Criando a un Dragón

p l u m a

James entró a la oficina de Lucius sin preguntar. Lucius levantó la vista del permiso para construcción que estaba por firmar y miró extrañado al moreno, James trabajaba en la  ala opuesta del ministerio, mientras que James es el jefe de Seguridad Mágica, Lucius es el tesorero y candidato a ministro de magia, como decía; alas diferentes. Además por mucho que se considerarán familia o relacionados que estuvieran en el trabajo James era completamente educado, no se presentaba así a menos que fuera urgente, eso puso en alerta a Lucius.

—James ¿Pasa algo?

James se sentó frente a Lucius, solo un escritorio de distancia pero parecía como si el moreno no estuviera ahí. 

—James ¿Todo está bien?

James balbuceó algo inentendible, se veía alterado y Lucius se estaba preocupando en sobremanera. 

—James, por favor habla claro o me meteré en tu mente. 

Irguiéndose en su asiento, el moreno se aclaró la garganta antes de hablar. 

—Lamento interrumpir, es que necesitaba decirte.

Y se calló, Lucius quería golpearlo. 

—James habla ya o te crucia-

—¡Remus está aquí!

Lucius detuvo cada hechizo de movimiento en la oficina, bajó lentamente los pergaminos que aún sostenía y miró a James que seguía exaltado pero trataba de regular su respiración. Remus. Oh Remus. 

Lucius y James se miraron en silencio, cada uno pensando en la situación, llenándose de recuerdos. 

Lucius recuerda a Remus a la perfección, fue su primera relación seria, lo conoció en una fiesta de prefectos en la que se colaron Remus y sus amigos, los cuales eran James, Peter y Sirius, Lucius jamás les había prestado atención a los alumnos menores a él, a nadie no necesario a decir verdad, conocía a Bellatrix, Andrómeda y Narcissa porque iban en su grupo, Rodolphus había sido su amigo desde niño y ahí terminaba su círculo de confianza. Lograba ubicar a Severus, Barty y Regulus porque eran de su misma casa pero no les prestó particular  atención, ¿Ya había recordado lo poco que le importaba convivir? Bien, las calificaciones eran lo más importante para él. 

Entonces, Remus, sí. Remus le había llamado la atención apenas lo vio, estaba en un rincón leyendo mientras todos bailaban sobre las mesas, tipo raro, fue lo primero que pensó Lucius así que se acercó a él. Una decisión que aún no sabe si fue la peor o la mejor, hablaron toda la noche, literalmente, aún cuando James, Sirius y Peter se habían ido y trataron de llevarlo con ellos, Remus insistió en quedarse con Lucius. Fue el primer acercamiento. 

Después de ello Lucius buscaba a Remus en el comedor, en los partidos de Quidditch, en la biblioteca, Remus nunca pareció disgustado por ello, cuando Remus se sintió en confianza ahora era él quien buscaba a Lucius, ambos pasaban sus tiempos libres juntos y pronto sus círculos de amigos se volvieron uno y con los amigos de Remus venía Sirius, quien cargaba consigo a su hermano menor y sus amigos. 

Después ya no solo eran Cissy, Bella, Andy y Rodolphus, también tenía a Severus, Regulus y Barty charlando con él en la sala común. Exactamente un mes después de cumplir los diecisiete, Lucius le pidió a Remus salir formalmente, él aceptó. Lucius no entendió porque de pronto Severus lo evitaba o porque los tres slytherin menores se alejaron, el rubio supuso en ese entonces que se debía a que se acercaba la temporada de exámenes, años después descubrió que no fue así.

Aún cuando Lucius ya estaba fuera de Hogwarts, mantuvo su relación Remus, se enviaban cartas diariamente y Lucius iba a Hogsmeade cada quince días por lo menos para tener una cita con su novio, así fueron los dos años siguientes, cartas, escapadas a Hogsmeade, llamadas por red flu y pasaban las vacaciones juntos en un departamento que Lucius rentaba a las afueras de Londres, aunque muchos decían que no era algo fiable una relación así, ellos siguieron su relación, con el tiempo los pequeños slytherin volvieron a juntarse regularmente con ellos y todo iba bien, demasiado bien, la graduación de Remus fue algo que todos recordaron, no solo porque ese mismo año Peter, James, Sirius y Severus se graduaron, sino porque recordando que Remus amaba los clichés muggles; un Lucius de diecinueve años le propuso matrimonio a un Remus de diecisiete en plena graduación. Remus aceptó.  Nuevamente Severus se alejó.