♠|CAPITULO 8 - DESASTRE EN LA EMPRESA|♠

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Ray estaba tan impresionado, había dado su primer beso y había sido con alguien mucho mayor que el.

—¿Nos vamos?— Norman subió al carro, podía ver a Ray nervioso, algo muy lindo para su vista —¿Estás bien?

—Si, no hay ningún problema—Ray evitaba su mirada, sabia que si lo veía a los ojos se sonrrojaria —Ya hay que irnos.

Norman sonrió, había logrado ponerlo nervioso.

«Es tan tierno» Norman arranco el carro, Ray veía detenidamente la cuidad, tenía mucho tiempo de no ir allá, era tan nostálgico.

Los edificios eran gigantes, había mucha gente y muchos lugares que se podían visitar.

—¿A dónde te gustaría ir a comer?— Norman desvío su mirada un momento viendo a Ray.

«Cierto, que íbamos a ir a comer primero» Ray lo había olvidado por completo.

—Pues... En realidad no tengo mucha hambre— Ray se sentiría muy avergonzado si llegaba a ir a un restaurante con Norman, no era que le avergonzara que lo viera con el, es solo que todos pensarían mal sobre Norman ya qué Ray aún no era mayor de edad, no quería darle esa imagen.

—¿Estás seguro? Debes de comer algo por la tarde— Ray no sabía que responder —Prefieres ir a la empresa nada más, ¿No es así?

—Bueno...— Ray rasco su mejilla, estaba emocionado, pero tampoco quería parecer insistente.

—¿Te emociona mucho?— Norman tomo una de las manos de Ray, siguió conduciendo, Ray solo asintió —Bien, vallamos directo para la empresa, ahí comeremos.

Ray sonrió tomando la mano de Norman, en ningún momento la soltó hasta que habían llegado.

El carro se estacionó en la entrada, Norman salió junto con Ray. Estaba fascinado, era un edificio tan grande, sentía que le daba vértigo.

—Es increíble— La cara de Ray era un deleite para Norman —¡Hay que entrar!

Ray tomo la mano de Norman pasando por la puerta principal, todos saludaban y eran muy atentos con Norman, le tenían mucho respeto, pero a Ray lo veían de una manera, un tanto "especial", podía escuchar varios de los susurros de los chicos ahí.

"—¿Acaso trajo a otro? Ese se ve más joven que los demás, —Se ve que el jefe sabe cómo divertirse, —¿No se ve muy pequeño?"

Ray escuchaba los rumores, no sabía a qué se referían, si, el era menor, pero no tenía ningún tipo de relación con Norman, ¿Acaso el era un casanovas?

—¿Sucede algo?— No solo los rumores fueron escuchados por Ray, si no que Norman también los había oído imponiendo su lugar.

Puede que el sea un jefe amable y entendible con sus empleados, pero también tenía su carácter, y todos y cada uno de los empleados lo sabía a la perfección, no debían meterse con el, ni con lo de su propiedad.

Nadie respondió, todos quedaron callados siguiendo con su trabajo. Norman tomo más fuerte la mano de Ray entrando al elevador, su mirada era imponente, no dejaría que nadie hablara de el, menos en su presencia.

—No hagas caso a nada de lo que digan— Norman trataba de relajar el ambiente —Suelen hacer conclusiones sin haber comprobado los hechos.

—Si, así suele ser la gente— Ray se sentía algo incomodo, su primera impresión en ese lugar había sido fatal, tal vez no era buena idea seguir ahí —Sabes, tal vez...

Las puertas del elevador se abrieron, Norman empezó a caminar hacia una gran puerta roja que estaba después del pasillo. Ray iba detrás de él.

La puerta se abrió, era el último piso del lugar, era la oficina de Norman, era gigante, con excelente vista hacia la ciudad, era un sueño.

—¡Esto es increíble!— Ray empezó a recorrer toda su oficina, se sentó en los sillones que ahí estaban, miro detenidamente el escritorio y vio los cientos de libros que Norman tenía ahí.

—Debo bajar un momento— Norman saco su celular —Puedes sentarte aquí en lo que regreso.

Norman tomo la mano de Ray llevándolo hasta su silla.

—¿Esta bien que me siente aquí?— Ray estaba emocionado, pero también algo apenado, por primera vez estaba en la silla de un CEO

—¿Por qué no lo estaría?— Norman le sonrío para darle confianza, tomo su mano dando un beso en su mejilla —No tardo.

Norman salió dejando a Ray solo, dio vuelta a la silla enfocando su mirada hacia la gran ventana de atrás, miro todo el paisaje, era lo más bonito que había visto.

—Este estilo de vida debe de ser increíble.

Pasaron unos minutos, Ray se quedó en la silla dando unas cuantas vueltas mientras tarareaba una canción, parecía aburrido, pero estaba pasando un rato muy agradable.

—Señor, me dijeron que acababa de llegar, lamento...— Alguien había entrado a la oficina, Ray dio vuelta a la silla viéndola, se le hacía conocida, pero no sabía de dónde.

—Hola, es un placer— Ray se levantó de la silla llendo hacia ella, estiró su mano para saludar —Soy Ray.

—¡Seguridad!— Emma, la secretaria de Norman había entrado encontrándose con Ray.

Tomo su mano jalando lo, lo derribo en el piso dejándolo inmóvil.

—¡Espera, espera!— Ray trataba de asimilar la situación, lo habían derribado sin siquiera dejar explicar que hacia ahí —¿Estás loca?

—Manden a seguridad a la oficina del señor Ratri, ahora— Emma hablo por su intercomunicador pidiendo ayuda.

—¿¡Me estás escuchando!?— Ray trataba de explicar las cosas, pero Emma no quería escucharlo, no era la primera vez que alguien externo a la empresa entraba.

Ray empezó a moverse tratando de soltarse del agarre de Emma, pero parecía ser imposible.

—¡Deja de moverte!— Emma hacia su mayor esfuerzo para contener a Ray, pero le era difícil ya que Ray empezaba a emprender más fuerza.

—¡Lo haré en cuanto me sueltes!— Ray logro mover su mano, se dio vuelta quitando a Emma de encima de el ahora la tenía en el suelo a ella.

Ambos forcejeaban tratando de contener al otro.

—¡Déjame explicarte!— Grito Ray, quería calmar la situación pero los guardias ya habían llegado.

Empujaron a Ray al suelo, lo tomaron atando sus manos hacia atrás.

—Tardaron bastante— Hablo Emma levantándose del suelo —Saquen lo de aquí.

—¡No, espera!— Ray iba a hablar, quería decirles que estaba con Norman pero uno de los guardias lo había golpeado en el estómago sacándole todo el aire que tenía.

—¿Acaso crees que puedes hablar así como si nada?— El guardia tiro del cabello de Ray para que alzará la cara y lo viera directamente —Lamentarás haber entrado a este lugar.

¿QUE PODRÍA SALIR MAL? | TPN •NORRAY• Donde viven las historias. Descúbrelo ahora