Capítulo 36

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   Corrían afuera para calentamiento como era usual.

   Cada uno debían hacer al menos cien vueltas. Para la mayoría era como pisar la línea entre la vida y la muerte, para otros, era como darle un paseo a un perro.

- ¡No te vuelvas a caer como la otra vez! -Burló Stan Hamburg mientras corría a un lado de Tn.

- Y tu no provoques un terremoto -devolvió la burla, haciendo temblar con su mano la barriga de Stan.

   Apresuró el paso dejando atrás al robusto y seguir con su trotre, regulando su respiración.

   Está vez no andaba con su grupo habitual. Valt y Rantaro pidieron permiso para ausentarse unos cuantos días, según ellos tenían asuntos personales referentes a la búsqueda de un amigo; un tal Shu Kurenai.

   Ya solo le faltaban cinco vueltas para completar las cien. Iba un tanto más rápido para poder finalizar.

- ¡Vamos! -gritaba Trad Vasquez mientras sonaba su silbato-. ¡Todos tienen que mejorar su tiempo anterior!

   Seguía corriendo. Mientras que en su cabeza aparecían cientos de pensamientos, que la hicieron surcar sonrisas en su rostro, llevaba días con ese sentimiento.

   Sonrisas bobas no dejaban de dibujarse en sus labios, recordando lo que había pasado.

- "¿Te parecería bien si te llamo todas las noches...?"

   Era extraño para ella, pero a la vez increíble. Podía decirse que estaba más que felíz.

- ¡TN JEON SUK!

   Paró de correr en seco, se equilibró para no caer al suelo y reincorporarse.

   Trad la llamaba, a parecer desde hace un buen rato. No había escuchado las voces, estaba un tanto avergonzada.

- Perdón... -se disculpó, secándose el sudor - ¿Pasó algo...?

- Tus cien vueltas -aclaró el entrenador- las terminaste pero seguiste corriendo. Hiciste cinco vueltas más.

- ¿Que? -dijo Tn-. N-no me había percatado...

   Realmente estaba perdida en sus pensamientos. Pero para ella valía toda la pena del mundo.

   Pasó a irse del campo, con el permiso de Trad. Caminaba hacia la estructura de BC Sol, por alguna razón tenía algo de apetito.

- ¡Espérate ahí!

Volteó hacia atrás.

   Silas venía hacia ella con cansancio. Correr cien vueltas te deja mamado.

- Hola -saludo la chica sin expresión-. ¿Sucede algo?

- ¿Que sucede? -reitero la pregunta el peli-verde.

- ¿Que sucede contigo? -reitero x2 ya confusa.

- ¿Que sucede de que? - ª.

   Ambos ya estaban confundidos. Suspiraron profundamente al mismo tiempo, para aclarar la situación.

- ¿Para que me llamas? -mejoro la pregunta Tn.

¿Solo uno? [Free, Lui, Silas X Tn]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora