Criando a un Dragón

p e l o

Lucius salió con su esposo al callejón Diagon, Severus se había quedado sin pelo de triton para hacer sus pociones y mientras llegaban las cajas que ordenó, necesitaban conseguir un poco de emergencia. Draco está al cuidado de Orion y Walburga, al igual que Harry así que decidieron salir juntos.

Hace un poco más de una semana, Lucius habló con Severus sobre Remus, diciéndole que según lo que James sabía, Remus también trabajaría en Hogwarts. Severus se conmocionó un poco, no al grado de James pero definitivamente tuvo un impacto en él, Lucius se encargó de recordarle y asegurarle que nada iba a cambiar, al menos no para ellos, Severus pareció tranquilizarse un poco. Es por ello que encontrarlo en la tienda de Sir Dolohov lo paralizó un poco.

Severus había ido a la trastienda con el encargado para poder escoger el pelo que más le conviniera, Lucius decidió esperar ahí, viendo los estantes porque las pociones no son lo suyo y cuando la campanilla sonó él no volteó, no tenía porqué, sabía donde estaba su esposo así que nada más podía importarle, pero aparentemente el visitante sabía que era él porque se acercó hasta estar tras él.

—¿Lucius?

Aunque la voz le resultaba vagamente familiar, Lucius no la reconocía volteo lenta y elegantemente, frente a él estaba un adulto castaño, moderadamente escuálido, los ojos cafés llenos de emoción le dijeron a Lucius quien era. Remus, pensó.

No es que Lucius no haya cambiado en dieciocho años, de hecho sus facciones se habían vuelto meno delicadas pero más allá de eso no cambió mucho, ni él, ni Severus, ni James, o cualquiera de sus amigos, podría decir que él más cambiado era Rodolphus pero Remus frente a él de alguna manera se veía diferente, muy diferente pero igual de anhelante que la última vez que lo vió.

Lucius carraspeó un poco. —¿Lupin?

Remus sonrió enormemente. —¡Cuánto tiempo! ¿Cómo has estado?

Lucius hecho un rápido vistazo a la cortina de la trastienda. —Sí. Bien, muy ocupado a decir verdad ¿Y tu?

Lucius no espero que Remus tuviera ánimos de charlar.

—Me imaginó, trabajar en el ministerio y a la vez ser candidato a ministro debe ser agotador.

Lucius asintió. —Sí entre el trabajo, la candidatura ser amo de casa y ser un padre responsable, poco tiempo para respirar.

La sonrisa de Remus cayó.

—¿Padr-

La voz de Severus interrumpió a Remus. —Cariño, solo tenían una libra tal vez si llamamos a Abraxas o vamos con Sirius.. —La voz de Severus sonaba distraída y Lucius lo miró negando suavemente con la cabeza, Severus no les estaba mirando, caminó hasta ellos examinando el frasco con el pelo y la hoja con las propiedades. —... si no tienen ellos, tendremos que ir a Par-

Severus levantó la cabeza por fin. Y fue al menos un minuto donde Severus se notó confundido, como decía Remus cambio bastante a diferencia de ellos. El castaño por su parte se notó completamente incomodó, como si quisiera desaparecer, Lucius no tenía nada de qué avergonzarse o dar explicación. Caminó hasta tomar el frasco de las manos de Severus.

—Los llamaremos en cuanto lleguemos a casa. —Lucius miró a Remus que solo los miraba fijamente. Carraspeando, tomó la mano de Severus. —Amor, ¿Remus Lupin, lo recuerdas?

Severus sacudió su cabeza suavemente. —Claro, un gusto verte de nuevo.

Rems sonrió forzadamente. —Lo mismo digo, bueno, debo irme, un placer. —Miró a Lucius cuando dijo. —Espero volver a vernos en otra ocasión, hasta luego.

Y salió rápidamente de la tienda.

El matrimonio Malfoy se quedó un segundo viendo la puerta.

—Vaya. —Comenzó Severus. —Eso fue...

—Extraño.

Severus asintió.

—¿Ya lo pagaste o debemos ir a pagar, cariño?

Severus lo miró sonriendo. —Ya lo hice.

Lucius asintió. —Bien ¿Quieres ir a otro lado antes de regresar a casa?

Salieron de la tienda, caminando de la mano como siempre lo hacían, las personas fuera os saludaban cortésmente y ellos respondían de igual manera.

Severus lucía algo distraído. —¿Bebé? ¿Vamos a otro lado?

Severus miró a Lucius y negó suavemente. —Creo que no me falta nada más.

Lucius conocía esa aura en su esposo, han estado casados casi dieciséis años, siendo pareja dieciocho, pero Severus sentía algo por Lucius desde que tiene buena memoria y en todos esos años no había nada qué descolocará tanto a Severus como Remus, el castaño siempre ha sido un dolor profundo e inseguridad para Severus, uno creería que siendo adultos pasaría pero no era así y Lucius no estaba dispuesto a que su esposo dudara de si.

—Qué te parece... —comenzó diciendo Lucius apretando más el agarre en sus manos. —que tengamos una cita.

Severus lo miró con una sonrisa bobalicona. —¿Justo ahora?

—Sí vamos, hace cuanto no salimos sin Draco ¿Tres meses? ¿Cinco?

La bonita sonrisa de su esposo no se borraba. —Sí, algo así.

Lucius se detuvo haciendo que Severus lo hiciera también. —¿Qué dices cariño? Draco esta bien y Orión ama pasar tiempo con sus nietos o podemos ir a casa y luego vamos por Draco.

Severus rio pero asintió. —De acuerdo.

Lucius dejó un rápido beso en los labios de su esposo. —¿De acuerdo? ¿De acuerdo qué? ¿Vamos a caminar y pasar el rato? ¿Vamos a casa y estudiamos anatomía avanzada en conjunto con la lengua del amor?—Dio otro beso a su esposo. —Dime.

El pelinegro rio más alto, esta vez echando su cabeza un poco hacia atrás. —Basta, necesitas alejarte de James.

Otro beso. —Dime, amor ¿Qué hacemos?

—Me parece que podemos ir a casa y cerrar la red flu por un rato.

Lucius sonrió viendo a su esposo con los ojos entrecerrados. —Bien, lo que el señor Malfoy diga.

Y Lucius los hizo aparecer en la sala de Malfoy Manoir, apenas llegaron Severus arrojó sin cuidado el frasco con pelo y las instrucciones y arrinconó a su esposo en la pared más cercana. Lucius sonrió antes de dejarse hacer en los brazos de Severus, bueno nada más importaba en ese momento.

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Voy a decir que amo a Remus y este fictober no es angst, metí esto a la trama porque la relación de Severus y Lucius necesitaba más, porque son más que solo padres, en un par de días Draco estará en su escuela y se intercalaran los capítulos de Snucius Padres y Snucius Pareja.

Aquí necesito que me contesten con toda la sinceridad porqué de aquí va a depender los siguientes días del fictober;

¿A qué escuela deberían ir Draco y Harry?

Ya saben las opciones, en verdad aunque no vuelvan a comentar más o sean lectores fantasmitas necesito su respuesta :(

Gracias por el apoyo que le están dando a este coso, me hace feliz que les guste.

Nos leemos mañana.

Ily, Pickly.