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N/A: Esto es un pequeño regalo por el apoyo que le dan a este coso, espero les guste <3

[...❁...]

—Harry, siéntate correctamente. Draconis deja de jugar con las migajas.

Ambos chicos obedecieron a Regulus, Lucius y James rieron por lo bajo. Se encontraban todos en Malfoy Manoir, es el aniversario de Severus y Lucius, así que como cada año, ellos habían mandado a llamar a James y Regulus para que cuidaran de su hijo, Lucius decía "Es su ahijado haganse cargo" y el matrimonio Potter ya sabía a qué se refería.

Justo ahora se encontraban en el patio, tratando de tener una buena hora de té antes de que Severus y Lucius se fueran a tomar su traslador, sin embargo tener dos adolescentes complicaba la situación.

—Papá, ¿Por qué siempre hacemos esto?

—¿Hacer qué, Dragón?

—Tomar té antes de que me manden con el tío Regie y el tío Bambi.

Severus escondió una sonrisa tras su taza de té.

—Por qué es una tradición, hijo.

Harry y Draco se miraron sin entender.

—Ajá.

Regulus rodó los ojos. —Es especial para tus papás Draconis, no necesitas mucha información.

—Tengo quince años, puedo con mucha información ¿Verdad Harry?

Harry asintió fielmente. —Sip, nosotros podemos procesar esa información.

Lucius negó. —Tal vez crean que pueden procesar la información pero no, no quieren.

Harry y Draco miraron a sus papás y luego se miraron entre ellos, la mueca de asco no tardó en llegar, los cuatro adultos se echaron a reír. 

—¡No! ¿Por qué son así?

Harry lloriqueó contra el hombro de Draco. —Haz que las imágenes mentales paren.

—No sé que se habrán imaginado, —Comenzó James aguantandose la risa lo más que podía. —pero Lucius se refería a que solo es una historia demasiado larga, emotiva y romántica para ellos.

Draco miró a sus papás con los ojos entrecerrados. —Por mi salud mental, elijo creerles.

—Lo mismo que dijo él.

Severus rodó los ojos. —Solo lo hacemos, porque el día que tu papá me propuso matrimonio estábamos en una fiesta de té.

—Y cuando iba a entrar en labor de parto. —Siguió Lucius. —Estábamos aquí nosotros cuatro.

James rió. —Ojala pudieran haber visto a Lucius gritar, fue tan cómico.

—No fue gracioso, patitas de popote.

—Lucius...

—Eso Snive, controla a tu fiera. —Regulus pincho con el palito de su brocheta a James, esté de inmediato refunfuño. —Digo, por supuesto que no fue gracioso, fue un momento hermoso.

—¿Escuchaste eso Harry?

Harry hizo una mueca. —Hablar de tu nacimiento, es menos traumatizante que lo que mi mente estaba maquinando.

Severus rió. —Niños, necesitan terapia.

—Pero ya vamos a terapia papá.

Lucius tomó la mano de su esposo sobre la mesa y rió suavemente. —¿Por qué estamos hablando de terapias?

Criando a un DragónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora