Capítulo 23

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- Entiendo. Me alegro por ti... Envíale un saludo de mi parte, oh, tráeme un recuerdo. - Finalizó dejando el teléfono en su lugar.

- ¿Quién era? - Pregunto curiosamente.

Cheryl observo a Topaz, la morena usaba otra de sus prendas. Le gustaba que Antoinette se vistiera con su ropa, solo que ella sabía que sus atuendos no eran del gusto de Toni. Aun así se ve adorable con la blusa, esta le llega a los muslos, y los pantalones de la pelirroja hasta los pies.

- Betty. - Respondió feliz.

- ¿Betty? - Inquirió.

La castaña se encontraba más curiosa que antes, la sonrisa de Cheryl apareció al nombrar a Cooper, lo cual dejo celos en Topaz. Blossom se percató de inmediato al ver a la morena de brazos cruzados intentando expresar desinterés, por favor, Cheryl es una psicóloga, ella había aprendido a leer el lenguaje corporal.

- Sí, es una linda chica.

Quería observar como reaccionaba la más baja, conocer más de ella y las actitudes que adopta en las situaciones. En todo caso, Topaz, conoció el lado celoso de la pelirroja en la celebración de las serpientes, "estarían a mano".

- ¿A sí?, que bueno. Todas las mujeres son hermosas, a mí me encanta apreciar la belleza femenina. - Confesó con inteligencia.

- Bueno, probablemente Betty es más hermosa que las mujeres que has apreciado.

- ¿Por qué lo dices? - Preguntó acercándose a la colorina.

- Porque ella es prima, es una Blossom. -La reacción de Toni hizo que Cheryl estallara de la risa. Su expresión es demasiado para la ojos cafés. - Ella en este momento esta de vacaciones, fue a pasar unas semanas con su mamá. - Informó.

- Qué bien.

- Sí.

El silencio se posó en el hogar. Ambas observan los ojos de la otra, olvidando por completo de lo que estaban conversando unos segundos atrás. Tanto Cheryl como Toni sabían lo que pasaría.

La Morena tomó el rostro de la pelirroja, beso los labios que pedían a grito ser tocados por la boca de Toni. Cheryl abrazo a la castaña, para así sus cuerpos quedar lo más juntos posible. El aíre caliente de sus bocas y el inapropiado ruido de sus lenguas inundaban sus oídos. Las manos de Antoinette bajaron hasta el pecho de la profesional, bajó el cierre, y con lentitud recorrió desde el abdomen hasta los senos de la colorina, sintiendo el rápido latido que producía el corazón de Cheryl. Dejo su mano derecha descansar ahí, quería sentir el latir de la pelirroja.

- La ropa es muy grande para ti. - Opinó al ver que Toni se había resbalado con la tela del pantalón al intentar encaminar a la profesional al gran sofá.

- Un poco, pero aun así me gusta; tiene tu fragancia. - Expreso.

Llevo su nariz a la prenda para oler y disfrutar del aroma de Cheryl. La pelirroja sonrió por la acción de Toni.

- Lo sé, sin embargo, no quita el hecho de que puedas caer y lastimarte. Menos mal tengo buenos reflejos y te sujete a tiempo. - Dijo recordando la casi caída de la morena.

- ¿Entonces que propones?

- Llevarte al centro comercial a comprar ropa.

Confesó con emoción, emoción que desapareció al recordar que Antoinette no estaba de vacaciones en su hogar. Debía ser precavida.

- Es una buena idea. - Concuerda la más baja.

- No, mejor no. Compraré por internet, de esa forma tú también eliges las prendas que más te gusten.

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