CAPÍTULO 10

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Primera impresión.

Viernes en la tarde, terminando mi jornada laboral, permanecía sentado, meciendome con la silla de mi escritorio, mirando pasar a Marnie una y otra vez, mi mente no paraba de imaginarse detalles con ella, tenía que planificar algo para conocerla. El pánico me rodeaba cuando me imaginaba teniendo charlas sexuales con ella, jamás habia sentido algo asi, pero algo me limitaba en ese ámbito, quizás le parecería ofensivo esa clase de temas.

En mi telefono celular se asomó una llamada, Frank siempre llamaba los viernes para cuadrar la hora de reunión en el bar, la costumbre nunca dejaba de ser, casualmente y redundado el tema, como es costumbre tampoco estaba Carlos, solo Robert, Frank y yo. Descubrí una excusa perfecta para invitar a Marnie al bar, asi ella podría socializar mas con otras personas, aunque es solo un pretexto, mi objetivo es saber mas sobre ella.

La invité con nervios encima, mis palabras tartamudeaban y mis gestos eran extraños al tema, le expliqué con pocos detalles las costumbres de los viernes con mis amigos, solo reía con cada palabra que salía de mi boca, me pidió calmarme y respirar. Que extraña sensación tenía, supongo que Carlos se siente asi cuando habla con las mujeres, pero era algo nuevo para mi, me costaba entender mi actitud en el asunto. Aceptó después de tomarse un tiempo y pensar —pensaré que no eres un acosador y aceptaré— dijo después de un gesto de duda en su rostro, su condición fue llevar a una amiga, la idea fue magnifica, dos mujeres en ese lugar harian del encuentro algo espléndido.

Caminábamos los tres al bar, hablo de Marnie, su amiga y yo. katrin es de tez morena y pelo risado, un poco baja y de actitud confiada, tiene conocimientos sobre muchas cosas, podría decir que es filósofa, pero algo en ella no me daba la confianza suficiente. Al llegar al bar estaban Roberth y Frank sentados en la barra esperándome, su sorpresa se hizo notar luego de mi llegada, jamás esperaban que yo apareciera con dos chicas, nos acercamos y las presente de manera inmediata. —¡Vaya Jhon! Parece que desde ese bar consigues mujeres muy fácil— dijo Robert de manera imprudente, tragué hondo y mi respiración se trancó, no espere ese comentario tan imprudente, todos nos miramos despues de unos segudos de silencio —cállate— le dije entre dientes y con voz baja, creo que acababa de perder la primera impresión con su amiga, y se de buena fuente que es muy importante que una amiga te de el buen visto a primera vista, tenia ganas de matar a Robert, entre carcajadas preguntó Katrin su amiga —¿que? ¿Como asi? —  solo pude respirar y tomar paciencia, Robert había arruinado de manera brutal la primera impresión, —es algo de hace meses— dije riéndome con nervios, me apresuré en pedir tragos para todos, y cambiar de tema abructamente.

La confianza nos habia tomado después de varios tragos, todos hablamos de temas cotidianos de manera salteada, detallar a Marnie no era nada fácil, la confianza habia logrado que se comunicara mas, pero nada me decía como era realmente, Katrin le llevaba 4 años por encima, mencionó que era sexologa, mi intuición había logrado la mala espina que sentía, tomé precaución y evité mencionar algo imprudente, su forma de hablar del sexo era muy acertada, la conversación me sirvió como una clase para saber mas del asunto.

Luego de momentos y charlas Frank menciona el juego de las pantis, me pareció otra imprudencia, comenzaba a pensar que fué mala idea invitar a Marnie a este lugar, conociéndola un poco mas supe que se reserva en asuntos sexuales, Katrin se burlaba del asunto mencionando que se perdía de las delicias de ser carne. Katrin de seguro es experta en el juego de las pantis, y siendo mujer sabría mas sobre el tema, ella de manera inmediata aceptó el juego, Marnie no tardó en mencionar su pensar sobre el tema —que juego mas bochornoso— dijo mientra cruzaba sus brazos, —no seas aguafiestas— dijo catrin tocando su brazo —comencemos conmigo— siguió Katrin —si adivinan que estoy usando yo, invitaré esta ronda— de inmediato todos nos miramos, Frank y Robert se emocionan por la actitud de katrin, yo solo probaba un sorbo de mi trago. Katrin llevaba puesto un pantalón de tela de algodón elástico, entre sus nalgas no se marcaba nada, eso era mas que obvio —usas tanga— dijo Robert, —definitivamente, llevas puestas unas tangas— le siguió Frank, tomé otro sorbo de mi trago mientras pensaba que tan patéticos pueden estos hombres como para no darse cuenta —sigues tu— dijo Marnie, no pude darme cuenta que me iba a hablar, me impacté y derramé un poco de trago en mi rostro —nada, no llevas nada— dije mientras me limpiaba la cara, katrin me miró, sonrió, y ascendió con su cabeza —tenemos a alguien muy listo, interesante— dijo con una expresión de duda en su rostro, Marnie volteó a verme un poco sorprendida, su mirada reflejaba duda y su expresión una sonrisa, creo que empezaban a juzgarme, —una ronda— gritó katrin, —yo pago esta— continuó en su grito.

A medida que la noche pasaba, el juego seguía su curso, Frank y Robert debian casi todos los tragos, por un momento Katrin se posó sobre mi y dijo sin duda alguna —Jhon, adivinarás que pantis trae Marnie— otra vez volví a derramar mi trago, esta vez moje mi camisa, Marnie derramó su trago de igual manera, pero a ella la acompañó su rostro ruborizado, se pudo notar muy fácilmente por su piel extremadamente clara. No me quedó mas remedio que aceptar, detallar esta mujer no era nada sencillo, su atuendo del trabajo era ajustado, pero no lograba visualizarla, ha sido la única mujer que me ha causado dudas, su rostro me demostraba un poco de timidez, eso me hizo pensar que tal vez usaba unas pantis comunes, quizás de encaje o algo asi, eso fue lo que dije sin dudarlo —te equivocas— dijo Marnie con soberbia en su rostro, por primera vez habia perdido, su acción siguiente fue bajar un poco su falda y mostrarnos a todo que llevaba puesto debajo, mi cara de asombro y la de todos se posó al mismo tiempo, traía consigo una tanga de hilo sumamente fina, demasiado sensual y sexy. Mi mente estalló de manera brutal, cambié la forma de pensar enseguida, quizás a esta mujer si le gusta el sexo, o quizas planea eso.

El tiempo corrió y con tragos encima decidieron marcharse, creo que habían bebido lo suficiente, estaban en el momento de seducción perfecto, Robert habia tenido un intercambio de palabras muy directas con Katrin, enseguida el se ofreció a llevarlas. Entre susurros de palabras que tuvieron Marnie y Katrin, Marnie se quedóz, Robert consiguió sexo esta noche. Frank también me dejó y quedamos Marnie y yo. Seguimos hablando, lo hacíamos despacio, ella me daba mas confianza y se destapaba de tal manera, me habló del típico bastardo que fué su novio y la engañó, yo me limitaba a mencionar mi vida, solo le expliqué de las malas experiencias universitarias, ella en el transcurso de sus estudio frecuentaba fiestas y antros, me daba mas señales al respecto, me alegraba saber mas sobre ella, mis dudas pasaban de inmediato.

Cae la madrugada y decidimos irnos, no intenté seducirla, solo preferí parecer un amigo. Como un caballero notable que soy la acompañé, no pretendía dejarla sola. En el camino las charlas se hacían notar de tal manera, pero nuestras palabras eran enredadas debido al alcohol que llevábamos encima.

Topamos la puerta de su residencia, al llegar a la puerta ella pone su mano en mi rostro barbado, me mira fijamente y me agradece por la noche, si que le hacia falta, no pude evitar mirarla fijamente, un silencio se postró en el ambiente del lugar, su rostro hermoso y ojos brillantes me miraban, parecía muy tentador, puse mis manos entre su cuello y mentón y la besé, pero enseguida bajó su rostro y miró al suelo —perdón por confundirte, es el alcohol— dijo mientras se alejó un poco de mi, quedé anonadado, no sabía que hacer, no me había pasado esto en años, sentí vergüenza como la primera vez, solo le sonreí y me retiré, sentí miedo e inseguridad, no voltee en ningún momento, no entendía que me pasaba, solo caminé fijamente a mi residencia.

JHON FLETCHER -ÓRGASMO- (COMPLETO) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora