Siempre Has Sido Tú 💜

[6 La propuesta 💜]

Han pasado casi tres años desde que comencé, a ser parte del servicio de la mansión Chiba, se suponía que solo sería mientras mi hermana cumplía su reposo, pero pues seguí trabajando aún después de que Mayu se recuperó. Tenía varios motivos por los cuales seguí allí trabajando: la primera de esas razones era que dos sueldos era mejor que uno, la segunda era que debía ahorrar, para ir a la universidad ya estaba en mi último año de preparatoria, la verdad trabajar me ayuda a no pensar y por último, papá está todo endeudado y si no pagamos puede perder la casa y pues Mayu y yo no queremos perder la casa de nuestra madre.

Preparaba el desayuno de la señorita Setsuna, ella y Mamoru se casaron hace un año y por pedido insistente de la señora Kakyou ambos viven aquí, Mamoru a culminado su primer ciclo de quimioterapia para él ha sido un año complicado pero aún así sigue intentando.

—La fruta perfectamente picada, el omelette de claras está listo y las tostadas de pan de centeno y queso mozzarella y jugo de naranja están listos, la señora está intentando nuevamente ¿Verdad?

—No lo sé Sasame. —Me encogí de hombros, haciendome la desentendida, Setsuna y Mamoru previniendo la situación de Mamoru tomaron cartas en el asunto y decidieron guardar material genético, para a futuro poder ser padres, ya que era un deseo de ambos. En el primer año de matrimonio la señorita Setsuna lleva dos intentos y ninguno ha llegado a termino.

—No te hagas Kurai sabes que cuando, la señorita pide tanta comida, es porque cree estar embarazada.

Suspiré cansada, a veces Sasame se excedia de curiosa. Tomé la charola con el desayuno y me disponía a irme pero Saki y mi hermana venían entrando a la cocina.

—Kurai lleva el desayuno a la señora Setsuna y vuelve hoy tenemos mucho que hacer.

—¿Qué? —dije algo molesta, pues Saki sabe que los fines de semana, son libres para poder estudiar, estoy en mi último año de preparatoria.

—Si ya lo sé niña pero hoy abra una cena importante y vendrán personas allegadas a la familia, por orden del joven Seiya no se contratará agencia de buffet ni festejo, así que tocará hacer todo nosotras mismas.

—Esta bien. —No tenía de otra, detrás de Sakí Mayu me miraba suplicante.

—Perfecto ahora ve, no hay tiempo que perder.

•••

Caminaba por el pasillo del segundo piso, toqué tres veces la puerta, al oír la afirmación de la la señora Setsuna entré. La vi con sus ojos algo rojos y su rostro hinchado, al ver la ropa de bebé en su cama entendí porque su estado, tan demacrado, otro intento fallido.

—Llevate eso Kurai.

—Pero señora, el señor Mamoru me pidió que...

—Kurai por favor no quiero comer, solo déjame sola si. —Pedía la morena en un hilo de voz.

Me dolía verla así, en el tiempo que llevo conociendo a esa chica le he tomado apreció, a pesar de verse perfecta, inalcanzable, Setsuna Meiöu no era la típica top model superficial, era un alma sensible, a veces algo rota y triste.

Tomé la fruta picada y me acerqué a ella. —Almenos coma algo de fruta si.

—No por favor Kurai llévate todo.

—Coma un poco por favor si —no quería ser atrevida, pero no podía verla así—. Un poquito si no la voy acusar, además ese bebé que pronto llegará necesitará a una mamá fuerte. -No debí yo es decir...

—No está bien dame comeré la fruta, pero llévate el resto si.

—Esta bien, —Me levanté de la cama, tomé la charola pero antes de salir de la habitación me entró la curiosidad.