[33 Amargo Encuentro. 💜]

13 2 0
                                    

Miraba como las nubes poco, a poco, se comenzaron a disipar tras el amplió ventanal.

—Yaten.

Al escuchar la femenina voz el nombrado se puso de pie para saludar a la recién llegada, frente al albino estaba una mujer alta, tes morena de bronce y una larga cabellera lacia en tono cobre perfectamente peinada ni un solo cabello fuera de su lugar, su vestimenta consistía en una falda entallada al cuerpo que resaltaba su escultural figura de color beige, rematada por una blusa blanca con un complicado pero acertado diseño en su escote, por último unos tacos en el mimos tonos que la falda terminaban de armar armoniosamente su apariencia.

—Akane —saludó confiado a la guapa morena—, tiempo sin verte.

—Oh yo también tengo mucho sin verte, pero se de primera mano que a ti y a los otros dos les va muy bien. —La morena tomó asiento tras su escritorio posó ambas manos en la pulida madera.

—Linda oficina, recuerdo que la última vez que te vi eras solo una reportera de exteriores, me alegra que tu carrera fuera en ascenso. —Felicitó el albino con honestidad.

—Gracias cariño, yo también me alegro por ti y Taiki se que su academia de música les va muy bien —respondió Akane con la misma sinceridad—, pero dime Yaten a que debo tu visita. No estás aquí solo por mi o ¿Si?

Tomó asiento frente a Akane, en efecto tenía otro motivo para verla. —Siempre tan intuitiva señorita Karazuma,

—Bueno entonces ya dime cariño, que te trae por estos rumbos, si tú y tus compañeros dijeron que ya no querían que los medios se metieran en su vida...

—En nuestra vida personal Akane —corrigió Yaten —, tenemos familia a las que no les interesa este medio. —Explicó el ojiesmeralda.

—No hablas de ti, tu esposa está también bajo reflectores, dime sin rodeos ¿Qué te trae aquí?

Suspiró derrotado esa mujer era imposible de persuadir, descansó al igual que Akane sus brazos en la pulida madera del escritorio, mirando fijo a la morena frente a él.

—Mimi Yaníu.

—Ves guapo así, si nos vamos entendiendo —habló la  exótica morena esbozando una sonrisa mostrando su impecable dentadura—, Mimi me habló de su gran programa el viernes y ahora estás tú aquí, intuyo que su chisme tiene que ver contigo o uno de los tuyos.

—Iré al punto Akane, Mimi abordó a Seiya junto a sus hijos y...

Sus palabras se cortaron al instante recordando que allí estaba Kurai, era por ella que Seiya no quería que esto saliera a la luz, para empezar Mimi era conocida por sacar las cosas de contexto y para que negarlo, lo dicho por su amigo pelinegro podría fácilmente ser mal interpretado.

—¿Y bien? —cuestionó Akane al ver que Yaten no terminaba de hablar.

—Solo te digo que en esa entrevista salen tres menores de edad, si Mimi trasmite esa entrevista sabe que se puede enfrentar a una situación con consecuencias grandes para su programa, puesto que no hubo consentimiento previamente con los padres de los niños.

—Buen argumento chico, pero no lo suficientemente bueno como para impedir que Mimi transmita la entrevista, además quién debería estar aquí es Seiya quien es el involucrado en este asunto. —Respondió Akane con ironía.

—Yo...

El albino detuvo sus palabras a medio camino, la puerta a su espalda fue abierta, miró tras su hombro.

La pelinaranja recién llegada abrió sus ojos al máximo al ver al albino sentado frente a su jefa.

—Oh siento no haber tocado Akane, hola de nuevo Yaten querido —saludó la mujer de llamativas pecas cerrando la puerta tras su espalda—, supongo estás aquí intentando hacer que Akane me haga desistir.

Siempre Has Sido Tú 💜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora