*El día seguía nublado de igual forma decido salir a dar un paseo, las pesadillas me roban el aire que una buena caminata era capaz de devolverme; me detengo, cierro los ojos e inhalo una emboscada de aire grande, pero lenta. Una gotita fría me hace abrir los ojos, al mirar arriba veo que suelo tomar malas decisiones. Comienzo a acelerar el paso, las gotas de lluvia comienzan a caer y cada vez con más intensidad lo que me obliga a correr hacia el techo más cercano, el frio viento de la posible tormenta me hace cruzar los brazos sobre mi pecho para intentar protegerme del frio.
En mi corrida olímpica por protegerme de la lluvia, salto unos cuantos charcos creyéndome atleta, antes de llegar a mi meta (el techo) debo dar un último salto, sin pensarlo dos veces doy el salto como toda una gimnasta, celebro en mis adentros la hazaña; al darme la vuelta para recostarme sobre el enorme vidrio mi mirada se pierde entre tantas piezas de arte, detrás de mi está uno de los museos de arte más importantes del país, al parecer hoy tienen una exhibición muy importante, muchas personas vestidas elegantemente y con copas de champan en sus manos, veo mi reflejo en el vidrio, mi cabello ondulado rubio dorado parcialmente mojado, el reflejo de mis ojos, me conmueve verme así, mis ojos llenos de preocupación y miedo por los fantasmas de mis pesadillas, las ojeras adornando mi pálida y fea piel, veo mi reflejo y solo puedo notar a una chica asustada.
A pesar de eso trato de mantenerme fuerte. Cambio mi atención una pintura colorida de un reconocido artista, es una pintura llena de vida, de la vida que sentía que en mi cuerpo poco a poco se iba.
-Disculpe -una voz femenina me saca de mis pensamientos-¿usted es la hija de los esposos Zaés?
Asentí al escuchar el apellido de mis padres.
-Por favor pase -me invita la amable señorita, abriendo la puerta de la galería para darme paso.
Con recelo accedo, aun sabiendo que mi atuendo( unos tejanos y una camiseta) no era lo adecuado para la ocasión, pero tenía mucha curiosidad por ver las obras que habían traído del extranjero. Al entrar muchas de las miradas caen sobre mí, las miradas de algunas personas se sienten pesadas e incómodas, pero al instante vuelven a concentrar su atención en las pinturas; la señorita me abandonó a mi suerte por lo que me dispuse a disfrutar de las diferentes obras de arte, una de ellas es extraña, camino de espaldas para tratar de entender la pintura, un brusco golpe me detiene.
-Lo siento, enserio, mil discul... -dejé de hablar al ver los extraños ojos con los que me encontré, uno verde y el otro gris con una notable mancha color marrón que casi cubre la mitad de su ojo, me aclaré la garganta.
-De verdad lo siento, no era mi intención- él seguía observándome con cautela, su semblante serio transmite cierta aura fría.
-¿Qué pasa? -pregunté por el notable silencio.
Él fija su mirada en la pintura.
-¿Sabes lo que es? -negué con la cabeza volviendo a ver la pintura - se llama el peso de los pensamientos.
Mi mente tardo unos segundos en entender la imagen, era una pintura de la escultura.
-Pertenece a...
- ...Thomas Lerooy -terminé por él -simplemente realista.
-Los pensamientos pueden ser peligrosos cuando se convierten en obsesivos, el peso del pasado -su mirada no se desvió ni por un segundo de la pintura.
-El peso del miedo y los fantasmas que pueden llegar a atormentarte.
-El peso de la culpa y el remordimiento.
-El peso de la tormenta de emociones que escondemos...
Me tomé un minuto para mirar al extraño chico a mi lado ¿Por qué compartía esto con un extraño? Me pilló mirándole, la intensidad de sus ojos asustaba, con la mirada fija en mí pronunció sus palabras.
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En medio de la tormenta
Mistério / Suspense¿Tú serías capaz de brillar en la oscuridad? ¿Serías capaz de atravesar tu propia tormenta de emociones? El juego ha comenzado antes de lo que esperábamos Пусть судьба будет на нашей стороне «Qué el destino esté de vuestro lado»