Los Mugiwaras se encontraban reunidos con Law en la preciada biblioteca del submarino, Trafalgar y Roronoa comentaban desganados junto a Usopp y Franky lo fuerte que Jack, quien atacó Zou, tenía que ser, mientras Kanjuro, Raizo y Kin'emon evitaban comentar el tema. Todos estaban sentados excepto Robin, quien observaba maravillada la enorme colección de libros que los piratas Heart poseían.
— Oi, enana, tú que has visto a Jack más de una...
Torao no terminó la frase cuando puso sus ojos sobre la mencionada, que observaba a un punto cualquiera mientras se le escapaba una lágrima.
Los presentes la observaron alarmados.
— ¿Qué te pasa? —cuestionó el cirujano levantándose alterado, movimiento que imitaron Kin, Franky y Zoro.
— Nada... Es solo que... —hizo un puchero y apretó los ojos con fuerza, dejando escapar un par de lágrimas más— ¿De verdad creéis que Sanji volverá?
Law se acercó a ella y le acarició la cabeza tiernamente revolviéndole el pelo y causando que, como siempre, se peinase molesta, pero fue Roronoa quien tomó la palabra.
— ¿Confías en Luffy?
La chica, que se encontraba frotando sus ojos con ambas manos, asintió reiteradamente mientras apretaba sus labios en un intento de no sollozar.
— Pues entonces ya conoces la respuesta. —respondió irritado dirigiéndose a la salida. Estaba enfadado, pero no con la chica, si no con el cocinero. Recordaba como al principio, cuando la bailarina se unió a ellos, el rubio le amenazó con cortarle en pedacitos con su propia katana si volvía a ver llorar a _____ por su culpa, pero ahora era ese estúpido quien la estaba haciendo llorar.
— Voy a partirle las piernas a ese pervertido por hacerla llorar en cuanto vuelva. —susurró para sí mismo sin que nadie pudiese comprender qué murmuraba, luego alzó la voz— Y si sigues dudando, pregúntales a Robin y Usopp qué ocurrió cuando ellos dejaron la banda.
Dicho eso, se marchó a entrenar, generando intriga no en la enana, que ya conocía esa historia por la propia Robin, sino en Kin y Law, que comenzaron a llenar su mente de preguntas respecto a eso, pero jamás se atrevieron a preguntar.
El viaje hasta Wano se hizo hasta corto, puesto que los habitantes del país se dedicaron a explicarles las costumbres y las normas sociales que se establecían allí desde épocas bastante antiguas, para no sorprenderse con nada. También aprovecharon para sincerarse, y contarles que realmente Kin, Kanjuro, Raizo y Momo no pertenecían a la época actual, sino que viajaron en el tiempo 20 años hacia delante gracias a la habilidad "mágica" (así lo llamaban ellos) de Toki, la madre de Momonosuke. Por supuesto, los presentes lo tomaron a broma y comenzaron a reír ante esa estúpida historieta, hasta que los rostros serios de los samuráis indicaban que hablaban muy en serio. El tema no se volvió a tocar hasta que llegaron a Wano una noche de tormenta. Aquel horrible temporal que afectó a todo el país durante varios días les vino fenomenal para poner a salvo el submarino e inmiscuirse en el país sin ser notados, ya que no había un alma por donde quiera que pasaban. Lo primero que hicieron fue visitar el monte en el que se encontraba lo que quedaba del antiguo castillo de Kozuki Oden, donde todos confirmaron que realmente ese peculiar grupo había viajado en el tiempo: sus tumbas con nombre y fecha no dejaban lugar a dudas.
La estancia en Wano estaba siendo pacífica hasta el momento, los samuráis se ocultaban de forma perfecta, los Heart y los Mugiwaras se habían adaptado a sus papeles y se encontraban recabando información relevante de la situación del shogun y el Yonkou, sobre todo Robin (O-Robi en Wano), que trabajaba de forma directa para Orochi. Zoro actuaba como Zorojuro, un ronin que andaba perdido y hacía lo que quería, así que prácticamente no debía disimular, hacía exactamente lo mismo que siempre. Usopp (Usohachi), era aparentemente un vendedor de aceite de sapo. Franky, ahora Franosuke, trabajaba como carpintero en busca de los planos de Onigashima. _____, se encontraba actuando como maestra de niños pequeños, para así obtener información acerca de qué historia contaban los gobernantes actuales del país, dándose cuenta de que, lamentablemente, la historia había sido cruelmente retorcida hasta poner como villanos a alguien tan admirable como Kozuki Oden y los suyos.
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Lo que nos une (Zoro x Reader)
RomanceSu vida estaba llena de música, pero la aparición de unos piratas que le salvan de la muerte, con un capitán que se autoproclama el futuro Rey de los Piratas, añaden el toque de aventura que, sin saberlo, tanto necesita. Historia basada en los pers...