30 - Likey

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Japón ya hacía viral el emblemático gesto de TT, no había persona que no conociera el movimiento y de manera automática era el símbolo relacionado con el grupo que había conquistado por completo a toda la nación (propia y extranjera).

Las jovencitas clamaban los nombres de las integrantes de la J-line "¡MI-SA-MO!", cada una de ellas había hecho un sacrificio particular para estar donde estaban y ahora volvían a casa con la frente muy en alto.

De igual modo la belleza de Tzuyu destacaba, la maknae tenía un poder visual que hacía voltear a todos y convertirlos en seguidores... un poder que ni la diosa misma lograba pero que admiraba con mucho cariño de la taiwanesa.

Toda la preparación previa rendía frutos, los premios llegaron a manos llenas, y los charts fueron golpeados como nunca antes por la ola del fenómeno en que se convertía Twice. Si alguien les dijese que toda esta locura sucedería, no era siquiera posible que pudiesen imaginarlo. El grupo se fortalecía de manera tal que todas desarrollaban sus roles y confiaban entre ellas para que luego en conjunto lograran abatir los récords y sobrellevar los retos.

El miedo era latente pero no podían dejarse amedrentar, sus pasos eran seguidos centimetro a centimetro por guardaespaldas y otros, el hecho de pasear por la calle aún era relativamente posible sobre todo en el país Nipón, pero poco a poco el llamado de las chicas por su nombre comenzaba a hacerse más notorio entre los fans que caminaban a los alrededores, se escuchaban con tímidas risas entre chicas con uniforme, "Sana chan!", "Momo chan", "Tzuyu chan!!", jóvenes que agitaban sus manos saludando y que al ser vistos rápidamente bajaban la vista cubriéndose con las manos el rostro riendo como chiquillos de secundaria enamorados.

Las miembros de Twice regresaban los saludos cariñosamente, hacían reverencias y de igual modo se reían tímidas, les hacía sentir la dualidad de su carrera, y cómo todo se sentía aún tan nuevo... por ahora lo disfrutaban.

En este importante debut en Japón había también viajado la familia de las jóvenes de Corea y la familia de Tzuyu. Mina no sabía qué esperar de su familia puesto que las exigencias de que contrajera matrimonio después de estar en el grupo se habían detenido luego de aquél momento en que fue diagnosticada con anemia, así que quería aprovechar para armarse de valor y presentar a Chaeyoung ante su familia como su pareja.

- ¿Mina?, ¿estás bien? - preguntó la mamá de Chaeyoung quien rápidamente olvidó el origen japonés de Mina y la adoptó desde hace tiempo como si fuese su propia hija. Se podría decir que todos en la familia de Chae se habían enamorado de la bailarina por su agraciada manera de ser y sobretodo la amorosa manera de querer a su preciado tigresillo.

- Lo siento, estoy... muy nerviosa. Incluso más de lo que estaba en el concierto debut.

- No estás obligada a nada Mina, llegará el momento indicado para poder hablar con tu familia, hoy es un buen día para disfrutar, ¿no creen? - dijo Chaeyoung, y su mamá ahora tomaba la mano de Mina para llevarla gentilmente por la calle mientras paseaban.

La maknae aprovechó para sacar una fotografía del momento, era tan simbólico que tenía que ser capturado; 'no cabe duda que el amor cura, salva, y lo puede todo' pensó Chae para sí, 'espero que sea igual con la familia de Mina.'

Esta vez, todas las jóvenes junto a sus familias visitaban áreas icónicas de Tokyo y centros comerciales. Formaron grupos y se dividieron para visitar distintos puntos de las zonas, comían, y compraban múltiples recomendaciones que las jóvenes de Japón les señalaban.

- Alguien está emocionada de poder comprar sus bocadillos favoritos... - decía Jihyo con ironía al ver a Momo cargada de pequeñas bolsitas de snacks, la dancing-Mochine no podía ni hablar ya que hasta entre sus dientes tenía bolsas de dulces que extrañaba de su país natal.

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