♧Capítulo 28♧

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-¿Puedes hablar más claro? - dijo riendo - No te estoy entendiendo Cinco.

-¡Mudémonos! - hablé sonriente - ¡Vayamos a Pensilvania!

-Pero Cinco, somos unos adolescentes...

-Y lo seguiremos siendo el resto de nuestra vida. Cuando alguien se convierte en vampiro, ya no crece. ¿¡Qué más da!?

-Mucho Cinco. No quiero que lo malinterpretes, quiero vivir contigo, pero por otro lado, ¿qué será de mi hermano?

-Él está a cargo de tus padres, no de ti. - estaba algo alterado.

-Cinco... no seas injusto...

-¡¿Por qué?!

-Ya sabes que no me gusta hablar del tema...

-¿¡Qué tema!? ¿¡El tema que incluye que vuestros padres abandonaron!? ¿¡Ese tema!? ¡Tú lo has dicho, somos adolescentes! ¡Entonces, no nos podemos mudar, pero, ¿tus padres si pueden abandonarte?!

-Yo no he dicho eso... Yo ni siquiera lo elegí. ¿¡Te recuerdo que me enteré de lo sucedido el día después de que se mudaran a Asia!? ¡Ni siquiera fueron ellos quienes me dijeron que me habian abandonado! ¡FUE SU ABOGADO QUIEN ME LO CONTÓ!

-¿¡ENTONCES QUÉ MÁS TE DA!? ¡NO TIENES NADA, TAMPOCO TIENES NADA QUE PERDER! ¡PODRÍA DECIRSE QUE YA NI PADRES TIENES!

-¡NO HABLÉ DE ESTO CON NADIE, LO MANTUVE EN SECRETO, ERES LA ÚNICA PERSONA A QUIEN SE LO CONTÉ PORQUE CONFIABA EN TI! ¡ES DURO PARA MÍ, CINCO! ¿¡ES QUÉ NO ME ENTIENDES!?

-¡PUES NO ___, NO TE ENTIENDO!

Sus ojos reflejaban ira. Sin decir una sola palabra más, se levantó de la cama y salió de la habitación.

-Espera... ¿¡a dónde vas!?

-A algún sitio donde no me pongan mi mala situación en mi contra, solo para que tome una maldita decisión. ¡Por si no lo sabías, se le llama maltrato psicológico! - dijo abriendo la puerta de la casa para salir.

-¡No ___! ¡Espera! - pero la puerta se cerró, dejándome solo en la casa - ...No era mi intención hacerte sentir así...

Narra-Narradora

___ caminaba por los oscuras y solitarias callejones de Toronto mientras una y otra vez las palabras de Cinco sonaban en su mente.

"¡PODRÍA DECIRSE QUE YA NI PADRES TIENES!"

-Ya ni padres tengo... - repitió en voz alta.

Empezó a caminar aún más rápido mientras recuerdos pasaban por su mente.

"-¡Feliz Navidad! - dijo el padre de ___ mientras los mellizos llegaban al salón emocionados.

-¡VAMOS! ¡Abran los regalos! - habló esta vez su mujer.

[...]

-¿¡Una bici!? ¡Es el mejor regalo que podría haber recibido! - dijo la pequeña ___ de 5 años mientras sus padres sonreían alegres."

Una lágrima cayó por la mejilla de la chica al recordar aquel lindo momento.

"-Vamos pequeña, si quieres defenderte de los chicos del colegio déjame enseñarte - dijo el padre de ___ mientras le ponía unos guantes de boxeo a su hija de apenas 11 años.

Ella solo reía ya que apenas podía cargar los guantes.

-Ahora, golpea el saco - dijo señalando el gran saco que había frente a ellos.

La pequeña __ golpeaba el saco con todas sus fuerzas hasta cansarse."

___ bajó su mirada la piso mientras continuaba caminando. Miles de lágrimas caían de sus ojos.

"-Llevo media hora buscándoles, salgan ya de su escondite, ¡me rindo! - gritó la madre de los mellizos.

Pero algo les delató, ambos empezaron a reír y eso hizo que su madre abriera la puerta del armario, encontrando a los adolescentes de 13 años escondidos ahí.

-¿¡Qué les dije de esconderse en los armarios!? ¡Ya están mayores para eso, acabarán rompiéndolos! - dijo la madre riendo.

-¿¡Quién quiere pasta!? - interrumpió su padre entrando a la habitación.

-¡YOOO! - dijeron ambos mellizos.

-La hice con cariño para mis mellizos favoritos - dijo el padre."

-Y ahora sé que todo lo que dijísteis era una mentira más... - dijo ___ mientras lloraba. - Nunca nos amaron, estaban esperando a la oportunidad perfecta para abandonarnos. Y cuando llegamos a Toronto... Cumplieron su sueño, nos dejaron solos...

La chica se apoyó en la pared de un callejón sin salida y fue resbalando hasta quedar sentada en el mientras lloraba desconsoladamente.

-Perdone por meterme señorita... Pero, ¿está usted bien? - ___ miró hacia el lugar proveniente de la voz.

Un hombre alto y de mediana edad se aproximaba hacia ella.

Y lo que ella más temía sucedió...

Ojos rojos...

Colmillos largos...

SED DE SANGRE.

Corazón sin latidos {Cinco y tú}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora