♠|CAPITULO 13 - MIS SENTIMIENTOS - PARTE 2|♠

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—Creo que yo...— Ray estaba nervioso, no sabía cómo expresarse —Creo que necesito dormir.

Ray se levantó para salir de ahí, no estaba dispuesto a tener esa conversación.

—Espera, espera, espera— Don lo tomo del brazo volviéndolo a sentar a su lado —¿Quieres volver al salón después de lo que pasó?

—Sabes que no me importa lo que ellos que digan de mi, solo espero que no sean tan intensos y me dejen descansar— Don no estaba de acuerdo, Ray se veía tan mal, solo quería ayudarlo, pero no quería que se molestará.

—Si eso lo se, por qué no mejor te acuestas aquí y me hablas de como fue tu mañana. No hay nadie al rededor así que no abra problemas, sueltalo todo— Don recostó a Ray en su regazo para que descansará.

—¿Por qué no mejor me dices que hiciste ayer en mi casa?— Don se sorprendió al escucharlo —Se que estuviste ayer allá, ¿La pasaste mal? 

—Pues...— Don no quería ni recordar el día de ayer —No fue tan malo, tu madre fue amble.

—Si, claro— Ray tapo su cara, sabía que posiblemente Don haya estado sumamente asustado por el comportamiento de su madre —¿Cómo llegaste ahí?

—Solo iba pasando y vi a tu madre, vio que no estaba contigo y me empezó a interrogar— Don suspiro al recordarlo —No recordaba a tu madre tan protectora sabes.

—Asi suele ser— Ray cerro sus ojos, estaba molesto —No era necesario que le dijeras todo.

—¿Crees que tenía opción? Temía por mi vida— Ray se levantó viendo hacia a Don —Y estaba preocupado por ti.

—No tendrías por qué, se cuidarme sólo— Ray se cruzó de brazos —¿Por que te importa tanto lo que hago?

Ray ya no podía tolerar esa situación.

—¡Por qué eres mi amigo! ¡Por eso me preocupa el como estás!— Don se levantó llendo hacia el —Si no estoy al pendiente de ti...

—¡¿Que?! ¿Si no estás al pendiente que?— Ray había alzado la voz —No soy un niño pequeño, puedo cuidarme de mi yo solo.

—Si como no— Don se cruzó de brazos —Tienes meses sin tomar tus medicamentos. Sabes que son para que te mejores.

—Mi enfermedad no tiene nada que ver contigo— Ray lo empujó para que se alejara —Soy lo suficientemente capaz como para cuidarme solo.

—Si, por eso dejaste de tomar la medicina— Don se puso de sarcástico, aveces Ray se podía comportar como un niño pequeño —Y sabes perfectamente que no iba a hablar de tu enfermedad.

Ray no pudo contestar, sabía que Don habia estado con el desde el principio, siempre lo había apoyado y eso lo agradecía, pero también una pequeña parte de el se molestaba.

—No te necesito— susurro Ray pero Don lo había escuchado.

—Si así es entonces dilo fuerte y me iré— Don se acercó hasta el quedando frente a frente —Si me dices que no me quieres cerca nunca más, entonces me alejaré.

Ray lo miró con enojo, estaba tan molesto, sentía que lloraría en cualquier momento.

—Yo...— no sabía si lo que diría era lo correcto —Tengo miedo.

Ray agachó la cabeza empezando a llorar.

—No quería molestarme contigo, es solo que no se que es esto, no se por que pero siento una sensación extraña, algo que nunca me habia pasado— Ray iba a caer al suelo pero Don lo tomo abrazándolo —Creo que me enamoré.

Don se sorprendió mucho al escucharlo.

—¿De ese idiota?— Ray solo asíntio ocultando su cara —Le debo mucho dinero a Gilda.

—Esto es enserio— Ray se separó para irse a sentar —Yo... ayer pasaron muchas cosas y no sé cómo sentirme al respecto, apenas lo conozco, pero se que desde la vez en qué chocamos con el, algo paso dentro de mi.

—Eso tiene más dos años— susurro Don —¿Por qué no me dijiste nada?

—Por que pensé que si me alejaba de el todos esos sentimientos se irían, pero no pasó— Ray se sentía intranquilo —¿Es estúpido no? Que me guste un chico.

Ray empezó a reír, no podía creer que por primera vez tuviera esa conversación sobre sus sentimientos.

—¿Que pensaran de mi? ¿O de Norman? El es mucho mayor que yo y se que eso afectará bastante.

—¿Ahora te importa lo que dicen de ti?— Don se sentó a su lado —Mientras que tú y Norman se sientan bien juntos, nada más les debe importar.

—¿No te sientes incómodo con esto?

—Pues ya que lo dices supongo que lo vi venir, nunca hablamos de estás cosas y cuando yo te hablo sobre Gilda tú dices que las chicas son molestas— Don río al ver la expresión de Ray —Además, que te guste un chico es normal, nadie puede juzgarte por tus gustos.

Don limpio las lágrimas de los ojos de Ray alzando su cara

—¿Que te dijo Isabella?

—Ella dice que está bien mientras que yo me sienta cómodo.

—Ahí está, tienes el apoyo de tu madre y el de nosotros también, aunque todavía no confío del todo en ese tonto.

—Oye— Ray se separó de el al escucharlo.

—Tranquilo, solo cuido de ti— Don abrazo a Ray sacudiendo su cabello —Se que no soy la persona para decirlo, pero tal vez deberías decirle a Norman cómo te sientes.

—¿Crees que acepte?— Don suspiro al escucharlo.

—Literalmente parece que tiene escrito en la frente que le gustas, si no no te hubiera tratado así ayer— Don se levantó estirándose —Se que estarán bien juntos.

—Lo se, pero creo que es algo apresurado. Tal vez deba conocerlo un poco más— Ray se levantó poniéndose a lado de Don —Gracias y perdón por lo que dije antes.

—No es la primera ni la última pelea que tendremos— Don tomo su hombro dándole ánimos —Ahora vamos a comer algo, yo invito.

Ambos se alejaban del lugar, habían tenido una charla bastante larga y muy personal.

—¡Ahí estás!— una chica iba llegando al mismo lugar de donde Don y Ray habían estado hablando —Al ser el presidente de la clase sabes que no debes saltarte las clases, ¿Que haces aquí?

—Nada, necesitaba un tiempo para acabar unas cosas— un chico de cabello blanco se levantaba de enmedio de los arbustos de dónde estaba descansando —Se me aclararon muchas dudas.

—La profesora te busca, vamos— el chico se quedó en su lugar pensando, había escuchado bastante en tan solo ese rato —¿Pasa algo, Oliver?

—No es nada, vámonos.

¿QUE PODRÍA SALIR MAL? | TPN •NORRAY• Donde viven las historias. Descúbrelo ahora