51 - Wake Me Up (!)

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Lo inesperado, terminó sucediendo...

Jeongyeon y Nayeon llegaban al hotel luego de sus excitantes compras. En cuanto cerraron la puerta tras de sí comenzaron a besarse frenéticamente, habían pasado por tanto como querer detenerse siquiera a pensar en nada. Sus manos acariciaban la espalda y sus cuerpos se unían sofocandose en el calor que generaban.

- Jeon... mmhmh... Jeong... - Nayeon intentaba hablar pero era invadida por el vehemente deseo de la alta hasta que con sus manos la detuvo separándose mientras agitada intentaba tomar aire... - espera... uufff... esto..., esto está genial y yo no puedo esperar más pero déjame hacer algo antes ¿si?, necesito ir al baño.

- ¡Nayeon!, deja de interrumpir... si queremos que ésto suceda creo que ya deberíamos haber aprendido la lección... no hay que planear tanto y solo, solo hacerlo. — se acercó a invadir el cuello de la mayor con besos.

- Lo sé, lo sé... pero te prometo que valdrá la pena, anda... es difícil incluso parar para mi también — le volvió a alejar diciendo — vamos, ve y ponte cómoda, pon una peli mientras, o juega a algo, no tardo.

Jeongyeon se tumbó sobre la cama con un puchero para luego ponerse cómoda, demasiado cómoda sin tanta capa de ropa... le emocionaba finalmente estar tan cerca de hacerlo con Nayeon, sin interrupciones, extraños eventos naturales, o incómodas posiciones en la parte trasera de una camioneta.

Se deshizo de algunas prendas para quedar más ligera pero sin duda prefería que su pareja le ayudara a quitar el resto, sacó su teléfono para ponerse a jugar pero notó que la batería estaba por terminarse, suspiró y tomó el control del televisor, comenzó a navegar por todos los canales sin que algo en particular captara su atención hasta que encontró un canal de música, ajustó el volumen y se dijo a sí misma, 'bien, ahora... a esperar un poco más...'

Luego de unos minutos Nayeon salió del baño enfundada en la adquisición que había hecho en aquella tienda que fortuitamente encontraron en su camino. Poco a poco su gusto por la lencería crecía al desear mostrarse con un perfil más sensual y madura, le preocupaba que el personaje aniñado que daba a conocer a los Onces fuera la imagen con la que Jeongyeon le juzgara...

Caminó sigilosa siguiendo el sonido de la música que tocaba la televisión, iba hacia el encuentro con una Jeongyeon que ahora mismo... yacía dormida profundamente...

Verla en ese estado le permitía contemplarla con tranquilidad, tal vez era tachado de rareza ver a la gente dormir, pero admirar la belleza que la rubia poseía la hacia querer dejar de ver su propio reflejo para seguir enamorándose de esa joven que cuando estaba despierta podía ser un verdadero torbellino de bromas y travesuras.

Se cubrió con un camisón para dormir y se acomodó a su lado intentando no despertarla mientras la cubría con el edredón. Uno pensaría que vivían en el eterno dilema entre querer despertarla o dejarle dormir pero las vacaciones eran para eso, para finalmente cerrar los ojos un momento lejos del ajetreo, quedar en silencio consigo mismas, y callar todos los estímulos con que el mundo exterior les bombardeaba a diario. Nayeon entendía perfecto solo lo que ellas vivían como idols en ascenso.

Poco a poco Nayeon cerraba los ojos, comenzaba a pensar en cosas sin sentido indicativo de que pronto terminaría dormida. Cayó en un sueño extraño en el que hacía de científica en un laboratorio donde Jeongyeon unía le abrazaba por la espalda haciendo que ésta sacara corazones de los líquidos que mezclaba en sus experimentos... un sueño que bien sonaba como una realidad alterna.

Unos sollozos a lo lejos se escucharon haciéndola despertar nuevamente, volvió a escuchar los quejidos de Jeongyeon y giró a verla, ésta pasaba por una pesadilla que comenzaba a hacerla estar intranquila, su rostro se transformó en uno con miedo mientras lloriqueaba y murmuraba palabras sin sentido.

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