Hermanas

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-ay mi cabeza- sana abría los ojos lentamente estirandose- dónde estoy?.

-hasta que despiertas, son las 1 de la tarde- momo entraba a la habitación con un café y unas pastillas.

-Momo?... cómo llegué a tu casa?.

-te fuimos a buscar con Dahyun- al escuchar eso sana se preocupó por si dijo alguna tontería o algo demás.

-ehh, no dije nada raro o si?.

-no, solo que me odiabas.

-oh... eso no es cierto, es solo que estaba molesta por la actitud que has estado teniendo...- dijo sana agachando su mirada.

Momo suspiro fuerte.- lo sé, yo también estoy enojada conmigo por eso, pero está vez seré mejor, no caeré en idioteces con esos idiotas.

- eso significa que volverás a trabajar?.

- obvio mi vida- dijo Momo acomodándose al lado de sana.

-te amo Momo, sabes que eres como una hermana para mí?.

-sana, tu eres mi hermana, aunque no compartamos sangre, nuestro lazo es mucho más fuerte que una prueba de ADN. nuestras almas y corazones son uno.

- ay te amo!!! estás tan cursiii- sana parecía burlarse pero estaba feliz de lo que decía Momo.

- si si ajá, tómate lo que te traje.

- ok ok, enseguida- sana obedeció.

-Oye, te parece tenemos un día juntas?.

-mmm?

-no sé, salir por ahí, tener un día para las dos, hace tiempo que no pasamos tiempo juntas.

-hablas enserio? me encantaría!!!- sana saltó de la cama y comenzó a revolotear como una niña pequeña por la habitación Momo sonreía al ver la felicidad que irradiaba.

- si ok ve a bañarte, saldremos en media hora.

- aún tienes el mueble que está con mi ropa cierto?.

- obvio. está en la habitación del fondo
- sana movió sus manitos en señal de felicidad y corrió a buscar su ropa.

luego de un baño, realmente necesario y relajante, sana se vistió. bajo corriendo las escaleras y escucho el motor del auto de Momo, ella ya estaba fuera.

sana tomo un plátano para el camino, ya que su estómago estaba vacío.

cerró la puerta de la casa y subió al auto.

-a dónde iremos?- consulto sana con la boca llena.

-hmm, pues pensaba llevarte a unos lugares que no pude llevarte mucho cuando eras pequeña- sana la miró confundida.

-hmm?

- ya lo verás.

El auto comenzó a avanzar y sana miraba emocionada por la ventana, hace tiempo que no tenía un día así con Momo.

Momo se estacionó en el centro comercial. Sana confundida al ver que se bajó Momo la siguió. subieron al último piso y sana boquiabierta al ver todas esas luces y ruidos de juegos le dió una gran sonrisa a Momo.

- espera voy a ir a recargar la tarjeta para que podamos jugar.- y así era, Momo la había llevado a los juegos del centro comercial.

Momo recargó la tarjeta para que pudieran subirse a todos los juegos.

- bien a cual quieres su....

-VAMOS A ESTÉ!! NO A ESTE... UHH PERO ESTE IGUAL ESTA GENIAL.

-Sana! Sana! tranquila, vamos a subirnos a todos.

secretaria íntima (Saidahmo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora