Fatty

XVIII

Hanabi

El sábado llegó antes de lo que esperaba y, con la seguridad de que no voy a tener que cuidar a Arata, me empecé a preparar desde temprano. No soy muy quisquillosa con la ropa, de hecho me da un poco igual (prefiero ir cómoda) pero a última hora Emma me pidió hacer algunos dulces para la noche. No me molesté, en general adoro la cocina (solo odio fregar), pero eso me costó mi mañana durmiendo. Por suerte para eso de las cinco ya tenía toda la comida lista y empacada en cajas alargadas. Chifuyu y Keisuke las llevarán junto conmigo al dojo de los Sano.

Lo malo de ser productiva todo el día es que cuando por fin estás libre no sabes exactamente qué hacer y como no pienso llevarme un libro para un lugar donde va a reinar el desastre, agarré mi móvil y abrí Tik Tok. Hace mucho que no lo abro (por falta de tiempo) y por eso mi For You Page es bastante rara, pero nunca creí encontrarme algo tan asqueroso como el video que llevo reproduciendo como dos minutos.

Sé que varias chicas de la escuela tienen redes sociales, también sé que existe un club de fans dedicado al equipo de basket, pero nunca imaginé encontrarme con una acosadora de mi novio por Tik Tok mostrando una especie de ritual para atraerlo. Si fuera solo eso podría darme gracia, pero en una esquina se ve claramente una imagen mía con Baji donde estoy tachada con bolígrafos (me imagino cuanta tinta gastó en esa cosa). Literalmente la imagen está a tamaño real y yo parezco censura de manga yaoi. Por alguna razón guardé el vídeo en mi galería y favoritos y fue justo en ese instante que Keisuke y Yuyu llegaron a buscarnos a mí y a mis dulces. No comenté nada del vídeo, tampoco consideré hacerlo en un futuro, al menos no próximo.

-¿Cómo amaneció la mujer más hermosa de la tierra?- a veces me pregunto cómo funciona la cabeza de Keisuke. Un día es todo un romántico y al otro dice que no es para nada tierno. En fin, la hipocondría.

-No lo sé, ¿cómo amaneció tu mamá?- adoro arruinarle el momento cursi con respuestas que él no espera. Es gracioso como su cerebro carga igual de lento que el Internet Explorer y cuando por fin la información es procesada se la pasa haciendo pucheros inconscientes.

-Baji-san, por favor espabile, Emma-san nos va a pegar si llegamos tarde.- le tuvo que recordar su amigo rubio al haberse quedado congelado durante tres minutos completos. Para ese momento Yuyu y yo habíamos dejado las cajas en el asiento trasero de su moto, tocándome a mí esperar porque mi novio se montase en la suya para poder hacerlo yo.

-Si, si, si, ya voy.- el comentario fue suficiente para sacarlo del limbo y ambos pudimos partir rumbo al dojo después de que mi hermoso hombre dejase mis labios como cerezas.

El camino fue corto y los tres fuimos charlando de Peke J y la novia que al parecer se consiguió; una gata negra con botitas blancas que entraba de vez en cuando por la ventana del cuarto de mi chico. Fui la primera en bajar y correr a la parte trasera del enorme hogar, saludando a Izana-san y Shinichiro-san cuando pasé por el patio para llegar al área donde sería la fiesta. Detrás de mí los chicos también saludaron al dúo de hermanos que al parecer iba de salida (me juego mi salario a que Izana tiene una cita con Kakucho) y en cuestión de segundos fui ahogada por el pecho de Emma. Ojo, no me estoy quejando.

-¡Por fin llegaste! Pensé que por fin habías matado a Edward y estabas escondiendo su cadáver.- Mi rubia amiga solo fue separada de mí con ayuda de su novia, quien aunque también es mi amiga siempre termina celosa.

-Tus ganas de verme vivo en el futuro me enternecen mucho Emma.- Irobaji mood es gracioso como el dúo de hermanos Sano y mi pareja se tiran ofensas y malos deseos a diestra y siniestra, pero son los primeros en querer protegerse entre sí. Bueno, Emma no tanto, según ella esos sacos de testosterona y hormonas pueden cuidarse solitos. La broma deja de ser graciosa cuando le recuerdo que si los dejan solos se matan, pero en fin, cuentos para otro día.

-¡Por fin llegan tortugas y princesa!- Mitsuya por favor no me digas cosas bonitas que me sonrojan y si me sonrojo diré Nya. Digo, ¿qué?

-Los estábamos esperando.- Ay Mitsu, ¿por qué tu novio es tan bonito y adorable? Dan ganas de apretarle las mejillas, pero no llego, por enana.

-No creo que esos de allá nos hayan esperado la verdad.- bromeo cuando choco con el cuadro de mi mejor amiga besándose con su novio en una de las esquinas del dojo. Por suerte no están cogiendo, aunque son muy capaces.

-Detalles.- Mi costurero favorito mueve la mano para restarle importancia al asunto y en nada le quita algunas cajas de dulces a Yuyu para ayudarlo. Cuando el dúo de rubios teñidos siente el aroma de mi cocina pronto se separa y antes de decir cualquier cosa corren hacia mí, dan las gracias y en nada se encuentran asaltando la mesa donde los colocaron. Es Emma (quien salió de las garras de su novia a duras penas y con una marca rojiza en la clavícula) quien les golpea en la nuca para que no se los coman todos.

-Bueno, ya que estamos todos...- dijo la rubia a la que más respeto (porque nos golpea con cucharas de madera si se enfada). -Que empiece esta fiesta.- declara y es como una señal para Smiley pues enciende de inmediato el equipo de música que trajo. Pude notar como Angry golpeaba su frente cuando la primera canción empezó, al parecer reconociéndola en un instante. ¿Qué tanto la pondrá el melocotón en casa? Mis condolencias, arandanito.

Nuevo capítulo servido uwu
Mi familia está un poco enojada pues suspendí el primer examen de este año así que si dejo de actualizar diariamente es porque intentaré estudiar más. Odio hacerlo, pero también odio sacar malas notas. En fin, pasen buen/a día/tarde/noche. Les adoro <3