47 - Merry & Happy P2

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Habían pasado ya unas semanas luego del aberrante incidente, todas estaban enteradas en el grupo y para extremar precauciones crearon un sistema de acompañamiento o "buddy system", en el que a partir de hoy quedaba estrictamente estipulado que nunca dejarían a una integrante sola bajo ninguna circunstancia.

Del mismo modo, se llevó un exhaustivo escrutinio entre los mánagers dejando ir a aquellos que se les comprobó vender rumores sobre las jóvenes en diversas publicaciones y se contrataron más mujeres en el staff pero con una característica adicional, tener entrenamiento en algún tipo de arte marcial que pudiera poner a salvo a las jóvenes en una situación de crisis.

El presidente de la compañía tomó muchas medidas de precaución pues era el grupo más rentable de su empresa y con quienes ahora ganaba un jugoso negocio a través del convenio de Mina y su amigo Haru. Eran sus 9 niñas -como él las veía desde siempre- que debían ser protegidas a toda costa tal y como sus propios padres les protegiesen.

Se les informó que para el proximo año vendría un nuevo proyecto para Japón así como un cambio de dormitorio a departamentos de lujo en los que ahora vivirían en grupos de 3 y no todas en un mismo lugar peleando por dos míseros baños, todo esto, gracias al patrocinio de un nuevo socio dispuesto a ofrecer todo tipo de comodidad posible al grupo de la nación.

A pesar de las condiciones en las que habían vivido hasta ahora, las chicas sugirieron tener dos cosas en éste nuevo lugar, un área para compartir vida en común y un área exterior amplia y privada, de ser posible que contara con piscina y gimnasio. Algo que disfrutaban bastante de su actual dormitorio era el acceso que tenían a la terraza, los múltiples intentos de picnic y noches de asar bombones se habían arraigado como una de sus prácticas favoritas en grupo al estar en descanso.

El día estuvo lleno de cambios, información, sorpresa y el anuncio de más trabajo por venir. Fue sin duda agotador recibir todo de golpe pero era necesario, las vacaciones de invierno ya tocaban la puerta y en ésta ocasión todas las extranjeras irían a sus respectivos países para estar con su familia. Mina y Chaeyoung seguían distanciadas sin hablar a profundidad y aunque no se habían confrontado eran cordiales sosteniendo someras conversaciones superficiales.

Ahora, la bailarina lidiaba con su particular situación de matrimonio arreglado y aprovechó el distanciamiento para evitarle más decepciones a la menor quien se enfrentaba a exámenes finales. Ésta última semana también era la última oportunidad que tenían para arreglarse o no antes de separarse por las vacaciones pero, encima de todo, también tenían que dejar sus cosas empacadas listas para que el servicio de mudanza las llevara a su nuevo hogar.

***

-¿Crees que deberíamos conservar ésta?- preguntó Jeongyeon mientras envolvía una colección de tazas de cerámica con papel de revista.

-Uhm... recuerda que "si no inspira felicidad tienes que dejarlo ir"... - dijo Nayeon concentrada haciendo una lista de cosas, separando lo que llevaría a casa con su madre y lo que dejaría en el nuevo dormitorio.

-Ya... es difícil para ti supongo, todo te inspira felicidad, he me aquí empacando tus cosas...- decía con burla la alta.

-Okay... - se puso de pie tomando a Jeongyeon por los hombros y entre cerrando los ojos preguntó- uuhmmm... ¿me inspira felicidad?

-¡¡Oye!!, no soy un objeto... aunque... bueno, pensándolo bien... ¿cuál es la respuesta?

-Hahaha... tontita - dejó un beso rápido en sus labios- por supuesto que me inspiras felicidad, a ti te conservo.— La otra joven respiró aliviada no sin antes darle una mirada con puchero integrado, -¡eres encantadora! - dijo la mayor apretando sus mejillas.

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