¿Solo uno? [Free, Lui, Silas X Tn]

Capítulo 34

Iban de camino al Astro.

Apenas había salido salido el bus. Tn estaba sentada en los últimos puestos junto a Rantaro, Valt detrás de ellos junto a Shasa.

Estaban excluidos de los demás. Ellos por los rumores de que se iban, y ellas por defenderlos.

- Y dime, Rantaro -Tn-. Tu amigo, el tal Daigo, ¿Qué opinas de sus habilidades?

Se mantenia al tanto de lo que había pasado la vez en la que los chicos fueron a ver a su amigo, le contaron cada detalle, incluso de los otros miembros.

- Es fuerte -respondió el rubio-. Cuando Valt y yo lo enfrentamos tenía un aire diferente.

- Tal vez fue el cambio de volverse el Capitán de un equipo.

Rantaro la miraba con interés. Estaba atento a lo que la chica decía.

- Mira -siguió-, cuando alguien se vuelve Capitán, tiende a tener más autosuperación, eso es una de las principales razones del por qué alguien se vuelve obtiene un cambio de nivel aún más mayor.

- Ya veo -dijo Rantaro-. ¿Y eso te paso a ti? Bueno, antes eras capitana.

- Supongamos que si...

La razón principal de volverse más fuerte de Tn ya había sido explicada antes. Sin embargo estaba empezando a dudar si quería seguir con esa meta o no, ya que su sueño en realidad no era volverse más fuerte, si no ser entrenadora.

Siguieron charlando. Llegaron a intercambiar palabras con Valt y Shasa durante el camino. Mientras, todo el equipo los miraba con desprecio, ni siquiera disimulaban.

Absolutamente todos los miraban, incluso él.

Silas miraba de reojo a Tn charlando con los otros tres. Recordaba todo lo que pasó con ella el día de ayer.

En su mente organizaba un plan para que dejara de estar molesta con el. El Plan A; dejar que las cosas se arreglaran por si solas, pero podía que de esa forma, debido al orgullo, no llegarán a hablar jamás. El Plan B; pedirle nuevamente disculpas de manera sincera, el problema sería que ella no las aceptará.

Tenía la cabeza llena sobre pensamientos acerca de ella, sin embargo, no dejaba de mirarla.

Tn, desde su asiento, se sentía observada. Ese presentimiento de cuando alguien te ve y enseguida te volteas, pues eso le pasaba.

Volteó, hacia la dirección de Silas. Se le quedó mirando, y viceversa. Intercambiaban miradas profundas, ella con el ceño fruncido, y él con una expresión de seria pero tranquila.

La peli-rosa solo giró su cabeza con desden, no quería ninguna clase de contacto con Silas, aún estaba molesta.

Él aún seguía mirándola, está vez con molestia, no le gustaba que lo ignoraran.

Al igual que ayer, aún tenía esa bandita pegada a la nariz.

- Todos atentos -hablo desde la parte de adelante Trad-, ya hemos llegado.

En cuestión de minutos todos los que estaban dentro del bus bajaron, se dirigieron dentro del Astro.

Los que estaban en la alineación fueron directamente a su sitio de espera preterminado. Calentaban mientras se hacia la hora de entrar a la arena con el otro equipo.

- Quiero aclarar algo -empezo a hablar Silas con tono arrogante-. Es obvio que nadie aquí podrá con un equipo como AS Gallus, es por eso que yo me encargaré de todo.

- ¿Es una broma? -gruño Stan Hamburg-. ¡No me subestimes!

Tanto Valt como Stan estaban reclamándole. Cómo cualquier otro estaban enojados por qué los subestimaban.