[ 4 Hermanos💜]

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Mi celular no paraba de sonar, a la octava llamada decidí responder.

—¡Kurai! ¿Dónde estás? —gritaba mi amiga Charlotte al otro lado de la llamada.

—En la escuela Charlie ¿Paso algo? —traté de sonar lo más natural posible, para que no se diera cuenta que estaba llorando.

—¿Y tú qué haces allí? —preguntaba Charlotte confundida, pues ella creía, que estaba con Seiya.

—Vine a cambiarme el kimono ya me iré a casa.

—Yo también estoy en la escuela ¿Donde estas? —empero la rubia.

—Charlie no es necesario ya me voy a...

—¡Dime Kurai! —exigía la rubia perdiendo la paciencia.

—En la azotea. —Respondí resignada al interrogatorio, que se me vendría en unos minutos.

Me levanté, saqué un pañuelo para limpiar las lágrimas  —de seguro mis ojos han de estar hinchados. —Miré el pañuelo en mi mano y las ganas de llorar volvieron era el mismo pañuelo que Seiya me había dado hace algunos días atrás. Me acerqué a la baranda el sol se ocultaba de a poco.

—Ya tiene novia, me pregunto hace cuánto serán novios, no se que me dolió más si el saber que ya tenía novia, o ver la mirada que tenía al ver a esa chica. —Suspiré desecha.

—¿Qué ocurrió? —preguntó Charlotte agitada, quizas por haber corrido hasta aquí.

No quería voltearme pero muy a mi pesar lo hice, no quería llorar más pero las lágrimas amenazaban con querer salir, Charlie entendió el mensaje y corrió para abrazarme.

—¿Te rechazó?  —inquirió la rubia.

Negue cómo respuesta.

Me solté de sus brazos, para explicar lo sucedido. —No le dije nada.

Charlie me miró confundida.

  —No entiendo ¿Qué pasó para que estés así?

—Tiene novia.

La mirada esmeralda de Charlotte, se abrió al máximo, su boca se abrió en una perfecta "O" sin saber que decir. Luego de meditarlo unos segundos el bombardeo de preguntas comenzó. —¿Hace cuánto? ¿Y quién es? Y lo más importante según tú, es tu mejor amigo y no te contó algo así hombres todos son unos hijos de...

—Es una chica muy linda su nombre es Unazuki Furuhata y pues es mi amigo, pero no tiene porqué contarme todo. —Ya estaba cansada solo quería ir a casa y no salir.

—Lo siento Kuri chan.

Miré a Charlie confundida, sin saber porque pedía disculpas.

—¿Por qué lo sientes?

—Te animé a confesarle tus sentimientos a Seiya.

Negué pues no culparía nunca a Charlotte ella, tenía la mejor intención, pero a veces las cosas no salen como uno las espera y son impredecibles.

•••

La madre de Charlotte, paso por ella y me llevó a casa, recordándome que mañana sería el gran día. Allí estaban mi hermana y Sasame ambas preparaban una charola con pasabocas, pero mi hermana no tenía buena cara.

—Hola ¿Hay reunión? —pregunté mientras me servía un poco de agua, ambas asintieron.

—Si te dijera vas a quedar de piedra  —Decía Sasame con voz de intriga.

—¿Qué pasó...?

—¡Habra boda en esta casa!

Las palabras de Sasame ciertamente me dejaron de piedra ¡Boda! ¿Cómo así?
—¡Seiya se casará si sólo tiene dieciséis! —exclamé por demás exaltada adelantándome a los hechos. Mayu y Sasame me miraron más que extrañadas por mi reacción.

Siempre Has Sido Tú 💜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora