sabe algo, cualquier cosa sobre mi pequeña, por favor házmelo saber.

Al llegar a su hogar fue a su sala de estar, con un té en la mesita y la ventana abierta para apreciar la bella tarde que Dios había pintado esté día. La pelirroja repetía las palabras que Antoinette le dijo esa mañana, “No puedo quedarme. Debo resolver unos asuntos personales”. ¿Qué plan tendrá la castaña para solucionar las problemáticas? Se preguntaba mientras miraba el cielo.

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- Toni, ¿Quieres divertirte? - La pelinegra se acercó provocativa con una botella de vodka a su “amiga” de cabellos ondulados, la cual estaba tumbada en la cama.

- Lo siento Vero, hoy no tengo ganas de beber. - Respondió sin ánimo.

- Llevas días así, ¿Qué te ocurre?

La de ojos felinos analizó el rostro de su invitada, esperaba que le diera un buen argumento, ya que la castaña nunca le había rechazado una botella de alcohol.

- Es solo que no tengo la voluntad de hacerlo.

- ¿Por qué no? - Insistió.

- Porque no me apetece. - Topaz quería que la pelinegra dejara las preguntas, que se fuera a beber sola.

- Por favor, Toni, vamos, acompáñame, estará bien que salgas unas horas de la realidad. - La ojos negros estaba logrando sofocar a la más baja.

- ¡Basta! - Explotó. - no quiero beber ya te lo dije. Respeta mi decisión Verónica. - Expresó molesta.

- ¡No sé que mierda te pasa Toni! Pero no dejaré que me hables de esa manera. - Salió del cuarto indignada, hizo retumbar la puerta al salir de su vivienda.

La morena se sentía cada vez peor, no quería estar en el hogar de la pelinegra. Experimenta indiferencia en la casa, ella no estaba segura ahí, le encantaría alejarse de la ciudad en la que se encuentra. Sintió remordimiento al recordar como trató a su “amiga”, Lodge tenía razón, no debió a ver alzado su voz, ella no tenía la culpa.
Quería un consejo, le apetece hablar con una de las personas que logró provocar confianza.

La de tez canela anhela afecto, un abrazó, un "todo estará bien". Desea ver a la ojos cafés, añora hablar con la hermosa mujer de cabellera roja, ella le proporciona paz. Necesita a Cheryl.

Avergonzada de tener aquellos pensamientos, sentimientos, decidió dormir, dejándose llevar por el calor de la cama cayó en un profundo descanso.

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Hola, espero se encuentren bien 😊. Primero que todo quería pedir disculpas por no actualizar, resulta que me gusta escribir cuándo estoy inspirada en la historia, para a si poder dar lo mejor en el relato, también anunciar que estoy realizando un proyecto en el cual la historia está involucrada; por ese motivo si ustedes tienen la aplicación "Tik tok" suscríbase a la cuenta "21SecretsLove" (es la misma que uso acá en Wattpad). Espero sus comentarios y opinión de la historia, Buenas noches. 💜🌃

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